Lights | ᴠᴍɪɴ

|| XXIII ||

Psysical ~ Dua Lipa

Reproducir la canción, cuando Jimin diga "¿Qué es esto?"

Si. Se va a escuchar como una película 😎👍

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Físico y chico ideal de Jimin

―Lo que tiene usted, es exceso de cansancio. 

Dijo el doctor frente a Jimin y a su madre, quienes estaban preocupados por los resultados, sentados y agarrados de las manos.

Segundos después de que la mujer se desmayara, abrió los ojos y despertó con su hijo demasiado preocupado, incluso con lágrimas acumuladas en sus ojos (además de que ya venía sensible). Rápidamente fueron al doctor para que le hiciera un diagnóstico.

―¿No hay algo malo en ella?―cuestionó el rubio con miedo.

― Si te refieres a una enfermedad, no es así. Pero de todas formas es preocupante su falta de fuerza y el exceso de cansancio. Si no se recupera, tendrá graves consecuencias con enfermedades graves como diabetes, anemia, ansiedad y demás.

Ambos Park asintieron con la cabeza al mismo tiempo.

― Señora, ¿Usted trabaja más de diez horas?

― De hecho trabajo más de doce horas. ―respondió.

―¡Pero si es demasiado!

―Como verá doctor ―retomó la palabra la madre del rubio ―; soy dueña de una florería que había sido de mi madre y pasó a mis manos. Mi esposo murió hace muchos años y solo somos mi hijo y yo, además de que yo no entré a la universidad, no se algo más que hacer arreglos florales y cuidarlas, y mi hijo entrará este año a la universidad que es cara. Nuestra vida es difícil, por lo que tengo que trabajar más de doce horas diarias para poder tener lo que ahora tengo.

―La comprendo señora Park. ―habló el joven vestido de blanco ― Pero si usted no baja sus horas de trabajo a la mitad y duerme más, le costará más caro los tratamientos de las enfermedades que adquirirá, sino descansa a partir de ahora.

****

La señora y el hijo Park habían llegado de su consulta con el doctor, quien les había llamado la atención y los obligó a comprometerse con que la madre de Jimin iba a dejar de trabajar como lo había hecho durante años.

―¿Entonces que harás mamá? ―dijo Jimin recargado en el mostrador de la florería, observando los movimientos de su progenitora en quitarse su abrigo y accesorios.

―Pues ya escuchaste al doctor. Tendré que reducir mis horas de trabajo a seis y dormir más.

― ¿Y la florería? ―cuestionó el rubio. ―No piensas en cerrarla lo que restará del día ¿Verdad?

―Por supuesto que no. ―respondió la mujer ―Voy a tener que contratar a alguien para que me ayude y te ayude también un poco en las tarde.

―¿Qué? ¡Claro que no! ―exclamó Jimin enojado. ―Mamá, ¿Qué no recuerdas lo que ocurrió con la última persona que contratamos? ¡Te robó y mucho! ¡Ese dinero pudo haber ayudado en los medicamentos de mi padre!