UN CABALLERO EN UNIFORME ESCOLAR

CAPITULO 47: VIOLENTO

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Las palabras de Xie Li hicieron que los estudiantes reunidos en torno a la mesa de Yu Rui se sorprendieran.

"¿La apuesta de la última vez? ¿Qué apuesta? ¿Cuál?"

"¿No fue el viernes pasado en la cancha de baloncesto? Recuerdo que tuvieron una competencia de baloncesto 1vs1 y alguien dijo que había una apuesta".

"Oh, lo recuerdo, yo estaba allí. Pero, ¿cuál era la apuesta?"

"No lo sé, no he oído hablar de ello".

"Preguntemos".

"¿Quién se atreve? Yo no".

"...."

Yu Rui, que habían estado un poco rígidos desde el principio, se estremecieron por los comentarios que llegaron a sus oídos.

Cuando volvió a sus sentidos, frunció el ceño: "No tienes nada que quiera, así que no puedo apostar".

Xie Li rio un rato antes de detenerse y mirar a Yu Rui: "Piénselo de nuevo, Delegado. ¿Realmente no hay nada?"

"No."

"Puedo darte lo que quieras".

"No".

"Tsk". Xie Li sonrió y se apoyó en la pared detrás de él: "Es una pena".

"...." Yu Rui entrecerró ligeramente los ojos apretando el bolígrafo en su mano.

Los estudiantes probablemente olieron una tensión inusual en la atmósfera. Los que ya habían tomado prestados los apuntes dieron las gracias y se marcharon, mientras que los que no lo habían hecho se dieron la vuelta y se fueron mientras Xie Li los miraba con indiferencia.

Después de confirmar que la última persona también había abandonado la zona en la que podían ser escuchados, Yu Rui se giró para encontrarse con la mirada de Xie Li.

"Puedo soportar tus bromas fuera de la escuela, pero frente a otras personas, ¿puedes contener tus... pensamientos pervertidos?"

"¿Y si no puedo contenerme?" Xie Li se inclinó hacia adelante, mirando los hermosos ojos oscuros de Yu Rui con una sonrisa, y luego se rio: "Mientras te vea, mi mente estará llena de esos pensamientos pervertidos".

Yu Rui: "...."

Yu Rui ya no quería prestarle más atención a éste enfermo, y se dio la vuelta enfadado.

No sé si fue su reacción o el hecho de que su pelo negro y desordenado no ocultara el enrojecimiento gradual de su oreja, lo que hizo que la sonrisa de Xie Li fuera aún más ronca y feliz.

...

Los exámenes mensuales llegaron y se desarrollaron según lo previsto.

El viernes por la noche de la última semana de Septiembre, los alumnos de la Escuela Secundaria D, desde los de primer año hasta los de último, empezaron a prepararse para sus exámenes mensuales previstos para el fin de semana.

El profesorado de segundo tuvo una reunión esa noche, la vigilancia de cada clase en la sesión de estudio vespertina se dejó en manos de los Delegados.

Antes del primer período de estudio, Yu Rui llevó sus apuntes al podio. También trajo sus gafas sin montura.

Cuando Xie Li regresó del baño, vio a Yu Rui sentado detrás del escritorio, desplegando las finas patas de montura plateada de sus gafas y poniéndoselas.

Los pasos de Xie Li se detuvieron lentamente.

Probablemente porque la intensidad de su mirada era demasiado fuerte, tras sólo unos segundos de mirar fijamente, ya fue notado por el adolescente detrás de la mesa del podio.