Capítulo 20: Helena

1.7K 188 6
                                    

Después de nuestra pequeña platica relacionada con mi familia materna el empezó con las preguntas.

--¿Nombre completo?-- pregunto.

--Alexa Amelia Wolffire Valducier

--Es alucinante que en nuestros apellidos este la palabra lobo-- puso su mando siquiera en el pecho y dijo-- yo macho alfa-- no pude evitarme reírme y pensar, en nuestra relación yo seré el alpha-- ¿por qué me miras como si tu fueras el alfa?

--Porqué en una relación, yo sería el alpha-- le sonreí con suficiencia.

--Cariño, si tu y yo fuéramos pareja yo sería el alfa-- cabe aclarar que yo no dije eso en voz alta pero escucharlo de él me encantaba, por primera vez pensé que podríamos tener algo serio. Me limité a sonreír y volver mi vista a mis apuntes-- lo siento, no quise decirlo así-- oye no mates el momento.

Después de casi haber terminado Ame vino a avisar que teníamos que irnos, me despedí de Erick uñy me fui a la casa.

En verdad me gustaba pasar el tiempo con él y por más increíble que fuera no deseaba su sangre ni nada, al principio tenia mucho miedo pero ahora estoy segura que puedo controlarme estando cerca.

Los próximos días pasaron con normalidad, no había ninguno que no lo pasáramos juntos, le ayudaba con algunas tareas ya que se le dificultaba, en cambio yo lo usaba como escusa para poder estar con él. También me había invitado a su casa para que conociera a su mamá, pero no e podido. En verdad me encantaría conocer a su familia y saber dónde vive.

Nuestra amistad se hacia cada vez más fuerte lo cual agradecia, espero que seamos pareja pronto.

Por otro lado mi hermana se ha estado comportando horrible conmigo, casi no me habla y cuando lo hace me trata mal, aún no entiendo que le hice.

Iniciaba otro día el cual pasaría con Erick, me había invitado a comer a su casa y después de pedir permiso iría con el saliendo de la escuela.

Llegue feliz y las clases se me hicieron eternas, no podía con la emoción.

--Al menos disimula tu emoción-- se acercó para susurrar-- me aburriré toda la tarde yo sola.

--No se de que hablas-- ok estaba emocionada ¿y que? No todos los días vas a la casa de tu mate.

Las clases terminaron por fin y yo brincaba de felicidad.

--¿Nos vamos?-- me dio una de sus encantadoras sonrisas, mi madre tenía razón al decir que pierdes la cabeza por tu pareja, el instinto de estar cerca te gana-- debo advertirte que mi mamá está súper emocionada-- empezamos a caminar-- espero y no te abrume.

--No te preocupes, estoy deseando conocerla-- habíamos quedado que iríamos caminando y la verdad lo agradecía, así tendría tiempo de platicar con él y caminar juntos sin nadie que nos interrumpa.

Cuando llegamos pude divisar una pequeña casa, que no se comparaba con la mía peor podía verse un verdadero hogar, desde un principio supe que el no tenia las mismas oportunidades y viéndolo obvio cuando has visto a una princesas sin un solo centavo. Ninguna todas son ricas o muy... muy ricas y en mi caso va al doble.

Abrió la puerta y dejó que pasara como un auténtico caballero, rápido deje mi mochila donde me indicó. Su casa tenía una Bonita decoración y lo que predominaba eran los cuadros familiares, solo que no veía ninguna foto de su padre, todas eran de él y su mamá.

Antes de dejarme acabar con mi recorrido por la galería llegó su mamá muy alegre a saludarme. La vi detenidamente, tenia su cabello castaño y ojos marrones, su tez blanca y sin contar su cara hermosa, a pesar de que tenía edad no la aparentaba bien podía pasar como hermana de mi mate así como mi madre conmigo.

Entre las sombrasWhere stories live. Discover now