CAPÍTULO IX: EL PODER DE REIJI

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6 de enero

Pueblo River

Se encontraban llegando al pueblo luego un largo viaje de tres días de vuelo.

Hace algunos días en este pueblo apareció por breves momentos Lux, aquél dragón que posee la consciencia y el aspecto de Lighgon, aquél que desapareció cuando la destrucción comenzó.

Mía, Aria y Reiji, junto a Lyon estaban entrando al pueblo. Deberían investigar acerca de la aparición de Lux y por qué Caballeros Negros estaban cerca.

—Llegamos —dijo Mía.


—Já, llegué antes que tú, perra —dijo Aria.


— Por dos segundos —respondió la chica.


—Já —pronunció la pelirroja.

Por su parte Reiji iba en silencio, un poco nervioso porque intentaría percibir el Maná de las armas del Dragón. Ya que su enemigo ya poseía la primera.

4 de enero
Desconocido

—Te enseñaré a percibir Maná —dijo Mía.


—Debes esforzarte, Reiji —dijo Aria.

Estaban al lado de una cascada la cual con su sonido natural relajaba a los jóvenes.
La primera parte era canalizar el Maná, esto Reiji lo dominaba porque era lo que se hacía con el Dash y Burst Prana que él realizaba.

Reiji canalizo su Maná en una mano y luego lo depositó en un objeto, el objetivo de esto era que Aria se llevaría el objeto y Reiji debía percibirlo. Lyon observaba mientras descansaba, el chico cerró sus ojos y espero.

—Ahora —dijo Mía.

Debía encontrarlo sin moverse y luego ir directo hacia él. Encontrar su Maná no sería tan difícil por el simple hecho de que él lo conocía.
Cerró sus ojos y suspiro, luego los abrió, sus ojos lograron divisar el rastro que dejaba su Maná y simplemente lo siguió.

La gran diferencia de encontrar su Maná al de Yulia era que, su bien era su descendiente, no sabía cómo era su composición realmente. Además por el hecho de la distancia en la que se encontraba el objeto.

6 de enero

Pueblo River

— ¿Qué piensas Reiji? —preguntó Mía.


—En nada —respondió en chico.

Continuaron su camino hasta la casa del aldeano que había visto a Lux para hacerle algunas preguntas referentes a este tema.

—Necesito poder amplificar mi rango de alcance —decía en su mente Reiji.

—Disculpen, me tengo que ir —le dijo a las chicas y se marchó.


— ¿A dónde irá? —se preguntó Mía.

El chico se fue a la Catarata River -de ahí el nombre del pueblo-

Se colocó bajo la misma y comenzó a realizar ejercicios de concentración, el Maná fluía en todo su cuerpo cálidamente, sus ojos azules yacían cerrados.

"Si concentro mi Maná en mis ojos, podría amplificar mi visión y podría localizar el Maná desde lejos, pero... Los ojos es uno de los lugares donde si concentras mucho Maná, podría causar grandes daños" ese era el pensamiento de Reiji

Se encontraba en una encrucijada y no sabía qué hacer. No podía localizar Maná a largo alcance y si concentra más Maná del que puede soportar sus ojos. Quedaría ciego, esa era una dura decisión que debería tomar y que podría cambiar muchas cosas de ahí en adelante.

— ¿Por qué intentas hacerlo todo solo? —Preguntó Lyon.


—Lyon...


—Te presto mis ojos.


— ¿Tus ojos?


—Soy una Bestia, es algo parecido a un Guardián y de igual manera puedes usar mi poder, como si fuese tu Guardián —explicó Lyon.

Pero de igual manera debía dominar el poder que este le transmitirá y resistir el desgaste.

—Intentémoslo —dijo el chico.

Si bien controlar un Guardián era muy difícil, pero una Bestia al estar ambos de acuerdo se podría lograr de manera más fácil. Lyon lo sabía y por eso se lo dijo al chico.

Lyon y Reiji se comenzaron a sincronizar y el Maná de Lyon comenzó a fluir a través del joven de cabello plateado. Sus ojos yacían cerrados, suspiro y los abrió.

Se observaba un cambio en tales, eran rojos como la sangre, eran los ojos de Lyon. El león alado en el sello de su mano está dando parte de su energía y poder al chico.
Sus ojos resplandecían y liberarán un Maná rojo de ellos.

Su vista mejoró drásticamente y podía alcanzar una gran distancia.
Logró ver una señal, una pequeña muestra de Maná.
Era un Maná de color blanco, no, rojo, tampoco, amarillo. Pero, ¿celeste? Y ¿azul claro?

Era un Maná de cinco colores, si bien no sabía lo que significaba. Estaba seguro que era el de Yulia, porque sentía una extraña fuerza algo conocida, podría divisar su camino. Pero el rastro desaparecía a la distancia, un lugar conocido como el "Cañón Eterno".

Al parecer el templo donde el arma estaba había sido saqueado, y el arma había sido llevada. Una gran suerte el hecho de que uno de los templos sellados estaría cerca de la ubicación de los jóvenes.
Pero al parecer esta era la razón por la cual Lux apareció y Reiji lo entendió.

—Gracias, Lyon —dijo el chico.

Sus ojos cambiaron a como son usualmente y salió corriendo hacía donde las chicas para avisar de su hallazgo.

Lighgon y las Armas del Dragón [Editando]Where stories live. Discover now