Noche de Cacería

Capítulo 28.

El entrecejo fruncido del omega advertía al alfa que algo no estaba bien, además de la sensación de molestia que sentía a través de su lazo, pero este se rehusaba a contar el motivo aunque preguntara.

No entendía que pasaba, en la mañana habían hecho el amor con normalidad y se despidieron bien, pero ahora que había regresado para comer juntos las cosas lucían muy mal.

—Algo te molesta—dijo en voz baja Lan Zhan.

—¡No me molesta nada! ¡¿Por qué piensas eso?! ¡ESTOY PERFECTAMENTE BIEN!—gritó mientras apuñalaba su comida una y otra vez. Ahora sólo había un puré de color marrón en le plato del omega.

Lan WangJi no sabia ya que hacer, el humor de WuXian cada vez era más voluble, lo único que le quedaba era ser paciente y esperar a que el omega hablara por si solo.

Lan Zhan contó mentalmente y cuando llegó al número quince Wei Ying se alejó de su comida y le abrazó con fuerza.

—No quise gritarte—murmuró apenado sin verle.

El alfa besó la coronilla del menor—Lo sé—dejó salir su aroma para mostrarle que todo estaba bien.

Estas escenas se estaba volviendo rutina, cada vez que Lan WangJi se volvía a reencontrar con el omega después de hacer sus tareas de la manada Wei Ying tenía un pésimo humor, gritaba por un rato y después pedía disculpas mientras abrazaba al alfa sin intenciones de soltarle.

Por un rato estuvieron así hasta que el alfa necesitó ausentarse nuevamente.

—Me tengo que ir, volveré en un par de horas—avisó a Wei Ying.

—¿Puedes traer un poco de sopa cuando vuelvas?—pidió el omega con ojos de borrego.

—Mn—besó sus labios y se alejó.

Una vez que Wei Ying estuvo sólo soltó un fuerte suspiro, el también tenía algo que hacer.

Tal como se imaginaba MianMian y Yen le esperaban fuera de su habitación, listos para seguir asistiéndole.

—¿Iremos a la revisión del estanque?—preguntó Yen en cuanto miró a WuXian.

Wei Ying emitió un sonido de desagrado—Si, aún falta algunas cosas.

Lo que tenía a Wei Ying con ese pésimo estado de ánimo era justo la construcción del estanque, llevaba casi un mes tratando de hacer el pequeño espacio apto para su uso pero aún así no lo conseguía, cada vez surgían más problemas. En varias ocaciones quizo rendirse pero su orgullo no se lo permitió, se dio cuenta que no era tan sencillo, para empezar las plantas tenían que ser traídas desde fuera, al principio intentó cultivarlas desde cero pero no funcionó, así que sólo quedaba trasplantar desde el exterior.

Y para empeorar las cosas su vientre empezó a crecer un poco más, su apetito parecía aumentar y ni hablar de sus repentinos cambios de ánimo.

En cuanto llegaron los tres omegas a la zona del estanque uno de los encargados en la construcción le llamó—Disculpe han avisado que se retrasará la llegada de las flores de loto.

—¡Lo que faltaba!—gritó Wei Ying cansado de la situación.

Sólo quería terminar con el estanque y mostrárselo a Lan Zhan.