¡Mi corazón te pertenece! (jimsu)

LIV

Luego de dos días en la clínica, Yoongi por fin volvía a su casa junto a Jimin, lo que no se esperó era que hicibiera una linda sorpresa por parte de sus amigos, sus padres y sus suegros.

— Yoongi, que feliz verte sano y salvo, igual que a mi nieto

— gracias señora Park — dijo un poco avergonzado. Cuando Jimin le presentó a sus padres, él estaba muy nervioso por como iban a reaccionar, pero muy al contrario de sus ideas, sus suegros fueron muy buenos con él. Es más, estaban muy contentos de su nueva relación y la llegaba del nuevo bebé.

— ¡gato! Estoy muy aliviado de que estes bien — le entregó su hijo a Jungkook y fue a abrazar a su amigo — ¿sabes que es lo único bueno que salió de esto? — susurró en su oído — que no tuvimos geografía por estos días

— entonces debes de agradecerme

— eres mi mejor amigo, no se que haría su te pierdo gatito

— seguir con tu vida, junto a tu hijo y Jungkook

— la vida no tendría sentido si no tengo a mi otra mitad

Yoongi y Hoseok se dieron un largo abrazo, trasmitiendose todos los años de amistad que tenían, una amistad que duraría para siempre. Para Yoongi, Hoseok será su vitamina, su luz, su alegría y para Hoseok, Yoongi era su alma gemela.

Luego de que Yoongi recibiera un abrazo de cada persona presente, todos fueron hasta el comedor para degustar de las preparaciones de Beomgyu, quien muy orgulloso decía que él había preparado los mejores paltos del mundo.

Al pasar las horas, cada visitante se iban retirando dejando solos a la pequeña familia. Beomgyu cargó a la niña que dormía en el sofá y la llevó hasta su habitación, mientras que Yoongi y Jimin se iban al suyo. Ambos se sentían cansados así que una vez puestos sus pijamas se ubicaron en su cama, con Jimin abrazando a su novio.

— te amo — beso en la frente — te amo — beso en la mejilla — te amo — beso en los labios.

— ya Jiminie, ¿siempre eres así de empalagoso? O es por falta de sexo — dijo con una sonrisa

— un poco de ambos — otro beso en los labios — contigo siempre seré cariño y lo más emplagoso que puedo.

— antes teníamos sexo diario, desde que me embaracé no querías tocarme — comentó con un pucherito

— tenía miedo de hacerle daño al bebé

— que te parece si intentamos algo — se tapó con las sábanas

— ¿Yoongi? — lo llamó al sentir a su novio moverse por dejabo de las sábanas — Yoongi que inten- .... ¡ay dios! — cerró sus ojos al sentir que Yoongi metía su miembro en su boca — sigue así cariño

— ¿lo hago bien? — lo escuchó decir

Jimin no dijo nada solo hizo que su novio volviera a hacer su delicioso trabajo, sentía que en cualquier momento se vendría en la pequeña boca de Yoongi, así que metió su mano y ayudó a su novio para que vaya más rápido, cuando sintió que ya estaba a apunto, le quitó su pene y lo ayudó para que se levantara y luego besarlo con mucho deseo.

— ¿porque hiciste eso? Yo quería probar a mi hombre — dijo después del beso

— a mi me gustan acabar en ti, pero en otro lugar — le acarició el trasero

— sabes que por eso, ¿vamos a tener a Jin?

— no sabes la ganas que tengo que darte como antes, en todas las posiciones posibles

— eres un pervertido — se tapó la cara de vergüenza — tendrás que esperar dos meses más

Volverían a besarse y luego de que Jimin se diera una ducha y se cambiará de pijama, pudieron dormir abrazados y tranquilos sin imaginar que la pesadilla para ellos aún no terminaba.

Semana después ya con Yoongi de ocho meses sentado en el sofá renegando de porque el protagonista volvió por aquella sirvienta en vez de irse y traer refuerzos para acabar con esa loca familia maniática.

— ¡Nooo!¡te dije que no la salvaras!¡matala! — tiró las palomitas al televisor — ¡ahí viene el otro!¡el flash, usa la flash! 

— porque gritas tanto hijo — preguntó Youngsoo al verlo como le gritaba al televisor

— estoy viendo Get Out, le dije que no confiara en esa rubia y que saliera de esa casa, su familia se veía sospechosa

Youngsoo sonrió al ver a su hijo contento y disfrutar de su día — ¿dónde estás todos?

Yoongi puso pausa a su película y voltió para ver a su papá — mamá está en la cocina, Jimin está en la habitación terminando de empacar la maleta que voy a necesitar para la clínica y Beomgyu se fue con Ryujin al supermercado por algunas cosas que faltan para hacer el almuerzo.

— ¡Yoongi, ¿has visto la tarjeta de maternidad que vas a necesitar?! — escuchó a Jimin desde la segunda planta

— creo que esta en la oficina, ahora te lo llevo amor — se levantó y fue hasta la oficina.

Al entrar busco en uno de los anaqueles donde los había visto por última vez, él estaba seguro que estaban ahí, casi siempre las cosas de sus controles de la clínica las colocaba en ese lugar para saber donde encontrarlas, talvez Beomgyu al momento de limpiar las puso en otro lugar.

— ¿buscas esto?

Yoongi voltió de manera rápida al escuchar esa voz tan conocida. Aquella voz que le causó tanto problemas en tan poco tiempo.