Lighgon y las Armas del Dragón [Editando]

CAPÍTULO XXII: POSIBILIDADES

10 de febrero

La noche había acabado pero la búsqueda no acababa una gran cantidad de guardias buscaban por la ciudad sin encontrar rastro del joven de cabello plateado.

Arkos estaba muy enojado por la incompetencia de los guardias, tanto así que dejaron escapar a una chica y no encuentran a un chico que mató fácilmente a tres guardias y derrotó a otros diez en batalla, esto sin contar a los arqueros, sumado a todo esto destruyó la puerta de la ciudad de un ataca.

El rey Carlo II se había enterado de dicho acontecimiento que era muy notorio y que podría despertar hostilidad en el pueblo oprimido dando esperanzas y que podría provocar revueltas al conocer lo débil que eran los guardias.

El rey convocó al Consejo del Reino a una reunión de urgencia, cinco hombres estaban sentados a la mesa del Consejo, Peiler Gonz maestro de monedas, Arkos VanFiurer general del Ejército Imperial y de la Guardia Imperial, Peter Vanter mano del rey, Ned Trainter consejero real y el rey Carlo Lannzteer II.

—Tenemos que hacer algo con ese chico —dijo el rey.

—Mató a tres guardias y derrotó a otra gran cantidad —dijo Peter.

—Si esto se filtra más allá de nuestras fronteras podríamos sufrir un ataque —expresó Peiler.

—Estoy sumamente avergonzado de mis guardias, son un fracaso —dijo Arkos inclinando su cabeza.

— ¿Ese chico fue el que derrotó a Lander? —preguntó Ned.

—Sí, hay que extraer esto de raíz, Lord Arkos le ordeno que llamé a los "Generales Divinos" para que acaben con él —dijo el rey.

—Mi Lord, si hacemos ese llamaría mucho la atención, qué pensarían si mandamos a los Generales Divinos a matar a un chico —expresó en desacuerdo Arkos.

—Lord Arkos tiene razón —dijo Ned.

—Entonces que sea encubierto —expresó Peiler.

—Estoy de acuerdo con la propuesta de Lord Peiler —dijo Peter.

—Está decidido, Lord Arkos llame a los Generales Divinos para esta misión en cubierto —expresó el rey.

—Como ordene mi Lord, pero durarán al menos un día en llegar aquí —dijo Arkos.

—No importa —dijo el rey dando por concluida la reunión.

En la mañana de ese día Reiji había salido muy temprano, sus heridas habían sanado porque el chico comió una baya de las cuales Lyon le había dado en las Cavernas Míticas, además uso magia regenerativa para arreglar su vestimenta.

"Generales Divinos" son los cuatro más poderosos de todo el Imperio, que por lo general realizan las misiones más complicadas cuando hay problemas y se encargan del trabajo sucio como implantar prueba, fomentar hostilidad para que el Ejército pueda atacar aldeas con la excusa de defensa propia, ellos cuatro eran las Élite de la Élite, más fuertes que Arkos incluso.

Se les conoce como Generales Divinos porque nunca han sido heridos en batalla.
Reiji se dirigía a Ciudad Serenity la cual era su siguiente parada rumbo al pueblo Icekas en el norte, ahora era buscado por los del Imperio y le pusieron precio a su cabeza debido a los múltiples delitos dada la suma de 60 000 dragones de cobre, que equivale a 6000 dólares —nombre que recibe la moneda por honor a Lighgon— muchos querrán atraparlo por la recompensa tan llamativa.

Por otro lado Mía y Aria habían salido de la ciudad temprano rumbo al norte, esta vez no llevaban un carruaje muy lujoso por lo peligroso de la zona y los bandidos además de que Revel y Nei no llevaban sus armaduras doradas para no llamas su atención.