VIDA NUEVA | COMPLETA ✔️

Capítulo 36

De repente tras el gran estruendo que hizo la bala saliendo de la pistola, todo se quedó en silencio. La música dejó de sonar, la gente ya no se escuchaba. Todo se puso en cámara lenta.

Veo cómo se va, como ese hijo de puta se va.

Estoy tirada en el suelo, Derek está encima mía. Protegiéndome.

Yo no pude reaccionar, pero por suerte Derek se lanzó sobre mí y caímos al suelo.

Vi sangre en el suelo.

-¿Estas bien nena?- preguntó Derek con voz entrecortada.
-Creo... creo que si, pero hay sangre.- dije confusa. Derek se hizo a un lado, se quedó sentado en el suelo, yo me pude incorporar y ponerme de pie.

Miré la sangre, mire mi cuerpo pero no era mía, yo estaba bien.

-Me han dado cariño, pero no te preocupes.- dijo Derek con cara adolorida agarrándose el brazo. ¿Que?
-Derek...- dije aterrorizada acercándome a él.
-Ves a buscar a Juan.- dijo apretando su mano contra el brazo.

Me dispuse a correr lo más rápido que pude, la gente no sabía que pasaba, empecé a gritar el nombre de Juan, mis ojos empezaban a llenarse de lágrimas.

-¡JUAN, JUAN, JUAN, HAN DISPARADO A DEREK!- gritaba mientras corría.

De repente una persona me agarró.

-¿DONDE ESTÁ DEREK?-

Me seque las lágrimas de los ojos para poder ver quien era, era Juan.
Le lleve corriendo, Derek estaba tumbado en el suelo cuando llegamos a él, el charco de sangre cada vez era más grande.
Mi corazón palpitaba demasiado rápido.

-Vamos bro, tenemos que llevarte al hospital estás perdiendo mucha sangre.- dijo Juan cogiendo a Derek, intente ayudar agarrándolo para que no tuviera que hacer fuerza.

Por suerte, Juan llegó en su coche, pusimos a Derek tumbado en los asientos de atrás, yo me senté también detrás, para que apoyara su cabeza en mis piernas, acaricié su pelo todo el viaje, mientras las lágrimas recorrían mi rostro.

-No llores cariño.- dijo con una voz muy suave.
-Te amo Derek.- dije rota de dolor mi dedos acariciaron su rostro suavemente.
-Lo se, no tienes que despedirte de mi.- dijo con media sonrisa.
-MAS RÁPIDO, JUAN.- exigí alzando la voz.
-Dana, respira por favor, voy a 200km/h en 5 minutos llegamos.- contestó Juan, estaba nervioso.
-Eres tan bella...- respondió Derek levantando el brazo que tenía bien y me acarició la mejilla.
-Derek, no te duermas.- dije dándole un par de suaves palmadas en su mejilla. Sus párpados iban cerrándose lentamente.
-Eres lo mejor que me a pasado en esta vida.- dijo Derek, la mano que acariciaba mi mejilla, cayó de golpe.
-Derek, por favor.- dije abrumada.
-¡Dale más fuerte, Dana!- gritó Juan.

Le daba bofetadas más fuertes, Derek abría los ojos y a los segundos los volvía a cerrar.

-Estoy cansado, nena.- dijo quejándose.
-Derek, quédate conmigo, te quiero.- dije agarrando su rostro. Se dibujó una pequeña sonrisa. Yo no podía dejar de llorar.

Le volví a dar bofetadas, Derek abría lentamente los ojos y se le cerraban demasiado rápido.

-Ya llegamos, prepárate para pedir ayuda en urgencias, Dana.- dijo Juan.

Me prepare, agarre la cabeza de Derek para poder salir del coche sin hacerle daño.

-Vale, sal Dana, ¡ahora!- gritó Juan parando delante de la puerta de urgencias.

Salí del coche, dejando suavemente la cabeza de Derek en el asiento, corrí dentro de urgencias gritando, los enfermeros salieron al escuchar mis gritos.