Intercambio | T1 | Sebastian Villalobos

Capitulo 5: ¿Desaparecio?

Sali al corredor y tome los cojines, comencé a golpearlos uno contra otro para que saliera el polvo, hasta que este fuera mínimo. Entre y los deje en el lugar correspondiente.

La cocina, fui al refrigerador y saque todo, literalmente TODO. Había recipientes con comida, algunos ya caducos, por lo que tuve que tirarlos. En la nevera había demasiadas cajas de pizza. Y carne congelada al igual que verduras.

Lave los recipientes y deje que estos se dejaran caer toda el agua restante en un armazón donde mas platos reposaban.

Para finalizar, pase una escoba por el piso, la escoba era horrible. Parecía que esta casa no se había aseado hace años.

Me sente un poco agotada, mire el reloj de pared:  9:35 am. Fui a mi "habitacion" por mi bolso, baje decidida a ir al centro comercial pero el teléfono sonó.

-Hola- dije

-¿____? Soy Selena, llamo para avisar que ya te deposite dinero en la cuenta del banco. Y ahí va un dinero extra para que compres un celular. Di le al Mario que a el ya le deposite lo del hospedaje - dijo rápidamente

-Esta bien, muchas gracias - colgué y ahora si. Me voy.

-¿A donde vas?- voltee y me encontré con un Sebastian modorro. Recargado en la isla desayunadora.

-Al centro comercial, necesitó compar unas cosas- lo mire mientras citaba las palabras.

-Yo te acompañó- se ofreció entrando a su habitación

-No es necesario, Sebastian- dije siguiendole por detrás, pero mentía, si era necesario. Ni siquiera sabia que autobús tomar o a donde caminar.

-Ya esta, me doy una ducha fugaz y nos vamos- dijo y entro al baño

Espere en la sala, mientras pensaba en la escuela. -¿Como sera el primer día?- me cuestione. La verdad, espero que sea genial. También, espero que haya chicas con las cuales llevarme muy bien.

-¿Nos vamos?- preguntó Sebastian frente a mi. Ya estaba listo, vestía unos pantalones negros de mezclilla con unos peculiares tenis, una playera roja y sobre esta, una chamarra tipo cuero color negra. -¡Wow!- pensé.

Caminamos unas cuadras y el paro un taxi, le indico el destino y el coche se puso en marcha. El camino fue bastante silencioso, no era tan incomodo pero algo denso.
Miraba por a venta. Era bonito. Las calles y todo los monumentos.

-Gracias- dijo Sebastian y pago.

-Yo debía pagar- hable don mirarlo. Pero el solo me dio una sonrisa. Caminamos por el lugar que era bastante grande, tanto así que podría perderme.

-Ahi es- apunto a un gran local que con grandes letras rojas decía Office Max. Entramos y el lugar estaba un tanto vacío pero había gente en las cajas. Apuntó de marcharse con cargamento del regreso a clases.

Saque mi lista de cosa a comprar, Sebastian tomo una canastilla y ahí iba dejando las cosas. La verdad es que llevaba muchísimas cosa, demasiados cuadernos, lápices y plumas, hojas blancas y de colores, un paquete de marcadores con distintos colores, y lo básico, una calculadora.

Sebastian camino al área de tecnología, había muchas cosas. Pensé en comprar una laptop, pero no estaba en mi presupuesto.
Antes de ir a cajas, recorde lo que Selena haba dicho "Compra un celular" la verdad creó que lo necesitare.

-Voy a comprar un teléfono- dije rompiendo el silencio -¿Podrias asesorarme?- le cuestione mientras caminabamos donde los celulares estaban.

-Claro, ¿Como lo quieres?- pregunto y solo levante lis hombros en señal de no saber, por que en realidad no se de esto.

-Nunca había tenido uno- dije y ambos reímos.

-Entonces, soy el encargado- dijo Sebastian - Te conviene un IPhone, creo que el 5S te vendría perfecto - miro la repisa con los celulares y luego a mi.

- Entonces será ese- reí e hicimos el pedido. En cuestion de segundos ya teníamos todo pagado.

-Dame las bolsas, tu ve por el helado - se sentó en una banca frente a la heladería.

Fui al local, no sabia que sabor le gustaba a el por lo que fui a preguntarle pero ya no estaba, en su lugar había un grupo de chicas al rededor de la banca de madera, entre en pánico.
Regrese al local y pedí 2 de galleta en vaso. Pero en ves de vaso, era una copa de cristal. Las tome y pague.

-¿Donde estabas?- pregunte entregándole la copa con contenido de galleta

-Estuve aqui- pronunció una risita que no logre entender el porque se reía

-No me mientas, aquí habia puras chicas- dije sin entender aun. ¿Como? Pues habia chicas, regrese y lo vida allí sentado como un niño, esperando.

-Ya se, pero es una larga historia- dijo y ambos reímos.

-Cuentamela- hice un puchero para que me contara la dichosa historia de las chicas y su mágica desaparición

-Claro, tu y yo tendremos tiempo de sobra- dijo en un tono serio...