Noche de Cacería

Capítulo 32.

El llanto agudo de Lan Yuan empezó a sonar justo antes de que saliera el sol. En cuanto el bebé soltó el primer quejido Lan WangJi despertó.

Como ya era costumbre desde hace dos meses el alfa se levantó y tomó de la cuna al pequeño A-Yuan, lo meció y arrulló un poco para calmarlo.

—Wei Ying, es hora, A-Yuan tiene hambre—le susurró al omega.

En modo automático y sin abrir los ojos el omega se enderezó pesadamente y empezó abrir su túnica de forma torpe. Sintió como el alfa le ayudaba a colocar al bebé y después este se empezaba amamantar haciendo leves sonidos de succión.

Lan WangJi se situó detrás del omega para que este se apoyara en su pecho y volviera a dormir. El alfa sostenía a ambos esperando pacientemente a que su hijo terminara y estuviera satisfecho.

Justo cuando el sol salía y daban las cinco de la mañana A-Yuan dejaba de comer, listo para iniciar el día al igual que su padre, quien volvía acomodar al omega para que durmiera por unas horas más mientras él se ocupaba de cambiar al bebé y sacarle el aire. Cerca de las ocho de la mañana el alfa dejaba encargado a Lan Yuan para poder prepararle algo de comer a su omega antes que este despertara. Así cuando llegaban las nueve de la mañana Lan WangJi despertaba a Wei Ying para que ingiriera algo y volviera alimentar al niño.

El alfa terminaba su taza de té mientras miraba a su omega darle pecho a Lan Yuan.

—Vamos no te atragantes, no hay prisa—le dijo Wei Ying al niño mirando como parecía desesperado, este sólo hacía pequeños sonidos como si le contestara al omega.

Los ojos dorados veían con amor el "dialogo" entre madre e hijo. Wei Ying sólo vestía una túnica interior blanca y su cabello iba suelto. El bebé se encontraba envuelto en una manta azul claro con un conejo blanco bordado en una esquina. Era una vista más que perfecta para Lan WangJi.

Unos toquidos en la puerta llamaron la atención de la pareja.

Con elegancia el Lan se puso de pie y fue directo a la puerta, al abrirla uno de los miembros de la manda daba una corta reverencia y le tendía una carta, diciendo que provenía de Yunmeng. El alfa agradeció y regresó junto a su pareja.

—¿Es de tu hermano y Jiang Cheng?—pregunto Wei Ying mientras cambiaba al niño del pecho izquierdo al derecho, ya que la forma en que renegaba A-Yuan le indicaba al omega que se había quedado sin leche de ese lado.

—Mn—asintió mirando como la túnica de Wei Ying caía y revelaba la piel cremosa con algunas marcas rojizas.

—Deja de comerme con la mirada y lee la carta—dijo el omega con burla.

La mirada del alfa era seria pero las puntas de sus orejas adquirían un color rojizo.

Lan WangJi se aclaró la garganta y comenzó a leer;

"WangJi, joven WuXian, espero ustedes y el pequeño A-Yuan se encuentren bien. Nosotros acá estamos en perfecto estado.

Como sabrán la Cacería de este año se acerca y aparentemente la mayoría de los ancianos se han negado a cancelarla.

Este año la reunión se llevará a cabo aquí en Yunmeng, así que queríamos pedirles si podrían llegar un poco antes, hablar de algunos asuntos antes que el resto de líderes y ancianos lleguen.

Esperamos su carta de confirmación."

—¿Es enserio?—la cara del omega era en total desacuerdo—¿Aún con todo lo sucedido harán la Noche de Cacería este año? Se perdieron varias vidas en todos los clanes ¿Cómo pueden ser los ancianos tan indiferentes a ello?