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[CS]

Capítulo 22: Necesito decirles algo.

Mis manos sudadas estaban arruinando la portada del libro que había estado leyendo y sé que lo lamentaré cuando esté más relajada porque es una portada muy linda.

Perdón, ilustrador de la portada de Reina de corazones: La Corona.

—No creo que sea algo tan importante —intentó relajarme Owen con la mirada fija en la carretera.

—Avery nos mandó un mensaje en la hora que se supone tiene clases —dije esperanzada de que entendiera la gravedad del asunto—. ¡La hora de sus clases! Ella no haría eso a menos de que fuera algo muy, muy, muy, extremadamente...

—Muy importante —me interrumpió riendo—. Ya entendí.

—Mucho —respondí hojeando el lindo impaciente—. ¿Puedes ir más rápido? Ya quiero llegar.

—Lorelai, yo me quiero morir. ¿Pero tú? No creo que quieras morir por un accidente automovilístico —comentó divertido—. Además, ¿ves ese letrero? Debo ir a 110 km/h —señaló el letrero donde especificada la velocidad—. No puedo ir más rápido.

—Es una emergencia.

—Creí que te había enseñado bien a manejar.

Resignada me acomodé en el asiento de la manera de que mi espalda quedara a la puerta y mirar al rubio manejar.

—Deja de mirarme que me sonrojaré.

—Creí que ya habíamos pasado esa etapa —bromeé mirando como cambiaba de carril—. No encendiste la direccional, es gratis ¿sabías?

—Somos los únicos, Lorelai.

—¿Y por qué no puedes ir más rápido?

El rubio negó sin perder la sonrisa; el sol le pegaba directamente en la cara resaltando su rubio cabello y a sus lentes negros.

Luce muy bien con ellos puestos.

—Okey —susurró cambiando de velocidad—. Pero siéntate bien y si nos multan tú pagarás.

—¡Ah! Mordida —bromeé señalándolo acusadoramente–. Eso es ilegal, Owen.

Un poco más relajada volví a hojear mi libro, aunque no me hacía ilusiones de que leería más de un capítulo.

[🌩🌩]

Después de un no tan largo viaje, Owen se estacionó justamente detrás del auto de Prairie; rápidamente me bajé buscando el de Avery, sin éxito.

Aún no ha llegado y yo aquí muriéndome de la intriga y preocupación.

—Vamos —pidió Owen abriendo la puerta del edificio de su apartamento—. Esperémosla adentro con los demás.

Asentí siguiéndolo de cerca.

—¿Owen? ¿Por qué escogieron vivir en el tercer piso? —murmuré retomando el aliento—. Es muy cansado.

—Janik dijo que subir y bajar seria su único ejercicio de día —se encogió de hombros—. Y recuerda que amo las alturas.

El rápido recuerdo de Janik y yo subiendo las escaleras a toda velocidad se presentó.

Hace 2 semanas de eso. ¡Qué rápido pasa el tiempo!

—¿Y el elevador?

—Por lo que sé —suspiró deteniéndose un momento—, pronto lo arreglaran. Por mientras puedes imaginar que estas en The big bang theory.

TormentaWhere stories live. Discover now