Capítulo 19: Verdades.

5.7K 525 44
                                    




Los días pasaron y nada había mejorado entre Cristian y yo. Solía verlo a diario en la escuela y en los entrenamientos, muchas veces intercambiábamos miradas, en el podía verse récor o resentimiento hacia mí. Sé que lo que hice, o más bien deje de hacer, estuvo mal. Pero no pude evitar estar con scarlett ese día. Lo extraño, extraño su forma de ser, extraño las bromas que nos hacíamos, las salidas, simplemente extraño estar con él.

Salí de mi casa más temprano de lo normal a la escuela, hoy los Collins no me llevarían así que decidí caminar. El día era gris y frio, era como si el cielo estuviese triste y a punto de romper a llorar. La temporada de futbol ya había empezado y los entrenamientos cada vez eran más y más fuertes, solía ver a Cristian ahí, pero desde hacía ya tres semanas no nos dirigíamos la palabra. Pero parecía que eso a él no le importaba, ya que siempre tenía su misma sonrisa, hablaba con otros amigos, e incluso lo vi coquetear con una que otra chica, pero cuando me cruzaba en su camino o en su campo de visión es como si repentinamente cambiara, su sonrisa se borraba y su cara parecía perder el color, y así han sido todos estos días, evitándonos a toda costa.

Llegue a la escuela y vi a April, la cual, al parecer, me había perdonado.

-Hola- la salude

- Que pasa seb, te ves triste.

-Lo estoy April, ya van tres semanas desde Cristian no me dirige la palabra, creo que ya perdí su amistad.

- ¿Has intentado hablar con él?

- No creo que quiera que me le acerque.

-Es decir que no.

-No.

- pues que esperas, seguramente es lo que espera, y como no lo haces cree que no te importa.

-Pero claro que me importa April.

-Demuéstraselo entonces

Eso hare

-----

Corrí y corrí por el campo de futbol que estaba en la parte trasera de la escuela, tenía fuertemente sujetado el balón entre mis manos para que no se escapara, evadía a cada uno de los integrantes del equipo que intentaban taclearme con destreza y llegue a la última yarda sano y salvo.

-Excelente Sebastián- dijo el profesor- necesitamos más jugadores así si queremos legar a las nacionales- le grito al resto del equipo- y tu Cristian- esta vez lo señalo a el- que diablos te pasa, tienes que concéntrate más por Dios!! ¡¡Casi dejas caer el balón en plena jugada!!- Cristian me miro de la peor manera en ese momento- ahora¡¡ lárguense de aquí!- nos gritó esta vez a todos. ¿Qué coños le había pasado a ese tipo para que fuera así?

Me quedé un poco más de tiempo charlando con el entrenador sobre cosas del equipo y Luego fui directo a las duchas, me desvestí completamente, mi cuerpo estaba sudado y necesitaba urgente del agua. Entre en el área de duchas, estas estaban vacías, menos una.

-Cristian, creí que ya habías salido- él ni si quiera se volteó a mirarme.

-¿Podrías de dejar de ignorarme y prestarme un poco de atención?-le dije ya cansado de su actitud

-¿Así como tú lo hiciste cuando te necesité?- lo dijo con frialdad, como si buscará herirme con sus palabras.

-Ya te dije que lo sentía Cristian, ¿acaso eres un niño inmaduro y caprichoso? ¿Acaso quieres que actúe como si fuera tu madre cuidándote a cada momento? ¿Acaso quieres que actúe como si fuera tu novia? ¿Cómo si fuese para mí una obligación estar allí para ti? ¡No Cristian! La amistad no es una obligación...

GRAVEDAD (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora