𝘋𝘰𝘯'𝘵 𝘊𝘳𝘰𝘴𝘴 𝘛𝘩𝘦 𝘓𝘪𝘯𝘦 ─ 𝙈𝘼𝙍𝙆𝙃𝙔𝙐𝘾𝙆

𝙘𝙞𝙣𝙘𝙪𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙨𝙚𝙞𝙨

Los rayos de luz atravesaban las cortinas, y Donghyuck quería dormir cinco minutos más, pero unos besos en su rostro comenzaron a interrumpir su sueño, intentó removerse sobre la cama, pero no pudo, por lo que se vio obligado a abrir sus ojos.

-Pronto comenzarán tus clases -susurró Mark, plantando un beso en sus labios.

El menor volvió a cubrirse con las frazadas, esta vez, hasta la cabeza, no quería salirse de la cama, pero en parte, también quería esconder su rostro sonrojado.

-No me he lavado los dientes, Mark -se quejó cuando el mayor lo destapó.

-No me importa.

Plantó nuevamente un beso en sus labios.

-Te traje un latte y una dona glaseada.

Donghyuck tomó asiento en la cama, tallando un poco sus ojos y bostezando, su mirada se dirigió hasta el escritorio, y efectivamente, allí estaba lo que el canadiense le había comprado. Gateó hasta allí y tomó el vaso, el cual estaba caliente, tal y como a él le gustaba, en un lado, tenía escrito: «Hyuck♥︎». Acarició la superficie donde yacía su nombre, era un detalle insignificante, pero muy bonito, que hizo que un calorcito se expandiera por su pecho.

-Hyuck, debes cambiarte, en veinticinco minutos comenzará tu clase -advirtió Mark, luego de salir del baño.

-Lo sé.

Mientras el canadiense guardaba unas últimas cosas en su mochila, sobre su propio escritorio, el moreno salió de la cama y se acercó hasta él, abrazándolo por la espalda.

-Gracias -susurró con una sonrisa.

-No es nada.

...

-¿Qué pasó que de repente estás muy... feliz? -cuestionó Chenle, sin quitarle la mirada a la extraña sonrisa de Donghyuck.

El grupo de amigos se habían encontrado en la cafetería como todos los días, y aunque Dejun y Renjun sí notaron la inesperada positividad que traía el moreno, prefirieron no cuestionarlo, pero claramente, Chenle no podía quedarse con la duda.

-No pasó nada, solo desperté de buen humor.

-¿Tus padres te compararon el disco de Michael Jackson que querías? -inquirió Chenle.

-Ojalá ocurriera eso.

-¿Te arreglaste con Mark? -preguntó Dejun.

El moreno estaba por negarlo, pero sus mejillas sonrojadas contestaron por él.

-Lo hiciste -el chino mayor lo apuntó con el dedo-. ¿Eres idiota, Donghyuck?, ¿por qué lo hiciste?

-A-arreglamos las cosas, él me pidió perdón y m-me aclaró que nunca pasó nada entre él y su exnovia.

-¿De verdad? Eso es genial -Dejun estaba feliz por su amigo, a pesar de que los otros dos todavía estaban procesando la información-. ¿Quedaron solo como amigos?

Por eso mismo quería evitar el tema y no decir que había solucionado las cosas con Mark, le apenaba tener que decir la verdad.

-Ambos quedamos de acuerdo para no ponernos ningún título.

-¿Te correspondió? -Chenle abrió sus ojos, asustando al mayor.