¿Será que es amor? - Caché Adaptación

Capítulo 25

—Fue una cena increíble, señora Gabriela.—Se despide Julián en la entrada de la casa.—No puedo recordar la última vez que comí tan bien.

—Gracias, qué bueno que lo disfrutó.—Replica la mujer pelinegra con una sonrisa.—Me alegra haberlo conocido, señor Julián.

—Igualmente.—Responde estrechándole la mano.—Muchas gracias por darme esta oportunidad.—Dice hablándole a la rubia. Lo pasé muy bien.

—Yo también. Nos vemos.—Se despide la rubia.

—Buenas noches.—Dice Gabriela en voz alta mientras Kim lo acompaña a la puerta.

La mujer mayor suspira con tristeza mientras la espera, realmente no le pareció un buen tipo.

—Es tan romántico y tan dulce, ¿no?—Dice Kim emocionada tomándola de las manos.—Mira esto.—Añade señalando la flor en su cabeza.

—Kim.—Dice Gabriela tocándole el hombro.—Te diré algo, pero te enojarás conmigo.

—Nada puede cambiar mi humor ahora. Dime.—Pide la rubia con una sonrisa.

—Rompe con este chico.

—¿Por qué dices eso?—Cuestiona preocupada.—Digo, nos reímos, nos divertimos y pasamos un buen tiempo.

—Telo digo intuitivamente, porque no tengo evidencia, pero todo lo que hace ese hombre es falso.

—Ahora comienzo a oler a la rata, roerá mi cerebro toda la noche.—Replica Kim con pesar.

—Que lo haga, ¿está bien?—Murmura dejándole un beso en la frente.—Buenas noches, querida.

Gabriela entra a la casa y Kim se queda unos segundos mirando la flor que el moreno le dio, con tristeza. Porque para ella la opinión de la mujer mayor iba por sobre todas las cosas y sabía a la perfección que muy rara vez se equivocaba.

(...)

A las caballerizas de la castaña, se acerca lentamente la morena con la carpeta en sus manos.

—No puedo creer que Estrella esté tan saludable. Está recuperado.—Murmura Laura sorprendida.

—¿Verdad? Realmente admiro su perseverancia.Es inspirador.—Responde la castaña sin dejar de peinar al caballo, mientras que María José finalmente se acerca a espaldas de ellas, pero sin asomarse, por alguna razón quería escuchar.

—Daniela, cambiaste mucho. En el pasado, era casi imposible que dijeras algo tan emotivo. Parece que hay una Daniela antes y otra después de María José.

—Interesante. Juanpa dijo algo parecido.Aunque yo no puedo ver la diferencia.

—¿De verdad rompiste con María José? Mariana me comentó algo.

—No lo sé, probablemente.

—¿Sabes? Fue difícil para mí romper contigo, porque aún te amaba.—Dice Laura con honestidad, mientras la morena continua escuchándolas.

María José se gira y se topa de frente con Felipe, quién le hace una seña de guardar silencio.

—Mejor veamos juntos.—Susurra el castaño y ambos se giran para seguir oyendo la conversación.

—Pero fue una lección para mí.—Sigue hablando la chica de ojos marrones.—Quizá romper con María José sea bueno para ti, no lo sé, quizá sea algo bueno.

—¿Por qué lo dices?—Cuestiona la castaña.

—No sé, Daniela. Felipe es un hombre extraordinario, y yo intento tener una vida con él.—Intenta explicarse.—Pero mi lógica dice que debo estar con él, que es lo correcto para mí.