Sainz's House (14)🏎

18K 881 334
                                    

-Comiencen a escuchar Ribs - Lorde -

-¿Siguen teniendo ese escondite secreto?.- pregunté emocionada mientras veía los árboles pasar por la ventanilla del auto, convirtiéndose en borrones verdes.

Carlos soltó una risita y encontró mi mirada por el espejo retrovisor.

-Sí, ahí sigue. De hecho, ya pedí que te instalaran en ese cuarto.

-Súper!

Estoy emocionada por pasar el fin de semana en casa de Carlos. Había pasado mucho tiempo ahí cuando eran pequeña. De hecho, es de los recuerdos más felices de mi infancia. Ver a mi padre y al señor Sainz fumarse un puro en su despacho, y a mi mamá leyendo en el jardín principal, pasar horas jugando a las escondidas con Carlos y Charles, y a veces, dependiendo la ocasión, con Max también.

Chilli había invitado a toda la parrilla a quedarse el fin de semana junto a nosotros, pero por los entrenamientos, la clasificación y todo eso, tuvieron que declinar.

-Wow, es igual de grande a como la recuerdo.- dijo Charles en cuanto Carlos abrió la gran puerta de metal que nos dirige en un camino pavimentado rodeado de bosque, hasta su mansión.

-¿Y eso que quisiste venir? Siempre te invito y nunca vienes.

-Porque ahora ambos estamos en España, Carlos.- respondió con obviedad.- Siempre me invitas en vacaciones cuando estoy en Mónaco con mi familia.

Resopló.

-Ustedes harían una pareja hermosa.- solté.

-No eres la primera que lo dice.- agregó Carlos riendo.

Siempre me ha parecido gracioso que todos los pilotos estén conscientes de los ships que los fans hacen, pero ninguno se molesta por ello. Por el contrario, se los toman con comedia, y la mayoría de ellos hacen referencia a eso en las entrevistas o fuera de cámaras. Charles y Carlos lo hacen.

Se estacionó junto a la fuente, y apenas había apagado el motor cuando sus hermanas salieron a recibirnos.

-Chili!- corrieron a abrazarlo.

Charles y yo nos quedamos uno junto al otro, admirando la tierna escena. Siempre quise tener hermanos, en específico, un hermano mayor, y creo haberlo encontrado en Carlos. Él es el hermano que siempre quise, pero nunca tuve.

-Charles, hijo!.- su madre salió en nuestro encuentro y se apresuró a abrazarlo.

Después de tanto tiempo supongo que son como familia también.

-Y Alice... te ves preciosa, hija! Cuánto tiempo!

Sonreí. Es la primera vez desde lo que pasó que alguien me dice hija, fuera de mi papá.

Su casa es exactamente a como la recuerdo; grande y acogedora. Los jarrones siempre rebosantes de flores, olor a galletas en el ambiente, y murmullos por todos lados. Siempre me había gustado ir ahí porque había gente riendo y platicando en todas las habitaciones en todo momento.

Aunque bueno, casa no es la palabra que usaría para describir este lugar. Es una mansión, un castillo casi en su totalidad. Paredes de piedra, chimenea, jardines extensos, y un jodido bosque en la entrada. ¿Qué casa normal tiene un bosque privado?

Su padre está en el despacho detrás de una pila de papeles.

-Padre!.- Carlos lo abrazó.- ¿Cómo estás?

-Feliz de verlos aquí.- respondió ahora abrazando a Charles.

Se hizo un silencio en el cuarto cuando me acerqué tímidamente a él.

FORMULA HEART || Charles LeclercWhere stories live. Discover now