Desde las cenizas/Los vengadores/

Capítulo 111

Cooper apareció en una especie de lago en Vormir, se puso de rodillas y al abrir la mano vio la gema del alma, algo tan pequeño le arrebató a su mejor amigo. El Barton comenzó a llorar desconsoladamente, sentía como si hubieran arrancado una parte de su alma que fue depositada en aquella gema. Mientras veía el objeto en sus manos añoraba más que nada tenerlo a su lado y decirle que no cargará con la culpa, en su otra mano apretaba con fuerza la mascara que protegió la identidad de Peter Parker en sus años como Spiderman. Anhelaba volver a los momentos en su adolescencia, donde todo estaba bien...

9 años atrás

Cooper estaba escondido detrás de una pared evitando ser visto por los agentes que estaban trabajando en las instalaciones, detrás de el estaban Peter, Elizabeth y Jennifer listos para echarse a correr cuando el Barton diera la señal. Si, los cuatro adolescentes de 15 años se fugarían de sus clases en el programa de S.H.I.E.L.D., y no es un secreto a quienes se les ocurrió la grandiosa idea de hacerlo, al dúo caótico. 

-Y...-Cooper en el instante que vio libre el perímetro dijo- ahora, corran, corran 

Los cuatro empezaron a correr como locos, como si de eso dependiera su vida, Peter al ver que uno de sus superiores los habían visto y empezado a perseguir, entró en pánico y le lanzó una telaraña justo en el rostro. 

-Me van a expulsar- se lamentó Peter mientras se detenía a entrar en crisis- ay no

-Relájate arañita, no lo harán- Jennifer lo jaló del brazo para que volviera a correr- pero si te quedas ahí parado si nos atraparán 

-Ay no, ay no- Peter corría aunque seguía estando tan pálido como una hoja

Corrieron hasta salir de las instalaciones por completo, para subirse al autobús que los llevaría a Coney Island. En el camino Peter no dejó de lamentarse el día en que se hizo amigo de esos tres locos, Jennifer le decía que no fuera dramático, Elizabeth solo se reía y Cooper le decía que estaba igual de loco. Todo el día se la pasaron en el parque, ya sea subiéndose a los juegos, donde descubrieron que Jennifer le tenía miedo a las alturas después de subirse a la montaña rusa, o comiendo. Esa fue su primero de muchos momentos como los cuatro fantásticos, ahora tres...

8 años atrás

Cooper podía ver como Peter caminaba de un lado a otro mientras repetía en voz alta lo que le diría a MJ, pues después de meses de convencerlo, por fin le diría lo que sentía. En el camino a la casa de la morena, Peter compró flores y se arreglaba la ropa cada que podía, en verdad le gustaba esa chica. Cooper solo sonreía porque nunca había visto a su amigo tan feliz, y siempre se han dicho que la felicidad del otro es la felicidad propia también, por lo que lo apoyaría en su plan. Cuando llegaron a la casa, se acercaron a la ventana de MJ, la que a pesar de estar en el primer piso era bastante alta. 

-Necesito que me dejes subir a tus hombros- le pidió Peter a su amigo quien lo vio como si estuviera loco- por favor, no puedo usar mis telarañas porque sería raro confesar mi amor y que soy Spiderman al mismo tiempo 

-Bien, pero me deberás una grande después de esto- Cooper aceptó a regañadientes para acercarse a la ventana y sostenerse de la pared- sube 

Peter subió a los hombros del castaño para tocar a la ventana de MJ y decirle lo que sentía por ella desde hace demasiado tiempo, a lo que obviamente la morena se sentía igual. Cooper fue testigo de como ambos por fin se decían las cosas de frente, además de sus cursilerías, si, propias palabras de este después de escuchar por cinco minutos como no se querían despedir del otro aunque se verían al día siguiente en la escuela.  Ambos chicos tuvieron que salir corriendo cuando el padre de MJ los vio en la ventana de su hija, este al no saber el contexto de la situación los empezó a perseguir. Cooper tuvo que jalar del brazo a Peter, pues este ahora pensaba que se había ganado la furia y odio de su futuro suegro, aunque el arquero le dio razones para darse cuenta que era lo que todo padre quería para su hija, evitando la parte de que era un adolescente con mallas que peleaba contra el crimen.