Promise. ⇨Park ChanYeol⇦

06

—¡JiHyun, arriba! —Gritaba Kai mientras jalaba mis pies y Kyung trataba soltar mis manos de la cabecera de la cama.

—¡¿No deberían estar en su casa durmiendo?! ¡Son las siete de la mañana, dejen dormir!

—Tienes escuela. —Gracias por recordármelo Kyung.

—Dejen dormir. —Murmuré antes de que alguien hiciera cosquillas en mis costados, haciendo que soltara la cabecera de la cama. Maldito LuHan.

—¡Yah! ¿No pudiste avisar? —Cuestionó Kai desde el piso.

—Uy que delicado. —Respondió Lulú mientras que me sentaba en la cama.

—¿No tengo que usar uniforme o sí? —Realmente odiaba los uniformes.

—Hasta donde nos dijo la tía Yuna, no, no tienes que usarlo.

—¡Al fin! Ahora, afuera, necesito bañarme. —Los empuje por la puerta y la cerré con seguro. Eran capaces de entrar si no ponía seguro.

Diez minutos después, salí del baño, encontrándome a mi tía, poniendo unas ropas sobre la cama. Una falda rosada y una blusa blanca y luego saco mis Converse blancas. ¡Al fin, otra persona más que apoya mis gustos!

—Bajas a desayunar cuando estés lista, cariño. —Me dijo y salió de mi habitación. Seguro había usado la llave.

Trencé mi cabello de lado, para que quedara sobre mi hombro derecho. Pasé la blusa por mi cabeza, me coloqué un short de tela negro y luego la falda. Me puse unas medias tobilleras blancas y mis zapatillas. Salí del cuarto y bajé las escaleras.

—¡Ya era hora! Oye qué bonita. —Murmuró LuHan.

-Desayuna y nos vamos, mi hermano te llevará, pero iremos todos en el auto, él te llevará hasta la dirección ya que es mayor de edad. -Dijo Kai con la boca llena. Iugh.

-Ya, déjala comer.

—JiHyun, teléfono. —Mi tía colocó el teléfono al lado de mi vaso. Tenía el altavoz encendido.

—¿Jiji?

—Buenos días ChanYeol. ¿No deberías estar en clase?

—Aún no estoy de ánimos. ¿Tú no deberías estar en clases?

—Entro en una hora. Creo.

—¿Es tu novio? —Preguntó Kai.

—Cállate o te apuñalo con el tenedor.

—Uy, qué carácter. Tú me lanzaste un tacón de mi mamá, no sé porque esto no me sorprende. —Hablo Chan. Dios, como lo extrañaba.

—Sabes cómo es mi actitud, nos conocemos desde el año. —Los chicos veían atentamente mis movimientos y mis gestos, y le prestaban atención a la mínima cosa que decía.

—Bueno, te dejo, tengo que ir a casa de JongDae, SeHun está allá, y tú tienes clases en un rato. Adiós, Jiji.

—Adiós...—Y colgó. Que rápido—. ¿Quién rayos es SeHun? Hasta donde yo sé en mi grupo no había nadie llamado así. —Murmuré metiendo una gran cucharada de cereal en mi boca.

※※※

—¿Kim JiHyun? —Preguntó un hombre de unos cuarenta años. MinSeok se levantó al mismo tiempo que yo—. Te llevaré hasta tu salón, allí tu profesor te dará tu horario. Puede venir a recogerla a las tres, joven.

—De acuerdo. Nos vemos, princesa. —Soltó mi mano y salió por la puerta. El señor me indico que lo siguiera.
Después de tanto caminar por un pasillo, se detuvo frente a una puerta.

—Profesor Shin. Le traigo a la estudiante de intercambio de la DaeSung.

—Muchas gracias profesor Huang. Por favor, adelante. —Di tres pasos y ya estaba dentro del salón. Había 30 estudiantes en el—. Chicos, quiero que le den la bienvenida a su nueva compañera, Kim JiHyun, viene del instituto DaeSung, creo que la mayoría saben de cual se trata.

—Es un instituto privado. Me dijeron que allí solo asisten chicos con dinero. —Hablo una chica.

—O simplemente, chicos, los cuales sus padres se esfuerzan en su trabajo para tenerlos en un buen colegio. —Murmuré.

—Choa, basta, JiHyun, por favor, ocupa el puesto vacío de la cuarta fila. Señor Byun, por favor trate bien a su compañera. —Un asentimiento de cabeza fue lo único que recibió por parte del chico.

—Hola. —Hablo el chico a mi lado—. Soy BaekHyun, Byun BaekHyun. Y tú, JiHyun, Kim JiHyun. Vi tu nombre ayer en el tablero de los nuevos.

—Oh, bueno. Mucho gusto, BaekHyun. —Me sonrió. Que linda sonrisa. Y parecía un cachorro, luego de esa conclusión, ambos nos dedicamos a ver al frente.

※※※

—Bueno niños, eso es todo. —Hablo la profesora Lee justo cuando tocó el timbre de salida. Solo he convivido ocho horas con BaekHyun y ya éramos algo cercanos. Conoce lo básico de mí, como yo de él.

—¿Cuándo te quitan el yeso? —Le pregunte mientras metía mi horario en mi maleta.

—Según mi mamá, en dos días. Quiero quitármelo ya, y volver a bailar. Aunque, debo ir a terapia.

—¿Bailas?

—Sí. En una escuela de baile que abrió hace poco, pero tiene una gran matricula. Buenos maestros. Muchos estudiantes. El hijo del dueño está en la misma clase que yo, Zhang Yixing, pero lo llaman...

—Lay. Lo sé. Yo le puse ese apodo. Yixing es mi primo. —Lo interrumpí. Levante la vista y más adelante estaba MinSeok esperándome, como había dicho en la mañana—. Debo irme, adiós Baek. —Lo dejé allí, confundido, moviendo sus labios, pero sin pronunciar palabra alguna. Que adorable—. Hola Xiu.

—¿Me cuentas como te fue en el camino? —Asentí y me abrió la puerta del auto me subí y el cerro, rodeando el auto por delante, subiéndose a los segundos.

—Conocí a Baek. Es agradable.

—Se lleva bien con todos en la DEF. Aunque se concentra un poco más en el canto

—Me dijo que tal vez estaría regresando a la escuela el próximo fin de semana.

—Uh, a Andy le encantará esa noticia. Es uno de sus favoritos, bueno primero mi hermano, después Yixing, LuHan, KyungSoo, Baek y creo que tú.

—No me ha visto bailar de verdad.

—No eres una de esas chicas que parecen una máquina de baile, ¿o sí?

—No sé si ese sea el termino correcto, pero tengo talento. Pero no lo demuestro, solo cuando la situación lo amerite.

Hablamos durante todo el camino, ya empezaba a tomarle cariño, ¡Me compró un helado!

—Uh, creo que alguien llego temprano. —Comentó cuando estacionó el auto. Ahí estaba el auto de mi papá.

Abrí la puerta y bajé de un salto de la camioneta. Corrí por el patio delantero y abrí la puerta. En la sala, estaba mi papá, mi primo y los chicos.

—Te estaba esperando, pequeña.

—¿Qué le paso a Lay? —Se veía algo pálido y ansioso.

—Sus hermanas ya van a nacer, tía Yuna se fue hace poco. Estábamos esperando a que llegaras para ir al hospital. —Respondió Kai.

—Bueno, ya llego JiHyun. —Mi padre se levantó del sillón—. Vamos niños, Yuna me dijo que los llevara a todos, ella hablo con sus madres.