En Medio Del Apocalipsis. |L.P| *En Edición*

Capítulo 34: No estoy feliz, ni siquiera cerca.

Punto de Vista de Marie:

La fiesta para Jules había quedado increíble, aunque bueno, ella realmente no se llama Jules, sino Julianne, pero siempre le dijimos Jules porque se parecía a su padre.

Todos habían traído regalos aunque fueran cosas simples como frutas o pastelitos, a ella le fascinaron. Zayn le obsequió uno de sus discos Midnight Memories si no mal recuerdo, Niall le había dado una copia de su película, Liam un póster con sus autógrafos, Louis una caja de medicamentos y Harry le horneo una bandeja de cupcakes.

—De ahora en adelante voy a ser su fan—bromeó Jules.

—Ya tienes todo el material—dijo Niall.

Los chicos le cantaron Happy Birthday y después algunas canciones que cantaron alguna vez, como little things, 18, Fool's Gold, Kiss you, Strong, more than this y Half of heart, eran grandiosos cantantes, pero muy malos bailarines, aunque seguían siendo igual de graciosos.

—Me voy a dormir—murmuró Liam a mi oído. Habíamos bailado tanto, toda la noche, que me daba miedo que la energía pudiera irse en cualquier momento, esto de las celdas solares funcionaba, pero estabamos usando más energía de la recomendable.

Pasado un rato me ofrecí a llevar a Lux a dormir, se tallaba los ojillos desde hacia un rato y Harry la iba a llevar, pero desde que llegó no había tomado ni un segundo para él, ahora estaba divirtiéndose y no le quitaría eso, lo dejaría ser feliz por un momento, además Luxury es todo un pastelillo, es una niña perfecta y me gustaba hacer lazos con ella.

—Hasta mañana, cariño—le dije besando su frente y cubriendo su pequeño cuerpo con una manta. La niña empezó a cerrar los ojos hasta que se quedó dormida. Por seguridad puse llave a su recámara, sólo Niall y Harry tenían copia.

Caminé hasta mi habitación y abrí la puerta lentamente, lo primero que vi fueron los pies de Liam sobresaliendo de la cama, pero cuando abrí por completo la puerta.la escena cambio, Liam tenía los ojos vendados, estaba desnudo completamente, y encima de él estaba una chica, una mujer a la que conocía bien... Angelique.

—¿Qué mierda?—logre decir. Él destapó sus ojos y se quitó de inmediato de encima a la chica.

—Marie, no es lo que parece—intentó defenderse.—Creí que eras tu—se defendió—te lo juro.

—¡Por favor, Liam!—gritó ella.—Ambos sabíamos lo que estábamos haciendo, tu mismo me dijiste que lo hiciéramos hoy.

—¡No mientas!—le gritó.—Marie, te juro que no es verdad, yo no tenia la menor idea de que...—lo interrumpí.

—Tienes tres segundos para salir de mi casa—le dije a ella conteniendo unas lágrimas. La chica recogió su ropa y se fue.

—Marie, te juro que yo no...—intentó acercarse, pero me aleje.

,—vete, Liam—murmure. No se movió—Por favor, vete, mañana hablaremos de esto

—,No—dijo firme.—Esto esta mal.

—¡Claro que esta mal!—exploté—Esta mal que me hagas enamorarme y después te folles a otra en mi cama.

—¡Creí que eras tu!—gritó sosteniendo firmemente la sábana.

—Tienes dos minutos para irte de aquí—dije antes de salir de ahí.

No sé como esto podía causar tanto dolor, como un patético chico podía hacerme desear la muerte en vez de este amargo sufrimiento, ¿me había enamorado? sí, lo hice, me enamoré de él y por un segundo creí que sería diferente, creí que no me engañaria, pero estaba equivocada. Ni siquiera podía dejar de llorar.