¡Mi corazón te pertenece! (jimsu)

IV

Había pasado 1 año desde la muerte de Yoonji, al principio Jimin había caído en depresión, no salía de su cuarto, no comía bien y lo peor de todo es que había dejado de lado a su hija, pero cuando Ryujin había enfermado gravemente, Jimin abrió sus ojos y se dio cuenta que no podía seguir así, él le había hecho una promesa a su esposa y justo ahora no estaba cumpliendo así que después de ir a terapia y hablar con el rector universidad ya se sentía listo para volver.

— papi ¿ya te vas? — entro Ryujin al cuarto

— si mi amor

— ¿idas a decogeme? – preguntó inocentemente

— claro que si mi vida – se agachó para besar su frente – hoy veremos películas toda la tarde princesa

— ¡¡siii!! – saltó emocionada – ¿mami etara?

— ya es hora que te vayas princesa, el chófer está esperando – cambio rápido de tema

— adiós papi – se despidió y salió de la casa.

Jimin soltó un suspiro, ya había pasado un año y aun no le contaba nada a su hija, pues él le dijo que su madre se había ido a otro país por trabajo, aunque Jimin trataba de contarle la verdad, no podía hacerlo, ¿y como ocultaba la verdad? Pues cada cierto tiempo enviaba una postal supuestamente de Yoonji, donde decía que la extrañaba mucho y que pronto volvería.

Luego de tomar una taza de café, tomó su maleta para irse a la universidad, le habían comentado que tendría un nuevo estudiante, le comentaron que era alguien muy inteligente y él esperaba que fuera cierto pues no quería lidiar con un chico problema ya que era el tutor de aquella aula.

— buenos días jóvenes — saludó cordialmente

— buenos días profesor — saludaron todos

Puso su maleta en el escritorio y sacó su laptop, todas las chicas miraban embobadas al profesor, no se podía negar lo guapo que era, su cabello rubio, sus labios gruesos, además de esa mirada imponente.

— ¿tengo algo en la cara señorita Choi? – la miro fijamente desde su escritorio

— n-no profesor – bajó su cabeza avergonzada

— bien, quiero que saquen su libro de histo.... — antes de terminar de hablar fue interrumpido

— d-disculpe – dijo agitado – ¿p-puedo pasar?

— llega tarde joven... — miró su lista – kim

— lo lamento profesor, es que... –

— no quiero escusas – lo interrumpió – lo dejare pasar por esta vez, solo porque eres nuevo – dijo sin apartar la vista de la laptop – puede pasar

— gracias – fue hasta el único haciendo vacío que había

Jimin había levantado la vista solo por un momento, vio a su estudiante por la espalda y luego volvió su vista al aparato

— muy bien chicos, antes de ser interrumpido, decía que, saquen su libro de historia en la página treinta y nueve, hoy estudiaremos sobre la guerra de cien años — apagó las luces y prendió el proyecto para luego empezar a explicar el tema.

— ¿por qué demoraste tanto? – susurró Hoseok – si que te llevaste la primera reprimenda del año amigo

— estaba hablando con la directora – suspiro bajito – ese profesor ni siquiera me dejó explicarle

— así es el profesor Park, no le gusta que lleguen ni un segundo tarde

— parece un viejo amargado –