Capítulo XXX

13 3 3
                                    

Lisa Smith

Sigo sin asimilar que haya terminado por fin mi primer año de universidad y ahora mismo esté oficialmente de vacaciones. Porque sí, hoy veinte de mayo, ya han acabado las clases. Se me ha pasado en un abrir y cerrar de ojos.

En este preciso momento me encuentro con Paul en el aeropuerto esperando a que nos avisen para acudir a la puerta de embarque de nuestro vuelo. Aquí son más o menos las cuatro de la tarde ya y hemos pasado todos los controles habidos y por haber. En teoría el vuelo sale en quince minutos, pero se nos está haciendo eterno. Estamos en una parte VIP para estar más tranquilos y no con tanto alboroto a nuestro alrededor.

Hemos decido irnos cuatro días a Santorini para desconectar y aprovechar que Paul tiene unos días de descanso. Louis visualiza al equipo en su mejor momento y decidió darles unos días libres.

—Nena, para de mover las piernas que me estás poniendo de los nervios hasta a mí—me dice Paul burlón a mi lado mientras yo no paro de recargar la página de la universidad. Hoy me publicaran la última nota que me queda por saber y la cual decide si paso limpia al año que viene.

—Amor comparte conmigo tus datos para que cargue más rápido. El WiFi que hay aquí no vale ni un duro—le pido nerviosa sin apartar los ojos del portátil.

—Ya voy no me metas prisa, pero te puedo asegurar que con lo que te has machacado este último mes, las vas a aprobar y con buenísima nota—me dice él mientras me acaricia el muslo para calmarme.

Yo cojo aire por la nariz y lo suelto por la boca mirándole a los ojos antes de volver la mirada hacia el ordenador nuevamente. Tengo una media de nueve y no quiero que esta asignatura me joda el esfuerzo y el empeño que le puse a este año.

—¡Ay!¡Que ya están subidas!—digo yo pegando un grito al ver que la página ha cargado finalmente mientras giro mi cabeza para mirar a mi novio.—Paul, hazme el favor de mirarlo tú. Estoy que me va a dar un maldito infarto.

Él suspira con una sonrisa en su rostro antes de agarrar mi portátil y ponérselo en sus piernas mientras yo pongo mis manos en mis ojos para no ver nada. Paul se queda callado durante unos segundos, los más largos de mi vida, y esto hace que me quite las manos de la cara para mirarlo.

—¿Y bien?—pregunto nerviosa.

—¿Tú que piensas nena?—dice él sin quitar su sonrisa mientras me mira a los ojos.

—No tengo ni puñetera idea, Paul. Me estás asustando y me estás poniendo de mala ostia con tanto misterio—digo suspirando.

—¡Has aprobado con un 9'45!¡Enhorabuena mi niña!—dice él haciendo que pegue un salto para subirme encima suya y abrazarlo.

¡Dios mío, no me lo creo! He pasado al segundo año con una media de nueve en mi primer año de carrera.

Los brazos de mi novio me rodean el cuerpo mientras noto como me deja millones de besos en la mejilla y yo no puedo parar de sonreír.

—Joder, es que no me lo creo de verdad—le digo a Paul sonriendo.

—No puedo estar más orgulloso de ti cariño mío. Te lo has currado y lo has conseguido a la primera—dice mientras me aparta un mechón de pelo y lo esconde detrás de mi oreja. A mí se me hincha el corazón de amor y felicidad y sonrío antes de acariciarle la barbilla para depositar un beso corto sobre sus labios.

—Ahora toca tocarme el papo a ambas manos lo que queda de verano, te lo aseguro—le digo yo haciendo que él se ría.—Voy a llamar a mi padre y a mi hermana antes de que subamos al avión para contarles la noticia.

—Vale reina. Yo aprovecharé mientras para ir al baño y pillar dos botellas de agua para que sobrevivamos al vuelo—me dice levantándose del asiento y dándome un beso en la cabeza.—¿Te apetece algo más?

Te necesito conmigoDove le storie prendono vita. Scoprilo ora