¡Mi corazón te pertenece! (jimsu)

XXXVI

Yoongi caminaba por los pasillos de la universidad, se sentía muy cansado había estudiando casi toda la noche para su examen de biología y además que en la mañana tuvo sexo con Jimin.

En este punto no sabía que lo iba a matar primero, si la universidad o el gran libido que poseía su novio. Yoongi no entendía como es que él podía tener tanta energía, prácticamente tenían sexo casi diario. Jimin era ocho años mayor que él, pero parecía un adolescente hormonal con ganas de coger a cada rato. En parte no se quejaba ya que disfrutaba de los encuentros íntimos que tenían, pero a ese paso que iban puede que quede seco a sus tan solo 20 años.

— quizás debería hacer más ejercicios —se apoyó en la barandilla de las escaleras al sentirse un poco mareado

— hasta que por fin te encuentro precioso — quiso tocar su rostro, pero Yoongi rápidamente de alejó de él

— ya déjame en paz Taehyung

— eso nunca, eres mio Yoongi, lo fuiste desde la primera vez que te toqué, ¿el profesor sabe eso? Que yo fui el primero

— eres un maldito — le dio una cachetada — tu me violaste, me tomaste a la fuerza

— ¿crees que alguien va a creerte? En Hawái nadie lo hizo, ¿piensas que aquí lo harán? — le mostró esa característica sonrisa cuadrada que odiaba tanto

Yoongi bajo la cabeza con ganas de llorar, nunca lo había hecho delante de Taehyung, pero ahora no sabía porque sentía sus emociones tan alborotadas, como si no pudiera controlarlos.

— ¡Yoongi! — elevó un poco la voz al verlo junto a Taehyung

— profesor Park, que gusto — sonrió falsamente — Yoongi y yo solo conversábamos

— Yoongi vete a tu casa — este se limpió la lágrima traicionera y miró a su profesor asintiendo, aunque quería entrar con Jimin, también quería alejarse lo más que se podía de Taehyung.

— debería disimular un poco, ¿no lo cree profesor?

— no se de que estas hablando

— ¿no lo sabe? Que pasaría si el rector se enterara de los privilegios que le da a un estudiante

— yo no le doy privilegios a nadie joven Kim, cada estudiante se gana su nota, si tengo que reprobablos lo haré y eso incluye a Yoongi

— profesor Park, no niegue lo evidente... me imagino como le debe de pagar Yoongi para tener esas notas,

Ya colmandole la paciencia, Jimin tomó de la polera a Taehyung — cuida tus palabras Taehyung, no voy a permitir que hables estupideces de Yoongi

— ¿entonces no niega su relación?

— no, Yoongi es mi novio y voy a defenderlo de quien sea — dijo soltandolo

— ¿usted cree que puede alejarme de él? Yoongi fue mío profesor, yo lo disfrute antes tu

Jimin cerró sus puños tratando de controlarse, sabía que Taehyung le estaba provocando — escúchame bien niño, no te metas con Yoongi, porque créeme que los años que tienes de vida, no se van a comparar con los años que puedes pasar en la cárcel, por lo que le hiciste

— ¿es una amenaza profesor? — preguntó ya un poco molesto

— no, solo es una advertencia, pero tómalo como quieras — se alejó un poco — no estamos en Hawái Taehyung, además que mi familia tiene mucho más poder e influencia que la tuya — fue lo último que dijo antes de alejarse, dejando a un muy enojado estudiante.

Yoongi y Ryujin estaban sentados en el sofá frente al televisor mirando Zootopia, le gustaba mucho ver dibujos animados. Jimin no podía estar con ellos ya que estaba en su oficina revisando algunas tareas de sus alumnos.

— señor Yoongi, que desea comer hoy — se acercó Beomgyu

— me gustaría comer Galbitang, Bulgogi, Kimbap, si se puede barbacoa y.... kimchi no te olvides del kimchi — respondió sonriente — oh oh, también quiero tartaleta de fresas

— ¿todo eso quiere comer?

Yoongi asintió con una gran sonrisa, tenía muchas ganas de comer todo eso, no sabía porque, pero su estómago le pedía.

Beomgyu miró a Ryujin que se alzó de hombros no sabiendo porque su mamá pidió todo eso, era la primera vez que pedía tanta comida.

Pasó un rato y la comida ya estaba lista, Beomgyu se demoró un poco preparando todo, pero pudo terminar a tiempo.

Cuando llamó a todos a almorzar, Yoongi fue el primero en ir hasta el comedor. Sentía que se hacía agua la boca viendo toda la comida. Se sentó y sin esperar más comenzó a prácticamente devorar cada plato.

— amor, come despacio... te puede hacer daño

Yoongi asintió aun con la boca llena de comida, no entendía porque está comida que preparó Beomgyu se le hacia la mejor del mundo.

— mami padece adilla — dijo sonriente al ver las mejillas de su mamá que estaban llenas de comida

— aquí esta el postre — Beomgyu llegó con un postre de tartaleta de fresas

Yoongi al solo ver el postre, sintió como su estómago se revolvía, se tapó la boca con sus manos y salió corriendo hasta el baño más cercano, una vez allí, sintió que vomitó hasta su alma.

— cariño, ¿estás bien? — dijo preocupado — te dije que no comieras así de rápido

Yoongi se levantó y se enjuagó la boca — lo siento, ver el postre me dio unas ganas de vomitar — se volvió a tapar la boca sintiendo arcadas — de solo pensar en eso...

— ¿ya no quienes ganas de comer? — Yoongi negó — entonces ve a la cama y descansa un poco mi amor

— si, te amo — le dio un beso — te espero arriba amor

— también te amo, cariño

Yoongi ignorando lo que realmente le pasaba, se fue hasta su habitación para poder descansar, pensando que con eso estaría mejor.