100 Días Para Enamorarte. || Joel De Leōn Y Tú ||

XVI: ¿Secretos?

08 de Enero

Día 24

9:34 p.m

Una semana habia pasado desde que Christopher me habia propuesto casarme con él y no puedo decir que soy la mujer mas feliz del mundo como crei que lo seria cuando alguien me pidiera matrrimonio pero no me sentia asi y eso empezaba a confundirme mas de lo que deberia ¿Que era lo que queria si no era esto? habia soñado con el momento en que Christopher se arodillara frente a mi y dijera esas palabras juntas pero no contaba con su regreso, con él regreso de Joel. 

Mi telefono vibra en mi mano y veo el nombre de mi mejor amiga reflejado en la pantalla y asi, con una taza de chocolate caliente frente a la ventana de mi habitacion es como decido contestar su llamada después de dos semanas de ignorarla, estaba lista para sus gritos.

— Hola, Maggie. — murmure. 

— Hola, nena... — dice tranquilamente. 

¿Que?

— ¿Por que no me estas gritando y eso? literalmente llevo dos semanas pasando por alto tus llamadas y mensajes. 

— Se que no es por que asi quieres, estas ocupada con las cosas nuevas y realmente lo entiendo ¿Lo sabes, verdad?

Mordi mi labio inferior, — Lo hago... ¿Y como vas con tu trabajo?

— No sabes. — rie, — esta pasado, ahora soy una blanquita con cabello rubio y mechas azules. 

Me carcajee, —¿Bromeas verdad?

El chat de Maggie resuena y lo abro dejando ver una foto de ella, efectivamente con el cabello rubio y mechas azules, traía lentes y se miraba sexy pero muy graciosa para mi asi que no pude evitar reirme tan fuerte que mi estómago ardio. 

—¡Estas siendo cruel! — reprocha divertida. 

—¿Ahora ya no eres diseñadora de modas, verdad? ¿Que eres?

— Ahora soy una artista callejera, el otro caso se cerro asi que tienes que callarte. 

Asenti aun que no pudiera verme, —Claro, claro. 

— Y... — ese "Y" fue serio esta vez, — ¿Hay algo que quieras contarle a tu rubia favorita?

Ella lo sabia y no podria ocultarselo. 

Suspire preparandome para lo peor, — Ya lo sabes. 

— Aja pero quiero que lo digas tú.

— Vino a Seattle y me pidio perdón... 

— Y matrimonio. — siguió ella. 

¿Como diablos sabe eso?

Antes que pudiera preguntar como lo sabia ella habla de nuevo, — Y me imagino que como la tonta que eres le creíste y le dijiiste que lo pensarias ¿No? 

— Maggie, no voy a aceptar. 

Rie, — Por que te gusta Joel. 

No lo llamo por su apodo eso significa que esta enojada con él pero ¿Por que? si ni siquier se hablan o conocen lo suficiente.

— Si, así es Maggie. — tartamudeo, — me gusta mucho pero no puedo estar con él por que yo a él no le importo ni mucho menos le atraigo.

— Si y yo me besaría con alguien que no me atrae. — suelta de forma burlista.

Mis cejas se hundieron, — ¿Quien... ¿Quien habló de besos, Margaret?