Capítulo 78

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—Es precioso, me encantó. Buen trabajo.—Murmura Mateo cuando la morena termina su presentación.—Se nota que entendiste mi espíritu.

—Muchas gracias.—Responde María José.

—Quiero decir algo más.—Dice y Daniela lo mira con una ceja alzada.

—No es solo una casa nueva, para mi es una nueva vida.

Durante algunos segundos todos guardan silencio sin saber que decir.

—Señor Mateo, le aseguro que todo va a quedar a su entera satisfacción—Dice Juan Pablo.

—No lo dudo.—Responde Mateo mirando nuevamente a María José.

—Pues adelante.—Añade Daniela, dando por finalizada la reunión.

(...)

Tanto María Fernanda como Gabriela se preparan para su "cita" con Alexander, siendo apoyadas por sus respectivos ayudantes; Oliver y Abisambra. Lo cual resulta bastante difícil porque con la emoción, ambas en sus respectivas casas batallan para escoger el atuendo adecuado.

Después de probarse cientos de vestidos, finalmente, ambas encuentran el adecuado.

(...)

—Sí, gracias. Aún me pregunto adónde habrá quedado.—Murmura Daniela hablando por llamada.—Si puede investigarlo, se lo agradeceré mucho. Bien, hasta luego.—Cuelga llamada.

—Hice algunos cambios en los dibujos, los puedes ver cuando quieras.—Dice María José entrando a la oficina con una carpeta con planos del proyecto.

Los deja sobre la mesa e intenta irse.

—María José...—La detiene la castaña.—¿Podemos salir? Así podríamos tomar aire fresco, caminar, hablar.—Le pide.

—Pero ¿ahora?

—Sí.

—Bueno, no sé.—Replica con duda.

La conversación se ve interrumpida por la presencia de Manuela, quién también entra a la oficina.

—Perdón.—Se disculpa al entrar.—Señorita Daniela, hay un asunto muy importante.

—Señorita Daniela, hay dos asuntos importantes.—Dice Carla entrando a la oficina.

—Está bien.—Responde Daniela.

—Debe venir a la sala de juntas para la conferencia de prensa.—Insiste Manuela.—Estamos abriendo una nueva página en los medios.

—¿Justo ahora?

—María José, el señor Mateo llamó.—Vuelve a hablar Carla.—Va a ir al terreno donde se construirá la casa y quiere que vayas.

Al oír eso, Daniela cierra su laptop con fuerza.

—Está bien. Es importante conocer el terreno.—Acepta María José.—Entonces, vamos a trabajar.

—Bueno, ve a verlo.—Responde Daniela encogiéndose de hombros mientras la morena abandona la oficina.—Vamos, Manuela.—Se pone de pie.—¿Ya llegaron?

—Sí, ya están ahí.

—Bien, vamos.—Murmura la castaña dejándola pasar a ella primero.

Ya luego, tendría tiempo de hablar con María José.

(...)

Al restaurante de Alexander, llegan ambas mujeres casi al mismo tiempo y se sorprenden de verse ahí.

—Gabriela, ¿Qué haces aquí?—Cuestiona María Fernanda.

—María Fernanda, lo mismo te pregunto.—Replica Gabriela.

¿Será que es amor? - Caché Adaptación Where stories live. Discover now