cap 45

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La cosa es que ambos nos fulminaron con la mirada. Mi madre bajó del coche y vino hacia nosotros.

—¿Podéis controlaros? Estamos en un sitio público— nos recriminó,

mirando de forma acusadora a Nick. La verdad es que últimamente siempre

Lo miraba bastante mal… No me hacía ninguna gracia, iba a tener que hablar con ella del tema. William apareció al cabo de un momento. La mirada que lanzó a su hijo me puso los pelos de punta. Cuando entramos al restaurante, me di cuenta de que no éramos los únicos que habíamos elegido aquel sitio para celebrar la graduación. Varios compañeros de clase me saludaron al vernos pasar y les sonreí a todos con alegría. El maître nos llevó a una mesa que habían preparado en la terraza. Estaba junto a una piscina y numerosas velas rodeaban tanto nuestra mesa como las de las personas que habían preferido cenar al aire libre. El sitio era muy acogedor y la música relajante del piano sonaba a lo lejos; no me percaté hasta después de varios minutos de que tocaban el piano en directo.

Nicholas se sentó a mi lado y frente a nosotros, nuestros padres. No sé por qué, pero de repente me sentí incómoda. Una cosa era tomarnos una pizza en la cocina de mi casa los cuatro y otra muy distinta sentarnos todos a cenar en un sitio como aquel; además, hacía meses que Nick no se quedaba a comer en familia y pude casi tocar más que sentir la tensión que había en el ambiente.

Al principio todo fue bien. Mi madre, como siempre, no podía estar callada ni un minuto. Hablamos de todo, de mi coche nuevo, de la universidad, de Nick, de su trabajo, de la nueva empresa de William, que yo sabía que Nick ansiaba dirigir algún día… Y poco a poco empecé a sentirme más cómoda; además, mi madre no se dirigía a nosotros como pareja, lo que podía ser bastante cómodo o irritante, dependía de cómo se mirase.

No fue hasta pasado el postre, después de que me terminara un pedazo de tarta de chocolate exquisita, cuando mi madre decidió soltar lo que seguramente había estado guardándose durante semanas.

—Tengo otra sorpresa para ti— me anunció cuando los cuatro ya no

culpa tuyaWhere stories live. Discover now