CAPITULO 9: UN NUEVO DIA.

72 26 46
                                    

Me despierto, lo primero que observo es a Alexander, Caitlyn y Luisa que se encuentra al otro lado de la habitación. Soy el primero en despertarme.

Todavía me duele todo mi cuerpo. Enciendo mi reloj y son las nueve de la mañana, buena hora, ahora que estoy despierto y un poco más cuerdo, necesito hacer un plan.

Ellos desean morir por lo que hicieron y por lo que pasa afuera, es válido al igual yo quiero ganar y regresar con mi familia. Cada uno tiene objetivos distintos, puede que ayer me porte un poco mal, pero no podía creer todas las confesiones y sigo sin creerlas, pero por lo menos son listos y eso me puede funcionar. Es probable que no tenga corazón, pero si mueren me voy a poner mal, así que la única solución razonable es hacer que vivan lo más posible, casi no los puedo dejar competir porque se pueden dejar ganar y en el trascurso matar.

Ahora no tan solo me tengo que cuidar a mí, ahora tengo que cuidar a los demás. Cuando era niño nunca me gusto cuidar de mi hermano, pero lo hice por su bien y ahora voy a proteger a mi equipo por su bien si es que ellos deciden dejarme ayudarlos, sino no tendré alternativa.

Alexander es la persona que no puedo dejar morir por nada del mundo porque es con el que realmente he tenido una conexión y eso me puede servir para mantenerme a flote. Me recuerda mucho a Robi.

—Alejandro —dice mi nombre Alexander que esta atrás de mí, provocando que me asuste.

—Shh —lo callo—. Te van a escuchar —susurro, con mi mano le indico que se siente a un costado de mí.

—¿Pasa algo? —pregunta mientras se sienta lentamente para no hacer ningún ruido.

—Me debes una explicación —le reclamó.

Es lo primero que sale de mi boca, realmente merezco una explicación de todo lo que paso ayer y mas contexto para poder encontrar una buena alternativa.

—Se que te la debo —me mira directamente, coloca su mano sobre mi pierna—, ayer ya no te explique que me paso.

—Cuéntame —lo presiono para que confiese de una vez.

—Ayer estaba triste porque esto es una mierda —confiesa frustrado, pero yo sé que eso no esto.

—Aja, eso no es todo.

—Porque temía que hubieras muerto —murmura y rápidamente piensa lo que acaba de decir—, más bien me da miedo que cualquiera de nosotros muera, cuando apenas somos un equipo, me da miedo perderlos —se corrige algo nervioso.

—A mí también me da miedo perderlos, más con lo que me entere ayer—digo sin pensar.

—Mira puedes pensar que somos unos hipócritas por no decirte todo antes, pero si no cooperas para unir fuerzas tu solo harás que pierdas porque no creo que puedas tu solo contra cuarenta, así que, si tú decides pelear solo, hazlo, pero si mueres o morimos algunos de nosotros la culpa va a hacer solo tuya, todos nosotros tuvimos un motivo y nuestro objetivo ahora en estos momentos es ganar. Todos sufrimos, pero estoy porque ellas saben más sobre querer escapar de la realidad —responde molesto e irritado. Me mira directamente, su rostro no me demuestra la compasión que tuvo ayer conmigo.

—Está bien —solamente logro decir eso sin quebrarme.

Todo lo que me dijo fue como una apuñalada, porque muy dentro de mi sé que tiene razón, me duele que él sea el que me diga eso, porque yo pensaba que teníamos una conexión, pero creo que él no lo ve así.

—¿Estas bien? No te tomes a mal lo que te dije —dice mientras coloca su mano en mi pómulo, aunque no sabe lo que hicieron sus palabras en mí.

—Okey —no puedo decir mucho.

Me levanto reteniendo unas lágrimas, antes de que me pueda alejar más Alexander me agarra del brazo y yo lo volteo a ver ante tal movimiento.

—No fue mi intención ofenderte—. Me jala hacia el para que me vuelva a sentar.

—Sabes, yo pensaba que podíamos tener una conexión porque de aquí eres de los únicos que me importan si mueres, pero ahora ya no, tu hablas sin conocerme, solamente te recuerdo que llevamos juntos dos días y eso no es suficiente para que te hagas una de idea de mi en tu cabeza —le espeto con dolor y cada que el escucha una palabra su rostro se rompe.

Puede que lo que me dijo Alexander me lo haya tomado muy personal, cuando el me dio a entender que no quería que nadie muriera sobre todo yo, pero aun así está mal que me diga que no puedo solo sin ellos, eso lo averiguaremos más adelante.

—¿Enserio? —me pregunta aborde del llanto.

—La verdad no, tú me ayudaste en el coliseo, sin ti hubiera muerto, lo que me dijiste fue para hacerme entender, pero aun así no fueron las palabras correctas. Yo si quiero puedo solo, pero no lo deseo—. Me siento en donde estaba y lo abrazo.

—Perdón por hablar de más, tan solo quería que pudieras entender porque... —toma un respiro antes de seguir hablando— no quiero que mueras, pero se que no fueron las palabras adecuadas y te pido una enorme disculpa por dudar de ti cuando ayer demostraste que eres más capaz que todos nosotros juntos —se disculpa mientras me abraza más fuerte, siento su respiración en mi nuca y es algo reconfortante.

—Te perdono e igual no quiero que tu mueras—. Se separa del abrazo después de escuchar esas palabras, me mira a los ojos y al ver que es verdad lo que digo me abraza con mayor fuerza.

Nos quedamos en esa posición por unos largos minutos y no me incomoda, al contario me reconforta, hace mucho tiempo que no me sentía tan tranquilo.

—Esto es un infierno —suelta de golpe—, cuando yo me sentía triste pensaba que en otro universo podía ser feliz y que estaba con mis padres—. Sus palabras me rompen más el corazón, él ha sufrido mucho, él pensaba que esto iba a hacer mejor pero no lo es, es bueno pensar en un universo perfecto en vez de vivirlo.

—Puedes pensar que en otro universo estas juntos tus padres y amigos, yo no conocí a tus padres, pero sé que a tus papás no les gustaría que te dejes ganar, al contario les encantaría que ganaras porque saben que tienen a un hijo increíble—. Noto que mis palabras lo reconfortan, lo que provoca que me abrace más fuerte lo cual no me disgusta.

Estamos abrazados, es una sensación muy linda, me recuerda a mi hogar y que puedo estar a salvo, aun sabiendo que es imposible.

¿Por qué me sentiré así con él? Es algo raro porque, aunque crea creer que es porque se parece a mi hermano algo me dice que estoy desviando lo que realmente siento a su lado.

Un ruido me despierta de mi universo perfecto, lo que significa que nunca voy a poder estar en ese lugar.

—Hola chicos, buenos días —nos saluda Clare que entra por la puerta, Luisa y Caitlyn se despiertan, yo rápidamente me separo de Alexander.

No sé porque hice eso, Alexander esta desconcertado por mis acciones, al igual que yo. Me levanto y me acerco hacia Clare que noto que tare malas noticias.

—Les traigo noticias —anuncia y parece demasiada preocupada.

—¿Qué pasa? —Pregunto asustado.

— El día de mañana va a hacer la segunda prueba, pero esta eligió el público y no es nada buena.

—¿Por qué? —pregunto ahora más desconcertado, rápidamente cuando acabo de formular mi pregunta suena mi reloj, lo enciendo y aparece a continuación:

¿Listos para la cacería?

El mensaje no le llega a Caitlyn y a Luisa, solamente a mí y a Alexander. A lo cual todos nos miramos desconcertados, queriendo respuestas, pero obviamente no las tendremos.

Esto no es nada bueno. 

ReprobaciónOnde histórias criam vida. Descubra agora