Capítulo 8: Acercamientos.

8.5K 695 102
                                    


Abrí mis ojos poco a poco ya que la luz del sol que entraba por la ventana era algo molesta, una vez ya bien despierto me percaté que mi compañero que estaba a mi lado desde la noche anterior ya no estaba. Me revolví un poco más en aquella cómoda y cálida cama en la que me encontraba, aún tenía algo de sueño.

-Despierta dormilón- Dijo Cristian entrando a la habitación con una toalla amarrada a la cintura.

-Ya cállate Cristian, déjame dormir un poco más, es sábado por Dios!!!

-Si Seb, pero ya son las 12:00 pm y no hemos estudiado nada.

-¡¿Que?! ¡¿Ya es tan tarde?!-dije y Cristian río, se dirigió hacia su armario que quedaba enfrente de la cama, lo abrió y tomó lo que parecía era unos bóxeres, dejó caer su toalla dejando su parte trasera al descubierto y se colocó sus bóxeres.

Realmente no me molestaba o incomodaba ver a otros chicos sin ropa. Digo, yo también soy un chico y los otros no tendrían nada que yo no tenga ya. Además, ya estoy acostumbrado porque donde vivía después de cada entrenamiento de fútbol los chicos y yo solíamos ir a las duchas donde cada uno andaba como Dios lo trajo al mundo.

- ¿Te gusta lo que ves? - dijo dándose la vuelta mostrando su ejercitado cuerpo.

- ¿Disculpa? ¿Acaso me viste cara de depravado sexual? - dije fingiendo estar ofendido. El sólo río.

- Además en comparación con mi cuerpo de dios griego el tuyo parece un fideo mal cocido- dije provocando que él se riera aún más. Me gustaba verle reír.

-Bueno seb para tu lástima no pienso quedarme así todo el día- dijo tomando una sudadera y un suéter sin mangas y colocándoselos respectivamente. Yo sólo rodé los ojos y me incorporé en la cama, sentándome en forma de indio en ella.

-Entonces ¿Que se supone que haremos hoy? - pregunté.

-Pues primero- dijo tomando una toalla de su armario y arrojándomela en la cara- báñate que desde aquí siento tu olor a zombi fresco- Yo sólo rodé los ojos una vez más.

-Luego baja a desayunar, comenzaremos con las clases y después iremos a un lugar que quiero mostrarte.

-Cristian, pero es muy pronto para la primera cita...apenas y somos amigos- dije simulando drama.

-¡No seas tonto! anda y toma una ducha antes de que atraigas a las moscas- dijo entre risas.

Tomé la toalla y entre al baño que quedaba en la habitación, realmente era un baño muy hermoso, se veía muy limpio y moderno. Tomé una ducha de agua fría para espantar el sueño que aún tenía. Una vez terminé de ducharme me puse la toalla y recordé que no tenía ropa sino solo la que traje mojada y la que Cristian me prestó ayer, así que salí del baño dispuesto a llamar a Cristian para que me prestara más ropa, pero al salir me di cuenta que en su cama había unos bóxeres al parecer nuevos, una sudadera y una playera sin mangas parecidas a las que él tenía puestas. Tomé las prendas sin dudar, me las puse arregle un poco mi cabello y bajé a ver que había de comer, tenía hambre.

Una vez baje encontré a Cristian en la isla donde cenamos la noche anterior.

-Cereales ¿En serio?, ¿Acaso no tienes una "sirvienta" para que te cocine lo que quieras? - le dije sentándome frente a él.

-Pues la verdad no, le dije a mi padre que no era necesario. Me gusta hacer las cosas por mí mismo.

-Ohh eso es...admirable diría yo. Puedes servirte cereales por ti mismo, increíble.

- ¡Ya cállate y come! - dijo lanzándome algunos cereales en la cara.

- ¿Quieres empezar una guerra de comida Cristian? No me respondió, sólo lanzó más cereales hacia mi rostro y salió corriendo como un niño hacia el patio.

GRAVEDAD (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora