La única salida es amar al villano

Capítulo 57 Práctica.

El joven duque no supo como reaccionar. Quería correr y disculparse por hacerla llorar, pero al mismo tiempo no pudo moverse de su lugar.

— No te odio... No hay forma de que pudiera odiarte...

Raven se sorprendió al escucharlo. Su corazón, que se sentía pesado en su pecho de pronto dio un brinco y comenzó a latir con fuerza.

— Entonces... ¿Qué sientes por mí?

No sabía de donde obtuvo el valor para preguntarlo, pero se arrepintió a penas las palabras salieron de su boca.

— Lo sie...

— ¡Me agradas! ¡Todo de ti!

Ella lo interrumpió sintiéndose un poco mal consigo misma por no poder decir la verdad completamente.

— ...¿Más que Caster?

— ¿Eh?

—... Olvídalo.

Raven se arrepintió de inmediato al ver su reacción y pidió que no tomara en cuenta la pregunta mientras desviaba la mirada.

— No entiendo por qué preguntas por el príncipe ahora pero si... ¡Definitivamente más que a él!

Él, que no creía que la niña fuera a responder, volvió su vista hacia ella luciendo un rostro totalmente sorprendido.

— ¿Entonces porque sigues enviándole cartas?

Lottie lo miro un poco confusa por un momento antes de responder.

— Ya que es el príncipe heredero, no puedo simplemente ignorarlo.

"Así es, si fuera mi elección, jamás le hubiera respondido en primer lugar."

Raven resoplo enfadado. De pronto su mente se llenó de lo que el joven le había dicho la ultima vez que se encontraron. Entonces volvió a armarse de valor y cerro su puño con fuerza.

— ¿Serás mi pareja en el banquete?

Él volvió a desviar la mirada anticipando la respuesta de la niña.

Un bonito tono rosado cubrió las mejillas de Lottie tras la tentativa del niño.

— Si...

— ¿De verdad?

— Sí.

Ella lo dijo nuevamente con una voz segura.

Aquel chico de ojos rojos se le quedó viendo con incredulidad unos segundos intentando procesar la respuesta inesperada.

Entonces sonrió.

Liam que los observaba oculto entre las cortinas también rio satisfecho pues no recordaba la ultima vez que había visto a su hermano mayor sonriendo de una manera tan brillante.