Black -Ron Weasley ✓

17. Despertarse

Capítulo 37

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Nevaeh se despertó gritando, su cuerpo estaba cubierto de sudor. Se sentó directamente en la cama encontrando a sus compañeros de cuarto despiertos también. Levander y Parvati ni siquiera estaban tratando de ocultar sus risas.

Nevaeh saltó de la cama, limpiándose el sudor de la frente. Abrió la puerta a toda prisa, pero casi volvió a gritar al ver a Hermione frente a su puerta.

Hermione entrecerró los ojos al ver el estado de Nevaeh.

"¿Hermione?"

"Es Ron, ha pasado algo."

Confundido pero preocupado, Nevaeh siguió a Hermione a través de los pasillos. El corazón de Nevaeh seguía latiendo rápido, sintiéndose como si todavía estuviera atrapada en esa pesadilla.

"Hermione, ¿qué ha pasado?"

Hermione suspiró, parecía preocupada. Mientras caminaba rápido, contó cómo Ron había comido algunos chocolates llenos de una poción de amor. Al parecer, Romilda Vane los había hechizado para que Harry comiera, pero ahora había sido Ron quien se había enamorado instantáneamente de la chica.

Aún así, Nevaeh no podía entender por qué Hermione estaba tan preocupada, un simple antídoto podría haber solucionado el problema. No fue hasta que explicó cómo el profesor Slughorn le había dado accidentalmente una botella llena de veneno en lugar del antídoto que comenzó a correr hacia el corredor médico.

Hermione corrió tras ella, pero casi perdió de vista a la pequeña morena porque corrió demasiado rápido.

El pasillo apenas estaba iluminado, pero ella podía reconocer claramente a su novio. Con los ojos llenos de lágrimas, se paró al lado de la cama, con su mano agarrando la suya, completamente ajena a Harry sentado junto a la cama.

"Nevaeh, va a estar bien."

"Pero el veneno..."

"Está bien, Harry lo salvó justo a tiempo." Dijo Hermione, sonando sin aliento.

"¿Cómo?" Una lágrima había escapado de los ojos de Nevaeh, mirando cuestionable a sus amigos.

"Un bezoar. Lo leí en algún lugar." Harry respondió.

Nevaeh suspiró aliviado. Se sentó en el pequeño espacio que le quedaba para sentarse en la cama, Ron ocupó toda la cama.

Ella apoyó su frente en su hombro. El miedo estaba tomando el control de todo su cuerpo, pero también se iba lentamente a medida que podía escuchar sus latidos del corazón cada vez más evidentes.

Lloró en silencio durante minutos, ajena a que sus amigos se fueran de su lado. Decidieron que era mejor dejarla en paz. Sabían que Ron iba a estar bien.

Ella le acarició la mejilla, quitándole un poco de pelo de la cara. Ella arrastró los pliegues en su cara con los dedos.

"Nunca quiero perderte." Ella susurró, una lágrima cayó sobre su frente. Ella lo limpió con el pulgar y besó su sien izquierda.

Nevaeh se quedó con él el resto de la noche, tratando de no quedarse dormida. Se atrevió a no cerrar los ojos y perder de vista. Pero, sin embargo, su cuerpo obtuvo lo mejor de ella, se había quedado dormida.

No fue hasta que el sol volvió a salir que se dio cuenta. Le dolía el cuerpo por la incómoda posición en la que había estado durmiendo. Pero apenas se notó cuando se dio cuenta de que Ron todavía no se había despertado.

Pasaron unas horas, la señora Pomfrey se detuvo varias veces para ver a Ron. Ella le aseguró a Nevaeh que iba a estar bien. Harry y Hermione habían traído a Nevaeh algo de desayuno, se quedaron un rato y hablaron sobre los próximos exámenes diciendo que a Ron no le importaría echarlos de menos.

La más mínima sonrisa apareció en la cara de Nevaeh, pero desapareció casi al instante cuando escuchó una voz preocupada entrar en la habitación.

"No, mi novio..."

Nevaeh se enroscó las cejas y apretó un poco más la mano de Ron.

"Lavander, tal vez deberías irte." Harry dijo.

Lavander se puso un dedo en los labios, firmando a Harry para que se callara.

Nevaeh estaba a punto de hablar para decirle a Lavander que se fuera cuando Ron comenzó a murmurar algunas palabras. Nevaeh se acercó.

"Escucha, él sabe que estoy aquí. Estoy aquí, Won-won." Lavander dijo acercándose.

"Duda eso." Harry murmuró.

Nevaeh frotó su pulgar sobre la mano de Ron.

"Nevaeh." Ron finalmente lo dijo claramente. Lavander jadeó enfadada y se escapó para esconder sus lágrimas.

Nevaeh no pudo evitar sonreír y se inclinó más para besar su frente, sintió el calor de su piel tocando sus labios. En respuesta, ella sintió que le apretó la mano un poco.

Ella dejó ir un suspiro de alivio, él realmente iba a estar bien.