|| XII ||

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Corazones rotos

Ambos se recostaron en la cama, intentando recuperar la respiración después de haber tenido un buen orgasmo. Bueno; solo Wheein, porque Taehyung tenía la cabeza en otro lado mientras tenía sexo con su novia, tanto; que ni siquiera llegó al clímax.

Y ésta no era la primera vez, ya que anteriormente le había ocurrido lo mismo con sus antiguas parejas sexuales. Se excitaba al principio, después miles de ideas le llegaban a la cabeza que se le hacía imposible seguir, o simplemente no le complacía y no llegaba ni a correrse. Creía que su problema ya se había ido cuando empezó a estar con Wheein, hasta hoy.

En esta ocasión, lo que tenía a Taehyung tan distraído, era Jimin. Su mejor amigo era la razón.

No podía quitarse de la cabeza la imagen del chico llorando y que él no pudiera hacer nada. Necesitaba ayudar al chico, pero ni siquiera le llegaba la llamadas ni los mensajes, y las tareas le impedían poder visitarlo; así que no había tenido contando con Jimin durante todo el fin de semana. Estaba en verdad preocupado.

―¿Otra ronda? ― preguntó Wheein jadeando, pero Taehyung negó con la cabeza y se levantó para vestirse.

― Ahora no, Wheein. Tal vez para la próxima. ― respondió el pelicafé, pero a la chica no le gustó mucho su respuesta. Sabía que algo estaba mal con él.

―¿Ocurre algo? ¿Por qué estás así? ― cuestionó la rubia, intentando sonar lo más tranquila posible, y Taehyung volteó a verla teniendo un debate mental sobre si decirle a su novia lo que pasó con Jimin, o mejor callar, ya que la relación de ambos no era la mejor, pero se supone que a su novia le tiene suficiente confianza para todo ¿No?.

― Sí. Me pasa algo. ―se reacomodó en la cama para proseguir― Resulta que vi a Jimin el viernes cerca de mi casa y quise saludarlo, pero al enfrentarlo, se pasó derecho y cuando lo detuve, lo encontré llorando. Le pregunté que tenía y quería en verdad ayudarlo, pero se zafó de mi agarre y salió huyendo, y no lo pude encontrar. A partir de ahí, no ha respondido ni una de mis llamadas.

Wheein tragó saliva con dificultad, sabiendo que todo eso lo había provocado ella, pero a la vez se alegraba de que el chico no le haya comentado nada a Taehyung.

― Cariño, yo creo que deberías hablar con el. Tal vez tenga algo que decirte o tú algo que preguntarle. O tal vez esté en un mal momento.

El chico sonrió al escuchar las bonitas palabras de su novia, que a pesar de que no se llevara bien con Jimin, los quisiera ayudar.

― Muchas gracias cariño. ― la besó rápidamente en los labios ― No sabes lo mucho que me gusta que seas tan lindas con todos y te preocupes.

Wheein solo pudo sonreír.

****

De nuevo un lunes de clases, donde todos estaban esperando a que el profesor llegara para dar comienzo a la clase, y sorpresivamente Taehyung se encontraba ya en su lugar a lado de sus amigos, con los audífonos puestos esperando a que Jimin llegara y pudiera hablar con el. Pero no había rastro de Jimin.

Sus amigos ya estaban preocupados, ya que no era común de que el chico más listo de su grupo de amigos no llegara puntual. Ese no era Jimin. Hasta que en el cuadro de visión, Jin observó como su amigo entraba por la puerta, alzando su mano y agitandola para que los viera y se dirigiera a ellos.

Pero no fue así.

Lo que en verdad ocurrió, fue que Jimin los vió de reojo y se siguió derecho, ignorándolos por completo y sentándose al lado contrario del salón.

Lights | ᴠᴍɪɴWhere stories live. Discover now