VII

943 93 14
                                    

Estaba tirado en su cama mirando el techo, pensando en lo que Hoseok le había dicho, le parecía una total tontería, ¿qué el profesor Park tiene interés en él? ¿Solo por entrar a su oficina? Ni siquiera habían interactuado tanto para que pensaran aquello, es más él pensaba que ni siquiera le caía bien al profesor. Aunque no iba a negar que era alguien muy guapo, podría ser perfectamente el sueño caliente de cualquiera, pero él no está interesado, llegó a Corea por sus estudios no para otra cosa.

— son unos tontos, el profesor Park no se fijaría en alguien como yo — fue lo último que dijo para después cerrar sus ojos y poder dormir.

Al día siguiente se levantó muy temprano, ni siquiera supo porque, era sábado y estaba despierto a las 6 de la mañana, ¡¡quien de levanta a esa hora un sábado!!

Fue hasta la cocina para preparase su desayuno, abrió el refrigerador y al verlo casi vacío, tomó nota de ir a hacer las compras, quien dijo que ser independiente era algo fácil, para nada, era muy complicado y más si era un joven universitario de 20 años con muchas responsabilidades.

Con pereza se preparó un vaso de leche con café y unos hotcakes. Decidió que ese día no haría nada, utilizaría ese sábado para el ocio, de todos modos ya había hecho la mayoría de sus tareas, solo le faltaba uno que otro problema de física, pero nada difícil de responder.

Luego de desayunar y limpiar un poco su departamento, se dispuso a ver una serie, aunque no pudo evitar ponerse rojo cuando el profesor en aquella serie y un estudiante iniciaron una relación, no entendiendo porque en su cabeza se le vino la imagen de su profesor de Historia.

Golpeó ligeramente sus mejillas para sacar esa imagen, no había pasado ni un mes en esa universidad y ya se imaginaba ideas locas.

Volvió su mirada a la televisión hasta que un mensaje le llegó a su celular.

"Así que estas aquí en Corea, vaya coincidencia ¿no? Al parecer el destino nos quiere juntos precioso. Espero verte unos de estos días y poder pasar un buen momento, ¿que te parece? Como los viejos tiempos"

Yoongi muy asustado tiró su celular, ¿como consiguió su número? esto no podía estar pasandole, no a él. Realmente pensó que todo lo que le pasó lo había dejado en Hawái, pero ahora ese maldito estaba en Corea, de todos los lugares del mundo tenía que estar en el mismo lugar que ese idiota.

— Papi, papi — una pequeña niña entró al despacho — mida lo que acaba de llegad

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.

— Papi, papi — una pequeña niña entró al despacho — mida lo que acaba de llegad

— que es bebé – dejo los exámenes que estaba corrigiendo para poner atención a su hija

— ed potal de mami alzó su bracito haciendo revolotear la postal — me dees papi, nose que dice

claro pequeña, ven aquí

La niña muy contenta fue con su papá, se sentó en sus piernas y escuchó atenta lo que su padre decía.

— mi hermosa Ryujin, ¿como estás bebé? Espero que no le estés dando muchas molestias a tu papá. Te escribo para decirte que te amo pequeña, te extraño mucho y espero en algún momento ir a verte. Cuídate mucho cariño te mando muchos muchos besos a ti y a tu padre — terminó de leer

— ¿no dice cuano vovera? – dijo con notable tristeza

no pequeña, pero seguro y pronto estará con nosotros — besó ambas mejillas

— la extaño mucho papi, yo... yo quero a mami la miro con sus ojitos acumulándose lágrimas

Jimin solo la abrazó, no podía hacerlo, no podía decirle que su madre nunca volvería con ellos. No tiene al valor suficiente para romperle el corazón a su pequeña hija.

— ya cariño no llores, mamá volverá ¿si?

La pequeña niña se limpió las lágrimas mientras asentía, le dio un beso a su papá para después ir su cuarto a dormir. Esperaba que la próxima vez que que su mamá se comunicara con ella, no sea por medio de una carta o postal, sino que ya sea de manera personal, extraña tanto sus abrazos y sus arrullos al dormir.

Jimin se quedó un par de horas en su despacho, pensando en que no podría ocultar la mentira por siempre, su hija crecería y ya no podría ocultar la mentira. Tenía que decirle la verdad, ya que cabe la posibilidad de que su hija llegue a odiarlo por ocultar por todos esos años la muerte de su madre.

Después de analizarlo decidió que en una semana le contaría la verdad, será dolorosa, pero ya no podía seguir así, aunque...

— Yoongi

Sacudió su cabeza por la estúpida idea que se le vino a la cabeza, no podía utilizar a su estudiante. Además quien en su sano juicio aceptaría tal descabellada idea.

¡Mi corazón te pertenece! (jimsu) Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon