𝘋𝘰𝘯'𝘵 𝘊𝘳𝘰𝘴𝘴 𝘛𝘩𝘦 𝘓𝘪𝘯𝘦 ─ 𝙈𝘼𝙍𝙆𝙃𝙔𝙐𝘾𝙆

𝙨𝙞𝙚𝙩𝙚

⚠︎
contenido adulto

—No se me pasó por la cabeza el encontrarte aquí —sonrió Lee.

—Soy muy cercano a Taeyong.

Así estuvieron por un largo tiempo, hablando entre ellos, las palabras simplemente se les salían y los temas eran muy variados. En un momento, el mayor comenzó a preparar un trago que su primo cantinero le había enseñado, Donghyuck estaba emocionado por probarlo.

Aquel trago fue una delicia para el menor, además era algo fuerte, pero no fue impedimento para ambos continuaron bebiendo.

—Oye, la otra vez me dijiste que si me cruzabas en alguna fiesta me ibas a besar, por qué eso hacías con tus amigos cuando estabas borracho —al parecer Jung podía manejar muy bien su borrachera.

Donghyuck rio con timidez, mordiendo su labio inferior y balanceando sus piernas.

—E-Es verdad...

El mayor le regaló una hermosa sonrisa, poco a poco fue cortando la distancia entre ambos, hasta juntar por fin sus labios en un beso desesperado y húmedo. Lee seguía sobre aquella isla, pero la altura del castaño le permitía llegar justo a la altura de sus belfos.

Jaehyun lo tomó de la cintura y lo aprisionó contra su anatomía, mientras que el moreno lo rodeaba por el cuello con sus brazos.

...

—C-Chenle, po-por favor... —jadeo el menor.

—No, Jisung, no irás a buscar a Jaemin en este estado —el chino seguía padeciendo con su ebrio amigo.

El alcohol en su cuerpo mágicamente se había esfumado tras aquella situación, no podía evitarlo, menos cuando se trataba de Jisung.

—P-Pero, yo podría de-decirle lo que... s-siento —lloriqueó por tercera vez el rubio.

—No en este estado, Jisunggie —trató de ser suave.

El menor suspiró rendido.

—E-Está bien. Gracias por... por cuidarme, a mí.

Jisung le dedicó una sonrisa a su mejor amigo y en un parpadeó se acercó a depositar un pequeño beso en sus labios, dedicándole otra sonrisa.

—Gracias p-por ser mi mejor amigo —balbuceó Park.

—S-Sí, ya entendí —hecho una bola de nervios, el mayor se levantó de donde estaba, solo para comenzar a maldecir a su amigo en su mente—. Creo que es mejor que volvamos.

El menor asintió con un puchero.

Chenle sacó su teléfono para buscar el contacto de Jaemin, él tendría que llevarlos de vuelta a la residencia.

—¿No sabes a dónde fue Jae? —preguntó a su amigo.

—Creo q-que se fue con... ¿Cómo e-era? —divagó Park—. Ah... Taeyang.

—Taeyong —corrigió el chino.

Justo en el momento que estaba por llamar a su amigo, este apareció bajando las escaleras como si nada, por detrás de él venía el dueño de la fiesta y otros chicos que no conocía.

—¿Qué onda, Chen? —saludó el peliblanco.

—Debemos volver, Jisung ya no da para más y Mark está peor.

—Bien, iré a buscar a Mark.

Na salió a buscar al canadiense, mientras Chenle trataba de arrastrar a su amigo entre medio de todas las personas.