Candy » Baekhyun

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Jinah 🍯

Con muchísimos nervios me reuní de nueva cuenta en la biblioteca de la ciudad para las sesión de Wonhong, mi mente se debatía entre si prefería ver a Jimin o a Junhong. Y creo que prefería la segunda opción porque no tenía que encararlo sobre los sucesos previos, simplemente tendría que escuchar su conversación sobre los años y listo.
Para mi mala suerte, la persona que acompañaba al pequeño era mi hermana.

Aparenté muy bien que nada pasaba por mi mente y me enfoqué en el chico que lucía más feliz que otras veces. Quizá porque su hermano estaba en la ciudad o algo en relación a. Inclusive Jimin se veía mucho más sonriente.

Deseché los pensamientos negativos hasta el momento en que nos quedamos solas. No era precisamente enojo sino extrañez por la actitud de Jimin al respecto de mis citas, es decir, ella no era así. Era de las pocas personas que se mantuvo en silencio cuando se trataba de mi relación con Junhong, jamás me presionó ni me impulsó a hacer nada de lo que yo no estaba segura, siempre se mostró muy neutra.

Por ello me llamaba la atención que al respecto de Changkyun (o el imaginario Baekchan) fuese tan distinta.

―¿Por qué me ocultaste lo de Changkyun?

Había olvidado lo que se sentía hablar directamente y sin preámbulos con Jimin, se sentía bien poder platicar sin pelos en la lengua.

―Oh Jinah...

Su rostro cambió por angustia, no esperaba una pregunta así de mi parte.

―A él le gustabas, no quería traicionar su confianza ―respondió con aires de pena.

―Pero a mí no me gusta.

―Lo sé pero es bueno tener opciones para saber a quién escoger.

Eso es lo más estúpido que había escuchado jamás.

―¿Y quién te dijo que quiero estar en una relación? Mas bien, que necesito una.

Como dije, es el tipo de decisiones que preferiría tomar a solas, lejos de voces que pudiesen aturdirme el pensamiento. Estaba feliz de haberlo logrado y estar con Baekhyun, pero si no fuera así, me vería en un dilema por las intrigas de mi hermana.

―Vives sola, te quedaste sin trabajo por mi culpa, realmente me preocupas.

Ya no era así pero ¿cómo le podía decir la verdad?

―Y ahora que lo pienso no te lo he dicho, pero de verdad lo siento por haberte puesto en esa situación.

Ahora que tocaba ese tema y su mirada no era chispeante, sino llena de arrepentimiento me daba cuenta de que no podía estar molesta con Jimin al respecto. Gracias a ello estaba con una persona que quería y me quería. Y esperaba ella no me odiara cuando todo se descubriera.

―Olvida eso ―rogué mentalmente―. Y sobre lo otro, no te preocupes, estoy bien y cuando tengas un cuñado te lo haré saber.

―Entonces ¿no es Baekchan?

―No, no lo es.

Mínimo ya me quitaría de encima esa mentira, iría poco a poco.

Existía otro detalle que deseaba conversar con Jimin, y era sencillamente sobre su mejor amigo.

―Por cierto, vi a Junhong el fin de semana, no tenía idea de que estuviese aquí.

El semblante de Jimin se convirtió en uno lleno de sorpresa, probablemente no esperaba que yo lo viese tan pronto a su llegada, o simplemente no creía que yo le diese importancia. No era algo tan trascendental pero tampoco podía dejarlo de compartir con mi hermana.