Capítulo 64 Fiesta (3)

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— Adelan...


La persona al otro lado no espero a que se completara la frase antes de ingresar en el cuarto.

"¿Quién...?"

Raven frunció su ceño inmediatamente después de ver el rostro radiante del príncipe heredero y dirigió su mirada directamente a su acompañante.

No pudo evitar sonreír cuando vio la forma fría con la que Lottie observaba al joven Caster mientras este caminaba con paso seguro hacia ellos.


— Lottie, ha pasado un tiempo desde que nos vimos.


El muchacho se hincó en una de sus rodillas y con un movimiento elegante, robo una de sus manos para besarla. Cuando ella se dio cuenta de lo que el príncipe intentaba hacer, trato de zafarse de inmediato, pero la mano del joven se aferró a ella con más fuerza, sin dejar en ningún momento de mirarla a los ojos.


— Te ves hermosa esta noche.


El chico continuaba sujetando su mano mientras hablaba.


— Veo que tu acompañante es un inútil que no sabe cómo danzar correctamente, entonces... ¿Quieres bailar conmigo?


Raven se congeló en el mismo momento que las palabras salieron de la boca del muchacho.

Un montón de recuerdos inundaron su mente cuando observo a la pareja frente a él. En sus memorias había quedado profundamente herido cuando después de tantos años intentó buscar la compañía de Lottie, solo para ser humillado por la sola presencia de Caster.

Sintió su cuerpo paralizarse mientras su respiración se volvía agitada.

La chica, que permanecía sin decir ni una sola palabra, pareció notar su estado de ánimo y volteo su cabeza en su dirección, intentando adivinar lo que sucedía.


— Lottie... Mírame, estoy aquí.


El príncipe parecía haber perdido todo su recato y se acercaba seductoramente mientras intentaba alagar uno de sus brazos tratando de llegar hacia ella.

Raven entró en pánico cuando las palabras al fin salieron de la boca de ella.


— Yo...

— ¡Ella está conmigo!


El príncipe y Lottie voltearon al mismo tiempo hacia él con distintas expresiones dibujadas en sus rostros.

Raven sonrió cuando se perdió en la mirada cálida de la chica, pero su rostro alegre únicamente duro unos segundos antes de notar como lo veía el otro chico. Caster mantenía una expresión de extremo disgusto mientras fijaba sus ojos en él, notando la atmosfera entre ambos niños, permaneció sin dirigirse al joven duque.


— Soy el príncipe heredero, así que... Baila conmigo, Lottie.


La niña volvió a mirar al joven frente a ella nuevamente.

El chico de ojos rojos se sintió desesperado cuando perdió la atención de Charlotte, rindiéndose ante sus impulsos.

La única salida es amar al villanoWo Geschichten leben. Entdecke jetzt