No me llamo Cenicienta [Princesas Modernas #1]

55_FINAL

Esta última semana de vacaciones fue una completa locura y, cuando menos lo noté, ya era sábado en la mañana y Luka ya había mandado cerca de cien mensajes por el grupo que compartía con mis hermanos.

Me reí con la última imagen que había mandado de aquel niño de la película gritando "¡Es hoy, es hoy!" Su cumpleaños en realidad no era hoy, sino mañana, pero en vez de molestarse porque su cumpleaños fuera el día anterior a volver a la universidad, se puso más feliz ya que su idea de hacer una fiesta temática de año nuevo tomó mucha más forma. Según lo que tenía planeado era hacer la fiesta esta noche y a las doce comenzaría la fiesta de su cumpleaños. Digno de una fiesta de año nuevo.

Y el domingo a la tarde festejaríamos en familia se supone.

Toda la mañana mis hermanos estuvieron ayudándolo a llevar las cosas al lugar donde lo festejaría. No lo haría en casa como en los años anteriores, al ser la última fiesta del gran Luka Jones, palabras suyas no mías, tendría que hacerlo en un lugar mucho más grande por la excesiva cantidad de personas que ya confirmaron que irían. Por suerte yo no fui víctima de sus caprichos ya que esta mañana tenía que trabajar.

Jarek: Luka ya pusimos la máquina de espuma.

Luka: La pusieron dónde pedí???

Jarek: Sí...

Jarek mandó una foto donde se veía el techo y la máquina de espuma soldada a un aparato cuadrado. Arrugué el ceño y acerqué la pantalla para intentar ver bien donde estaba.

Aaron: ¿Esa cosa cuadrada acaso es la alarma de incendios?

Ay no puede ser...

Luka: Sí, honey

Luka: Me molestaba así que yo mismo la desconecté w.w

Aaron: Te das cuenta de que no puedes hacer eso ¿no?

Luka: Los dueños no se enterarán luego la volveré a conectar

Me reí y escribí.

Ivanova: Mientras los gemelos no tengan a mano los fuegos artificiales estaremos bien XD

Alex: Que feo que pienses eso de nosotros

Jov: Además Aaron nos escondió los fuegos artificiales

Me reí y saludé vagamente con la mano a una de las chicas que trabajaba conmigo en el turno de la tarde. Guardé mi teléfono y me aferré a mi mochila para salir de la tienda de ropa. Estaba dispuesta a ir hacia el patio de comidas cuando me topé con alguien.

Me quedé algo descolocada cuando me encontré a Adam fuera de la tienda, pero me sorprendí mucho más cuando vi su rostro, tenía una marca de moretón debajo del ojo y el labio partido. Desde que fuimos a la fiesta del hermano de papá que no lo veía tan de cerca, fuera de su rostro golpeado, tenía el cabello algo largo que le rozaba las cejas y parecía cansado.

—Hola Nova —saludó.

—Hola... ¿Qué carajos te pasó? —no pude evitar cuestionar.

Adam ladeó la cabeza de un lado al otro algo dudoso.

—Digamos que me encontré con Richards y las cosas no salieron tan bien —explicó sin entrar en tantos detalles.

—Mierda... ese imbécil es un idiota —me quejé.

Solamente me bastó encontrarme con ese tipo una vez para saber que me caía pésimo.

Me acerqué un poco a Adam para verlo más de cerca.