Desde las cenizas/Los vengadores/

Capítulo 13

Ambos chicos al llegar a la sala riendo y charlando provocaron que los habitantes de la torre tuvieran un peso menos en los hombro ya que no hubieran soportado un día más su inmadurez, más aún que mañana era Navidad. El día lo pasaron adornando la torre con guirnaldas y esferas, poniendo el árbol de navidad siendo decorado por lo más pequeños de la casa mientras que los adultos salían a comprar los regalos de navidad. Las mujeres se fueron por un lado y los hombres por el otro, rezando que Cooper, Elizabeth, Lily y Nate no incendien la torre en su ausencia.

Bruce, Tony, Clint, Thor y Steve se adentraron a buscar los regalos navideños en un centro comercial poco concurrido y de clase, a petición del millonario. Todos iban vueltos locos por tantas bolsas que llevaban encima, cada uno compro un regalo para cada integrante de su familia. Los hombres se pusieron de acuerdo para entrar a una joyería donde le comprarían algo a la pareja de cada uno, que para sorpresa de todos Bruce dijo que iba invitar a la suya a la cena de navidad. Tony se decidió por comprarle unos hermosos aretes de diamante rojo a Pepper junto con un brazalete de oro, muy al estilo Stark. Clint le compró un hermoso collar con un hermoso zafiro azul en el centro a su esposa, Laura. Thor dijo que había traído algo para ella desde Asgard por lo que solo los acompañaría. Bruce le compro un dije sencillo pero elegante a su pareja, que les presentaría esta noche. Todos ya llevaban algo excepto por Steve quien estaba de espaldas a todos en frente de un mostrador viendo fijamente algo dentro de este, todos se acercaron para ver que era lo que no podía dejar de ver.

-Wow Steve, es hermoso. Estoy seguro que a Nati le encantará-lo apoyó el mejor amigo de la pelirroja

-Una cosa es que le encante legolas y otra es que diga que si- bromeó Tony ganándose las malas miradas de todos provocando que rodara los ojos- Steve, he visto como te ve Natasha y estoy seguro que te ama como tu a ella, así que no te preocupes, ella te dirá que si.

-¿Comprara algo?- pregunto un empleado de la joyería

-Sí, deme ese anillo de compromiso con el diamante en el centro y los pequeños a los lados- dijo Steve señalando el que sabía que le encantaría a su pelirroja, Steve pago por el para salir de la tienda y dirigirse a la torre con los demás, mientras que en el camino lo llenaban de preguntas sobre su regalo.

-¿Cuándo se lo pedirás Steve?- preguntó Bruce

-Mañana- se limitó a contestar ya que estaba muy nervioso

-¡¿Mañana?!- exclamaron todos por lo que el solo asintió

-Y dinos tu plan para pedirle matrimonio a la arañita

-Bueno como ya es tradición que abramos los regalos en la mañana de navidad pensé pedírselo en ese momento, pondremos todos los regalos en el árbol para que cada uno tome el que le corresponde pero no pondré nada para ella y como a Nat no se le va nada tratara de buscarlo pero cuando se de la vuelta yo estaré arrodillado, con la sortija en mis manos listo para pedirle matrimonio

Todos lo apoyaron en su plan de distraer a Natasha para que no note que Steve le ocultaba algo y que estaba lleno de nervios. Finalmente llegaron a la torre al mismo tiempo que las mujeres, cuando llegaron al piso donde todos vivían se encontraron con algo un tanto gracioso, al parecer ahora fueron a ellos quienes les gastaron una broma. Todos se empezaron a reír por ver el escenario, dos de los mejores del programa de S.H.I.E.L.D siendo amarrados con guirnaldas y luces por Nate y Lily a la mitad de la sala. Los dos estaban de espaldas uno del otro por lo que no se podían mover, estaban totalmente envueltos fuertemente y con dos horribles gorros navideños en sus cabezas mientras que les pintaban bigotes y barba en la cara. No paraban de reír, Tony les tomo una foto y Thor choco los cinco con los pequeños Barton.

-¿Qué les sucedió?-pregunto Pepper entre risas

-Elizabeth y yo nos quedamos dormidos viendo una película ya que habíamos acabado de adornar, pero esos pequeños diablillos-dijo refiriéndose a sus hermanos menores- nos amarraron sin despertarnos y sabrá Dios como rayos hicieron para lograr eso y movernos