Just feel. {Justin Bieber}

Capítulo 28

-Pero eso no es cierto.

Exclama él acercándose a mi y yo me encojo de hombros.

-Pero por lo menos, el problema ya está resuelto.

Digo indiferente empezando a andar hacia la salida de nuevo; esta noche cogemos un vuelo para ir a Santa Mónica, en California. Subo al autobús y agarro mi maleta, con la ayuda de un guardaespaldas la cargo en un coche. Entro dentro del coche, encontrándome con las chicas. Ellas me mira como queriendo decir algo, y cuando veo que Judie abre la boca para hablar me pongo los auriculares.

Me siento en un sillón del avión privado de Justin y me apoyo en la ventanilla, con la música invadiendo mi cabeza y alejando cualquier pensamiento. Entonces lo veo; Justin pasa por mi lado sin mirarme y se sienta en el sillón de delante. El avión despega y todos estamos en silencio. Al rato, me quedo dormida.

Cuando despierto miro por la ventana y veo que es de noche; deberíamos estar en el concierto. Me levanto y me dirijo al cuarto de fumar, pero al abrir la puerta veo que está Justin. Lo miro sin saber qué decir y él me mira de reojo, con cara de tristeza. Nos miramos unos segundos a los ojos, en silencio, hasta que me decido a sentarme delante de él. Agarro un cigarro y lo enciendo, sintiendo el humo calmar mi cuerpo.

-¿Por qué lo has hecho?

Pregunta de repente, sin mirarme. Yo dejo caer la ceniza en el cenicero y me encojo de hombros.

-Sólo he dicho la verdad.

Respondo, sabiendo a que se refiere a porque he cargado con la culpa. Él niega con la cabeza y chasquea la lengua, sosteniendo un cigarro en su mano izquierda.

-Scooter quería despedirte ____, ¿acaso no te das cuenta?

Se queja aún sin mirarme, y yo empiezo a sentirme incómoda. Suspiro y doy una calada, sacando el humo por la nariz.

-Sólo lo he hecho por...

Empiezo a decir, pero me quedo callada. Él me mira y yo vuelvo a suspirar.

-No hay motivo que pueda justificar que te hayas arriesgado a perder tu trabajo, ¡tú sueño!

Exclama él apoyando sus codos en sus rodillas, mirándome desesperado. Yo niego con la cabeza fastidiada.

-No deberías haber hecho es...

Empieza a decir él pero yo lo interrumpo.

-Lo he hecho por ti, ¡maldita sea!

Exclamo viendo que no va a callarse. Justin me mira sorprendido y nos volvemos a quedar en silencio.

-Creía que tú ya no querías nada conmigo...

Susurra minutos después, cuando observa su cigarro con detenimiento y yo suspiro.

-Sí que quiero Justin.

Reconozco dejando caer la ceniza y él me mira, con los ojos brillantes.

-Pero que yo quiera no significa que sea lo correcto.

Continúo y él relaja sus hombros, fastidiado. Se acerca un poco a mi y me mira fijamente a los ojos; como si pudiera leer mi mente.

-¿Cuándo has hecho tú lo correcto?

Pregunta levantando una ceja y yo me aparto un poco, tumbándome en el sillón. Aparto la mirada al suelo y veo como Justin vuelve a su posición anterior.

-Ya sé que nunca hago lo correcto, pero quiero hacerlo bien esta vez.

Murmuro dando otra calada y notando su mirada encima de mi.