Epílogo

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Narra Rosé :

Ya han pasado cuatro años desde que estoy con la mujer más maravillosa de este mundo, actualmente seguimos viviendo en el departamento que me dejó mi abuela junto con el Jensoo y el Seulrene, sí, ellas también calleron en la trampa del amor, tanto que se burlaban de nosotras cuando empezamos a salir diciendo que éramos demaciado dulces, ellas son peor, una hora con ellas y te dan diabetes.

Seulgi le dijo a Irene lo que sentía en 2do año de preparatoria, en la primera fiesta que se realizó ese año cantó una canción llamada Astronauta de Ana Emilia, desde ese momento se volvió la favorita de todas; cuando Irene le preguntó que por que no se lo había dicho antes «claro, las preguntas después de comerse a besos en el escenario, y que las bajaran por traumar a todos los presentes» dijo que no se lo había dicho antes por miedo a no ser correspondida, un poco tonto ya que todo el mundo sabe que nuestra pequeña estuvo loca por Seulgi desde la primaria.

A los padres de Seulgi e Irene al principio se les dificultó un poco entender su relación, pero al final terminaron muy felices por ellas.

Jennie, Jisoo, Irene y yo estudiamos medicina, lo que ramas distintas de esta y Lisa y Seulgi derecho y economía, por suerte todas vamos a la misma universidad si no no hubiéramos durado ni dos días lejos una de la otra. Actualmente estamos de vacaciones por lo que vamos a ir a pasar una semana a la casa en la playa de los padres de Jennie, hace años que no cogemos vacaciones, la escuela y el trabajo nos consumen por completo, si no nos tuviéramos las unas a las otras ya hubiéramos desistido.

–¡Chicas, ¿qué les falta?!-gritó Jisoo.

–Solo un momento, no encuentro mi bloqueador-gritó Seulgi de vuelta.

–Ya lo guardaste en el otro bolso.

–¿Y el cepillo de cabello?-preguntó esta vez.

–¡Lo tengo yo!-informó Lisa desde nuestro cuarto.

–Ya estamos todas listas-anunció Irene una vez que nos encontrábamos todas en la sala.

–Siento que falta algo-comentó Jisoo y nos miramos unas a otras–¿Dónde está Jennie?

Entramos a la habitación y la encontramos dormida.

–¿Alguien la despertó esta mañana?

–Sí, yo cuando me levanté, la dejé vistiéndose-informó Jisoo.

–Al parecer no te hizo mucho caso-se burló Seulgi.

–¡Yo la despierto!-chilló Lisa.

–Alto ahí jovencita-puso su mano en el pecho de Lisa–es mi novia y la despierto yo-demandó.

–Uh-todas la miramos con cara pervertida–¿cómo quieres despertarla?

–No es nada de lo que están pensando-un pequeño rubor cubrió sus mejillas.

Se sentó en el borde de la cama y empezó a mover un poco a Jennie mientras la llamaba.

–Bebé quiero dormir un poco más-demandó con los ojos cerrados; Jisoo nos miró apenada. La siguió moviendo hasta que por fin abrió los ojos–¿Por qué me despiertas así?¿y mi beso?-estiró sus labios esperando el beso de su novia.

–Nini, tenemos compañía-susurró, cuando Jen nos vió también se sonrojó, nosotras empezamos a reír y las dejamos solas en la habitación.

Un rato después salieron y Jennie ya estaba cambiada y lista para salir.

–Ahora sí, ¡nos vamos!-chilló Jennie.

Emprendimos nuestro viaje, el cual duró 2 hora y 45 minutos.

Los adolescentes también se enamoran (Chaelisa)Where stories live. Discover now