CAPÍTULO XXXIX: ¿VICTORIA?

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Un poderoso ataque Reiji realizó contra la gran máquina, pero no pudo atravesar su armadura, era muy fuerte y resistente, Carlo seguía atacando con el Beam Rifle destruyendo la ciudad y las personas.

Reiji usó sus ojos para ver de cerca la máquina, era como una especie de zoom o como si estuviera usando binoculares o algo parecido, analizó y encontró el punto más accesible para atacar, gracias a que podía ver a través de las cosas pudo ver dónde se encontraba el rey.

— Apunta al medio de su pecho, ahí está la cabina donde está el rey — dijo Reiji a Livius.

— Okey.

—¡Deadly Breeze!

Reiji agitó su espada y liberó una fuerte brisa, la cual atacaba a nivel molecular, tratando de entrar por alguna hendidura del ARM y cortar de adentro hacia afuera.

Y lo logró, logró cortar el brazo con el que el ARM estaba disparando, el Beam Rifle cayó al suelo.

—¡Wind Explosive!

Livius liberó gran cantidad de viento que al chocar contra el punto indicado por Reiji explotó a grandes temperaturas, las cuales hicieron un agujero en la cabina.

Los jóvenes llegaron hasta el robot que no se movía, vieron por la cabina y ahí estaba, Carlo Lannzteer, un gordo sudoroso que había mojado sus pantalones del miedo.

Veía con temor a los jóvenes.

— Livius, ¿Qué haces a tu tío? — dijo él.

— ¿Tío? Tú no eres nada mío — dijo Livius furioso.

— Pagarás por la muerte de Ange, ¡bastardo! — dijo Reiji furioso.

— Y-yo no hi-hice nada — respondió el hombre tembloroso.

— No solo mataste a mi familia y usurpaste el trono de mi padre, sino que destruiste al pueblo, con impuestos y leyes absurdas, tu ejército violaba a mujeres inocentes, destruirán aldeas y pueblos, mataban y...

— Y-yo no sa-sabía de eso — dijo Carlo antes de que Livius terminará de hablar.

Cabe aclarar que tanto Livius como Reiji, no tenían el casquete por eso Carlo reconoció a Livius, el casquete puede desaparecer cuando el usuario del Armor Beast quiera.

— No mientas más — dijo Livius.

— Llegó el momento de mi venganza — dijo sonriendo.

Ambos chicos tomaron sus espadas, y la enterraron en el pecho de Carlo Lannzteer, el rey de Ventara, el hombre poco a poco comenzó a perder el conocimiento y murió.

¿Tanto les llena la venganza a Livius y Reiji? ¿Matar a Carlo fue suficiente para ellos?

Livius volteó su cabeza y vio la destrucción en la ciudad, muchos y muchos cadáveres de inocentes, mujeres, niños, ancianos y hombres, todos tirados en las calles en medio de los escombros.

Lágrimas salieron de los ojos del joven príncipe, toda esta destrucción le había costado el querer recuperar el trono.

El Palacio estaba casi completamente destruido por la pelea con Arkos y por el ARM, ambos jóvenes bajaron del enorme robot.

Chelsea los esperaba, los soldados sacaban a los heridos de los escombros.

Elster se acercó a donde Livius y se arrodilló ante él, en su mirada se veía mucha tristeza por ver la ciudad de esta manera, por saber que muchas personas habían muerto, el lado norte era el único que no quedó tan devastado como el sur y el oeste.

Lighgon y las Armas del Dragón [Editando]Where stories live. Discover now