-Esto será un atentico paseo-dijo sarcásticamente Sakura a sus compañeros, que estando todos en frente de un desierto cuyas arenas eran de color rojo y tenía una extensión aparentemente interminable.
Hacía poco que había dado inicio la primera etapa de los exámenes chunin. El Kazekage dio un discurso cuyas palabras tuvieron poco significado para los participantes, pues ellos solo estaban pensando en destrozarse unos a los otros. Los genin solo atendieron a los organizadores cuando el examinador de la fase, Baki, tomo la palabra.
Su objetivo era buscar un grupo de monedas especiales que habían sido dispersadas por el Desierto Infernal, lugar donde se llevaría a cabo la prueba. Muchos vieron aquello como un desafío sencillo, puesto que pensaron que una vez que consiguieran una, ya aprobarían. Sin embargo, la prueba iba más allá de eso.
Había en juego exactamente mil monedas. Las cuales estaban repartidas en una forma muy peculiar. Primero, había unas pequeñas bolsas que contenían entre 10 y 25 monedas, las cuales en total tenían 250 piezas. Segundo, había cuatro cofres escondidos con 125 monedas cada uno. Finalmente, los examinadores tuvieron la brillante idea de darles de comer a los lagartos de roca, una especie de iguana autóctona de Suna, un total de 250 monedas.
Los reptiles no eran especialmente peligrosos ni grandes, ya que solo median unos 30 cm, pero eran terriblemente molestos por su habilidad para ocultarse en la arena, su hábito de desplazarse en manada y su gran voracidad. Razones que eran suficientes para que los animales fueran considerados una plaga por la población local.
Los genin se verían en la obligación de darles caza a aquellas criaturas rastreras, que eran muy numerosas porque su temporada de apareamiento estaba en pleno apogeo, si es que querían pasar de etapa.
Más de uno califico como demente a la prueba, pero si se analizaba cuidadosamente se descubriría que esta tenía bases muy solidas.
Para empezar, un shinobi solía tener más un objetivo en una misión, especialmente en un escenario de guerra, en donde además se daba el caso de que existían muchos interesados para una misma cosa.
Los participantes básicamente tenían que buscar "insumos" y "capital", elementos esenciales en una guerra, para luego llevarlos a su "aldea" de forma segura. La "aldea" eran los examinadores, quienes solo recibirían las monedas pasados cinco, que era la duración que tendría la etapa. De esa forma también se probaría la resistencia de los genin y su capacidad para cuidar lo que sería el encargo en una misión.
Una vez que el tiempo establecido terminara, los primero ocho que tuvieran más monedas pasarían a la siguiente.
Con todo eso presente, los participantes ingresaron al Desierto Infernal a través los diferentes puntos indicados por los examinadores. El equipo 7 fue a dar a una zona donde abundaban las dunas y no se vislumbraba ningún tipo de vegetación. Era obvio para ellos que no encontrarían nada por esos lares.
-Parece que esta vez avanzaremos a ciegas. No podemos contar con la habilidad sensorial de Naruto, a menos que apuntáramos a robar monedas-dijo Sasuke.
-Lo cual no será el caso. Evitare buscar pelea con los otros participantes, al menos por esta fase-respondió el rubio.
-¿¡En serio!?
-Sí. Hay otras cosas de las que me ocupare y no quiero involucrar a oponentes de otras aldeas.
-Bien. Supongo que entonces debemos enfocarnos en encontrar una forma de localizar las monedas.
-Lo más obvio es que nos dividamos, pero no creo que sea una buena maniobra en este terreno-dijo Sakura.
-Lo mismo opino- dijo el pelinegro suspirando. -Esto será difícil.
-Pues deberíamos ir por lo más sencillo, que es localizar uno de esos nidos de lagartos de piedra-dijo Naruto.
-Pero debe haber cientos de ellos y ni siquiera mencionemos lo desagradable que será sacar las monedas de ellos-reclamo la chica.
-Nadie dijo que sería un trabajo fácil. Lo mejor es que nos pongamos en marcha y busquemos un lugar donde podamos proteger del sol. No tengo problemas con el calor, pero sería bueno que nos deshidratemos.
-De acuerdo-respondieron sus compañeros para entonces adentrarse en el terreno.
A sabiendas de que buscar los lagartos de piedra eran la opción más complicada para encontrar monedas, la mayoría de los equipo opto por dirigir su atención a las otras fuentes de tal objeto.
Buscar los cofres y las bolsas tampoco era una tarea exactamente fácil. Estos habían escondidos en el interior de los posibles escondrijos que se pudieran hallar en el desierto infernal, los cuales también podían ser los nidos de cualquiera de las múltiples criaturas ponzoñosas que habitaban la región. Nadie era tan idiota como para meter en un agujero oscuro para ver si allí había monedas.
Los equipos de Oto fueron los primeros en dar con una solución a ese problema.
El primer equipo se encontraba en un área rocosa, donde el suelo era solido e ideal para usar uno de los artefactos creados por su aldea. Su usuario asomo su brazo derecho, el cual estaba equipado con un armazón de metal que tenia múltiples agujeros sobre su superficie.
Un fuerte zumbido emitido por el aparato le permitió usar la ecolocalización para registrar todos sus alrededores y poder indicarles a sus compañeros en donde era seguro buscar.
Por otro lado, el segundo equipo recurrió a una invocación para realizar el cometido. De las ropas de uno de los encapuchados surgieron decenas de serpientes de color purpura que podían aventurarse sin ningún problema por los confines del desierto, no solo para buscar las monedas, sino también para localizar a los demás participantes y espiarlos.
Pero ambos esfuerzos se vieron cortos, ante la ventaja que le daba el Byakugan al equipo 11 de Konoha. Ellos ya habían localizado un cofre llenos de monedas, lo que les puso automáticamente en la delantera de la etapa. No tuvieron problemas en llevarlo gracias a los conocimientos de Fuinjutsu que tenían los mellizos por parte de su madre.
Otro factor que debían tomar en cuenta los participantes era su capacidad para concentrarse en los objetivos de la prueba. A menos que se tratara de recolectar las monedas, ellos debían evitar combates innecesarios.
Los genin de Kumo e Iwa fallaron garrafalmente en tal punto, no solo las rencillas entre ambas naciones salieron a flote, sino que un insulto de Atsui hacia Kurotsuchi dio inicio a una acalorada pelea entre ambos bandos.
El equipo del País del Rayo podía presumir sobre su maestría en el Kenjutsu, pero ninguna técnica de ellos podía detener todo el poder de fuego que tenia la nieta del Tsuchikage. Y esto no era en sentido figurado, ella literalmente los tenía acorralados con un intenso bombardeo de ataques de lava, gracias a su dominio sobre el elemento Yoton. Ella les venció con gran facilidad y en una demostración de "piedad" les dejo a la intemperie en una prisión de cal, una de la variantes de su Yoton.
Pero no todo fue bueno para Iwa, el equipo Kamizuru calculo mal su enfrentamiento contra los miembros de Kiri. Contando que estarían en desventaja por la falta de agua, los embocaron para sacarlos de examen. No contaron con el hecho de que su estilo es más diverso de lo que aparentaban.
En primer lugar los proyectiles de abeja de Hashi no eran rivales para el elemento Hyoton (elemento hielo) que dominaba Haku, que aunado a su puntería, dejaba inutilizadas a todas las abejas que invoco. Chojuro hizo trizas los escudos de miel que usaba Nosu, pues no podía lidiar con el chakra que emitía la espada Hirameki del chico. Por último, Senshi que usaba una técnica que se basaba en la levitación y el lanzamiento de rocas a modo de aguijones, fue vencido por Suigetsu, cuyo cuerpo era inmune a los ataques físicos por su Jutsu de Hidratación.
Esos eran hasta ahora los acontecimientos más reseñables de la etapa, a solo unas cuantas horas de su comienzo. Los genin las tenían bastante duras y ni siquiera se habian topado con los "invitados" en el Desierto Infernal.
[En una sala de reuniones en Suna, en la noche]
-No sé si felicitarte o molestarme contigo, Rasa. Mira que usar la prueba para lidiar con unos de los problemas de tu aldea-dijo el Raikage al pelirrojo.
-¿A qué te refieres?
-Lo de incluir el extermino de esa plaga de reptiles en el examen. Escuche de ese problema mientras me dirigía a la aldea.
-Oh, es eso- respondió el hombre nervioso. Cosa que no paso desapercibida por Hiruzen. -Sí, fue algo que supusimos que sería un reto para los participantes.
-Eso espero. Queremos que los invitados muestren de lo que son capaces- dijo el Otokage, un hombre piel clara, ojos verdes y cabello negro.
-Los resultados son muy obvios, pero habrá que esperar el fin de los exámenes para que queden claros-dijo Onoki confiado.
-Ya lo veremos, enano.
-Usa el cerebro que tienes entre tanto musculo. Tus equipos no tendrán vida en el examen.
-¿Que te hace pensar eso? Que yo sepa tus fuerzas shinobi no son muy buenas que digamos.
-En eso te equivocas.
-Tranquilos, señores. No es momento para peleas- dijo el Hokage para tranquilizar a sus iguales, que decidieron bajar sus humos.
En la sala los Kage estaban discutiendo de temas varios. El evento resultaba un buen momento para discutir sin involucrar más violencia de la que generaba el evento. Todo iba en orden hasta que un ninja de Suna entro al lugar buscando a su líder. Rasa se excuso de sus visitantes y se retiro de la habitación.
-Lo siento, Kazekage-sama, tenemos una contingencia-anuncio el shinobi de Suna.
-¿Qué ha sucedió?
-Han habido algunas brechas en el perímetro del Desierto Infernal.
-¿¡Que!? ¿Cómo dejaron que ocurriera?
-Pasaron por debajo de nosotros. Fueron demasiado rápidos como para pudiéramos hacer algo.
-¿Y qué sucedió con el equipo que mandamos para dar con esas cosas?
-N-nosotros los encontramos.
-¿Y?
-Estaban semienterrados en la arena y con múltiples laceraciones como si hubieran sido atacados por un jutsu Fūton.
-Estos es malo. Se suponía que elegimos el Desierto Infernal por lo aislado que estaba, pero ahora parece estar comprometido. ¿Sera que los jinchuriki tendrán una relación?- se pregunto el Kage.
-¿Cree que debamos cancelar la prueba?
-Seriamos el hazmerreír si lo hacemos. Hay que confiar en la fuerza de los participantes. Tal vez pase lo dijo Ay y se solucione este problema-dijo el Kazekage mientras llegaba otro ninja.
-Kazekage-sama, hay un problema urgente. Una criatura imposible de determinar ha ingresado al Desierto Infernal vía aérea.
Rasa entonces empezó a pensar que no había sido una buena idea aceptar los exámenes en su aldea.
[En el Desierto Infernal, al día siguiente]
-Esperen-dijo Menma mientras se detenía y daba la orden a su equipo para entonces olfatear el aire.
-¿Un enemigo?-dijo Setsuna.
-Más bien los restos de uno. Huele a sangre y parece ser reciente.
-Déjame revisar la zona-dijo Natsumi para enfocar su Byakugan. Pasaron unos instantes para que la pelirroja diera con lo que buscaba. -Menma-kun nos hemos sacado la lotería, parece que nos hemos topado con algunos dragones- dijo la chica. -O al menos eso creo que son las cosas que distingo.
-Nos tocara darles un vistazo para comprobar su identidad-respondió emocionado el chico.
-Esperen, ¿No creerán que tenemos una oportunidad con esa cosa? ¿Acaso no recuerdan lo que dicen que pasó en bosque de la muerte?- dijo Setsuna. -Incluso mamá dijo que los dragones eran muy peligrosos.
-¿Acaso insinúas que somos débiles?
-Solo digo que es imprudente que nos salgamos del objetivo del examen.
-Interesante sugerencia. Ahora puedo hacer una pregunta. ¿Quién te nombro líder?
-Nadie, pero...
-Pues es una lástima. Porque entonces creo que tu opinión no es válida. Ahora si tienes un problema con la idea que propuse, te sugiero que te prepares para algo no agradable.
La Uchiha solo se mordió los labios por la impotencia y evito la mirada del rubio, dando a entender que no diría más nada al respecto.
-En verdad te estás volviendo una molestia-critico Menma para luego girarse hacia su hermana. -¿En qué dirección debemos ir?
-Hacia el este, pero sugiero que nos apuremos. Parece que los dragones están peleando entre sí-dijo la pelirroja, que poca atención le prestó a la escena de sus compañeros.
No muy lejos del equipo 11, se desarrollaba la pelea entre los supuestos "dragones". En realidad, tales criaturas no eran tal cosa. Más bien era unos Cephalos, monstruos cuya apariencia podía compararse a un tiburón martillo con un par de patas traseras.
Tenían la habilidad de "nadar" en la arena y disparar escupitajos a presión, siendo ideales para emboscar a su presas, su método de caza favorito. Sin embargo, ambas habilidades resultaban pusilánimes ante el rival del que se defendían.
Se trataba de un enorme Brute Tigrex, un Wyvern volador cuya mayor característica era una enorme mandíbula con dientes tan grandes con unas kunai. Si su cabeza de T-rex no resultaba lo suficientemente intimidante, las afiladas garras con las que contaba hacían el resto del trabajo.
La bestia compartía el color arena que tenía sus oponentes, pero destacaba por una característica única. Un aura morada rodeaba el inquieto cuerpo del Tigrex, quien soltaba una baba del mismo color como un animal rabioso.
Su comportamiento correspondía con tal hecho, pues cuando uno de los Cephalos surgió de la arena para atacarle, el Tigrex se lanzo encima de él y le tomo con sus fauces. La criatura sacudió fuertemente a su presa contra el suelo, como si tratase de un trapo.
Demás estaba decir que el Cephalos fue liquidado por el ataque, pero era de mencionar que el cuerpo del Wyvern de arena desapareció en la nada tras caer muerto.
Los compañeros del caído entonces decidieron emprender la huida ocultándose bajo la tierra. No obstante, la bestia no permitiría tal cosa y tomo aire para realizar un atronador rugido que saco a los Cephalos de la arena. Aturdidos por el golpe sonoro, estos no tuvieron como defenderse cuando su agresor les desgarro con sus garras.
El equipo 11 pudo ser testigo de la última parte y lo que genero en ellos distintos niveles de sorpresa. Aun siendo los mellizos los jinchuriki de una peligrosa bestia, la vista del Tigrex le pareció impresionante. Claro que tenían mayor interés en verle muerto para así demostrar que eran los más fuertes.
Como Setsuna tenía una idea más clara del peligro en el que se encontraban, examino cuidadosamente al monstruo y el entorno. Un leve rastro de sangre era apreciable en la garras de la criatura, cuyo origen luego atribuido a los cuerpos de dos hombres que yacían tirados en el lugar. La Uchiha entonces recordó que esos dos eran miembros del equipo de Taki. El que faltara la chica llamo su atención, pero entonces intuyo que ella había logrado escapar.
-Muy bien, lagartija. Prepárate para ser exterminado-dijo Menma mostrándose muy confiado.
-(¿Te atreves a insultarme, sucio imitador de Asura? Pagaras tus descaro)-rugió la bestia, aunque su mensaje no fue entendido por ninguno de los Genin presentes entendió el mensaje.
Sin mediar más palabras, el Tigrex se abalanzo sobre el equipo 11 con la intención de hincar sus colmillos sobre ellos. Menma y Setsuna se hicieron a un lado mientras Natsumi asumió la posición para el Hakkeshō: Kaiten (Manipulación del círculo celestial: Giro Celestial). La chica entonces giro sobre si y se cubrió con una semiesfera de Chakra rojizo que repelió el ataque de la criatura, quemándole levemente por las capacidades cauticas del Chakra del Kyubi.
La caída del Brute Tigrex fue breve y rápidamente emprendió una embestida contra Setsuna, que entonces realizo una sustitución con una roca para evadir el ataque. Sin embargo la criatura se dio cuenta del engaño y realizo una vuelta en U para volver contra la chica. La Uchiha no se vio intimidada y entonces realizo un Katon: Jutsu Gran Bola de Fuego contra la cara de su adversario, envolviéndole en una enorme esfera de fuego.
El ataque dio de lleno, pero no freno en lo absoluto la carga del Tigrex. La Uchiha entonces se aparto para dar paso a Menma, quien se había cubierto con una capa de Chakra rojizo, que le sirvió para potenciar un puñetazo contra el hocico del Tigrex, consiguiendo dejarle algo aturdido.
Tan pronto la criatura se recupero, este trato de devorar al chico con una mordida, la cual fue repelida por una patada de Menma. Luego el rubio empezó a golpearle repetidamente a base de puñetazos.
Natsumi acompaño a su hermano en su ofensiva dirigiendo una tanda de golpes Juken contra el rostro de su objetivo. Este no tenia Tenketsus a donde apuntar, pero la chica podía formar garras en sus dedos gracias al Chakra de Kyubi y aumentar exponencialmente el daño de sus golpes.
El asalto parecía mantener aturdido al Brute Tigrex, mas eso resulto ser solo una treta que mantenía el mismo para provocar que ambos chicos estuvieran en el rango de ataque.
La criatura tomo impulso y luego realizo un violento giro sobre su propio eje, que le propino un feo corte a los mellizos y les mando volando por la fuerza presente en el golpe.
Para su suerte la capa de Chakra que les cubría se llevo la peor parte y solo sufrieron heridas leves que se curaron gracias a su avanzado factor de curación. Sin embargo, sus orgullos si se vieron heridos por caer en la trampa.
Especialmente Natsumi, que en su egocéntrico pensamiento interpreto ese ataque como una burda imitación de su Kaiten. Sin pensarlo dos veces, ella se abalanzo sobre la bestia y busco ponerse bajo su cabeza. Allí volvió a realizo el Hakkeshō: Kaiten a quemarropa provocando que el Tigrex saliera despedido en el aire.
Menma aprovecho el momento para realizar el Katon: Jutsu Flor de Fexix para disparar un manojo de proyectiles ígneos contra la criatura en aire, quien al estar en tal posición no pudo evitar el estallido de la técnica.
Y el asedio de los mellizos estaba lejos de terminar. Natsumi exigió más de sí y realizo su técnica original, el Fūton: Tatsumaki Kaiten (Elemento Viento: Remolino de la Rotación Celetial), una maniobra que consistía en tomar todo el Chakra e impulso creado por su Kaiten y dirigirlo en un remolino comprimido de poder devastador.
La ráfaga golpeo contundentemente al Tigrex, pero este no cedió por vencido y realizo un atronador rugido que freno la técnica de la chica y el obligo a retroceder por el intenso ruido.
Menma en cambio no detuvo su asalto y esta vez ataco con la infame técnica de su padre. Un Rasengan de color carmesí que tuvo el suficiente poder para hundir al Tigrex en suelo por el poder del impacto y la subsecuente esfera de Chakra que luego de envolvió, quemándole con el intenso Chakra corrosivo del Kyubi.
El Brute Tigrex intento levantarse, pero al final sus fuerzas fallaron y callo inerte en la arena humeante que le rodeada. Casi al momento su cuerpo se ilumino y colapso en un orbe marrón con rayas negras.
-Ja. Tal parece que la fuerza de esas cosas está sobrevalorada -dijo pomposamente Menma, deshaciendo su capa de Chakra.
-Pero hay que admitirlo. Esto ha sido lo más interesante que hemos hecho en un muy buen tiempo-dijo Natsumi, también volviendo a su apariencia "normal".
-¿Y ahora que se supone que debemos hacer con esto?-dijo Menma con el orbe en su mano.
-Hisen dijo que nuestro hermano lo sostuvo junto a su espada y luego la espada se transformo.
-Interesante-dijo el Namikaze para sacar una katana y unirla con el objeto de su otra mano. Varios minutos pasaron y no ocurrió nada, exasperando con el ello al muchacho. - ¡Qué demonios! ¡Esto no está funcionando!
-Tal vez haya otra cosa detrás de la unión de esas cosas- comento Setsuna.
-Eso espero. Perdimos mucho tiempo para que solo obtuviera una bendita joya.
-Deberíamos descansar. Estoy segura que gastaron mucho Chakra.
-Podemos seguir. Quiero que consigamos otro cofre, quiero que quede claro que equipo es el mejor y ver si tenemos suerte de encontrar otro monstruo.
[Dos días después]
Ya casi todos los equipos estaban al límite, el recinto de la prueba hacia honor a su nombre y muchos estaban extenuados por el clima que allí reinaba.
El equipo 7 había tenido un recorrido difícil. Los lagartos de roca brillaban por su ausencia y solo habían dado con 75 monedas que consiguieron por casualidad en unas algunas bolsas en un oasis. Parecía que tendría que ir a por los golpes, si querían triunfar en la prueba.
Naruto tuvo que admitir que ese sería el caso. Por ello se dispuso a realizar un sondeo del área, si iba a pelear no iría justamente contra los más débiles.
Evidentemente resaltaron los jinchuriki, pero uno destaco entre los otros. La persona se apreciaba en un estado muy débil y estaba muy separada de los demás presentes. El pensamiento de realizar una emboscada ni siquiera cruzo su mente, más bien se lanzo a aquella dirección para ver si podía darle una mano a esa persona. Para el rubio ver que una persona estaba en problemas y no estar dispuesto ayudarla, era como si él mismo fuera el causante del problema.
Sasuke y Sakura ni se molestaron en reclamarle al Uzumaki cuando vieron que el chico les abandono de repente. Sabiendo cómo era él, supusieron que debía tratarse de un caso como el anterior.
Luego de unos minutos, el rubio llego al campamento con una chica morena de cabello verde en brazos.
-Naruto, ¿Quien es.....?-dijo Sasuke, pero fue interrumpido.
-No es momento para preguntas. Sakura ella tiene severos síntomas de insolación, ¿Puedes tratarla?
-S-si. Solo facilítame algo de hielo-dijo la pelirrosa algo desconcertada.
Tras unas algunas horas de tratamiento de la ninja medico, la paciente empezó a mostrar signos de mejoría. Sin embargo para cuando ella recupero el conocimiento, no fue muy agradable.
-¡NOOOOOOOOOO!-grito la peliverde poniendo en guardia al equipo 7.
-Tranquila, estas a salvo. No somos tus enemigos-le dijo Naruto buscando tranquilizar a la chica.
-¿DONDE ESTAN? ¿DONDE ESTAN?
-Tienes que calmarte-le advirtió Sakura. - ¿A quiénes buscas?
-A Yoro y Kegon, mis compañeros. Tienes que ver que estar bien.
-Lo siento. Yo solo di contigo. No había otra persona cerca de ti.
-No. No puede ser verdad. Tiene que haber sido un espejismo-dijo la chica poniéndose cada vez mas alterada y empezando a emitir un aura roja, la cual preocupo a los presentes.
Naruto sabiendo que significaba eso, rápidamente puso la mano en el cuello de la peliverde y le dio un ligero golpeo que la nockeo.
El chico sabría que eso le representaría un regaño por parte de sus compañeros en el futuro, puesto que ellos no tenían el conocimiento de que la chica que habían rescatado era una jinchuriki. Pero esto era algo que debía hacer, después de todo, esa chica tendría una edad como la de su hermana.
-Psst- escucho Naruto de repente.
El chico instintivamente se giro para buscar a quien le llamaba, mas no consiguió a nadie.
-No, estoy, en la mocosa. Pon tu mano en su frente. Hazlo rápido o perderé la conexión.
El rubio decidió hacer caso a la voz y hizo la acción solicitada. Inmediatamente se sintió transportado a un entorno oscuro.
-Aquí atrás- dijo la misma voz masculina para que entonces Naruto se diera la vuelta y se topara con aquel que lo había convocado. Frente suyo había una enorme prisión de cristal que contenía a un gigantesco escarabajo azul.
-Guau. Si que eres grande.
-Agradezco el cumplido.
-Déjame adivinar. Tú debes ser el Nanabi-dijo Naruto viendo las seis alas que nacían de la única "cola" de la bestia.
-Podemos dejar esos vulgares nombres de lado. Mi nombre es Chomei, humano. Tenlo presente.
-Lamento la confusión, Chomei- dijo el chico disculpándose. -Ahora si no es mucha molestia, podría explicarme porque estoy aquí.
-Sentí la necesidad de agradecer a aquel que rescato a mi carcelera. Otros hubieran pasado de largo y dejado que ella muriera.
-No hay nada que agradecer, hice lo que era correcto.
-De todas formas, gracias. Si bien la muerte es solo algo fortuito para los Bijuu, igual no es algo agradable. Además quería tener una visión mejor de ti.
-¿Por qué lo dices?
-Tus ojos son muy peculiares y llamaron mi atención. Me recuerdan a alguien muy apreciado para mí, a pesar de que son algo distintos.
-¿Puedo preguntar de quien se trata?
-Tal vez no sea el indicado y este no sea el momento para hablar de ello.
-Lo siento. ¿Puedo saber que le paso a esta chica?
-Solo otro capítulo en la lista de penurias que ha sufrido a lo largo de su vida.
-¿Qué quieres decir?
-Los jinchuriki son odiados por algo que no son, tal como nos pasa a nosotros los Bijuu. Fū ha tenido una infancia terrible a manos de los aldeanos de Taki y se volvió una kunoichi con el fin de ganar la admiración de los demás. Pero ahora ese camino se ve oscuro, pues hace poco perdió a sus compañeros a manos de una despiadada criatura.
-¿Fue un dragón?
-No sé cómo se le puede llamar a esa bestia. Tenía una actitud muy feroz y una fuerza extraordinaria. Por lo que a pesar de que sus compañeros y ella pelearon con todas sus fuerzas. Ellos se vieron obligados a distraer a la bestia, para que ella pudiera escapar.
-Lamento oír eso. ¿No trataste de ayudarla?
-No tenemos una relación tan buena como para que le ayudara activamente. Eso es lo que la agobia, piensa que fue demasiado débil.
-Si se enfrento a lo que pienso, no podía hacer mucho. Esas criaturas en verdad son fuertes.
-Me gustaría que conversaras eso con ella. Ella necesita de alguien ajeno a mí con el que pueda empatízar.
-Lo hare.
-Ahora.....Oh no.
-¿Qué sucede?
-Es mi hermana. Parece que tiene problemas.
-Déjamelo a mí.
-Gracias- dijo Chomei para romper el vínculo con el chico. -Curioso-dijo el Bijuu ahora estando solo. -Siento a padre en el, pero hay otra cosa que me parece muy familiar.
Una vez Naruto volvió a mundo real vio los rostros preocupados de Sasuke y Sakura, por el hecho de que el rubio, había quedado paralizado por unos minutos.
-¿Que ha sucedido?-pregunto Sasuke.
-Tuve una pequeña charla con alguien-dijo Naruto para entonces activar su habilidad sensora. Una cantidad colosal se había activado a lo lejos, cosa que Naruto identifico como el chakra como Bijuu. -Sakura, tu vendrás conmigo.
-¿Por qué?
-Hay un invitado no deseado en el lugar y necesitamos encargarnos de él.
-¿Hablas de un dragón? No creo que debamos meternos en esto.
-Sí, debemos en un hecho de que han sido atraídos por nuestra presencia. Por lo que es nuestra responsabilidad lidiar con ellos.
-Supongo que tienes razón.
[En otro punto del Desierto Infernal]
Una batalla de titanes era llevada a cabo en las inmediaciones del desierto, en donde lo que más lamentaba Karui era el hecho de que su compañero Omoi, había tenido razón en una de sus estúpidas predicciones.
Por fin habían dado con uno de los dichosos nidos de los lagartos de piedra, luego de varios días de búsqueda e incontables balbuceos de chico que decía cosas como "y si los lagartos ya se han ido del desierto", "y si Suna mintió y no existen los lagartos", "y si hay una criatura que está devorando a los lagartos", "y si los lagartos se acaban y nosotros somos la siguiente presa".
Ya la pelirroja estaba por golpearlo por ser tan hablador, cuando el nido que encontraron fue tragado por completo por las fauces de una gigantesca criatura que surgió de la arena.
Se trataba de un Odibatorasu, una criatura que en esencia era una gran tortuga roja. De al menos 10 metros de alto y 15 de largo. Su gran caparazón era bastante extraño debido a que parecía un enorme cañón. La bestia estaba cubierta por una gruesa capa de escamas rojas extremadamente duras, pues las espadas de los shinobi rebotaban con gran facilidad.
A la vista que su Kenjutsu fallaba, Karui reunió fuerzas y tomo el muy difícil Modo Bijuu, el cual le permitió tomar la forma del enorme gato de fuego azul que estaba en ella, el Nibi.
La chica inicio su ofensiva usando las garras imbuidas en chakra Katon, sin embargo esta apenas hicieron mella en la armadura de criatura. El Odibatorasu respondió realizando una embestida contra la chica que le provoco fuertes daños a su transformación, debido a que su oponente contaba con una enorme púa justo debajo del caparazón de su espalda.
Karui se aparto de la criatura y preparo una gran bola de fuego azul que luego dispararía contra su oponente, quien entonces disparo un potente chorro de arena desde su caparazón.
Ambos ataques se anularon y formaron una curiosa estructura de cristal, producto de la arena calentada a las altas temperaturas del Katon del Nibi.
No obstante fue una obra de arte efímera, pues el Odibatorasu disparo un enorme peñón a través de la estructura, que luego golpeo de lleno a la jinchuriki.
Sin bien no represento un daño muy significativo. El ataque fue suficiente para que Karui perdiera el control de su transformación y volviera a la normalidad. El Modo Bijuu era muy agotador y era para realizar técnicas devastadoras, no para mantener combates de ese tipo.
Los compañeros de la pelirroja se disponían a socorrerla, cuando un par de individuos ingresaron de repente a la batalla.
-Impacto Invernal-dijo Sakura mientras propinaba un fuerte golpe contra la mandíbula del Odibatorasu, dejando tras de sí algunas partículas de hielo.
Naruto prosiguió realizando un fuerte puñetazo en el estomago de la criatura, que provoco que la criatura cayera de lado.
-Ustedes salgan de aquí- advirtió el rubio.
-Tú no eres nadie para darnos órdenes-reclamo Karui.
-Yo realmente quisiera hacerle caso-dijo Omoi.
-Opino lo mismo-dijo Samui, para luego acercarse al oído de su compañera. -Es mejor si observamos desde una distancia segura- le susurro.
-Está bien-dijo la pelirroja, con lo que todo el equipo de Kumo se retiro.
-(Así está mejor. No queremos que nadie nos interrumpa, Asura y Shiva)-rugió la bestia, mientras se recuperaba de su caida.
-Entonces eres tú el responsable de los ataques en el País del Viento.
-(Unos cuantos. Esos oportunistas Cephalos también han hecho de las suyas)-rugió.
-De todas formas, me veo en la responsabilidad de detenerte. No puedo permitir que hagas daño a los demás.
-(Los otros no importan, ahora que estas aquí, Asura. Tú eres la razón de mi existencia.)
-Entonces ven.
-(Ya verás mi poder. El poder del Odibatorasu, el dios de arena)- dijo la criatura para emitir un enorme rugido que hizo la arena sacudirse y explotar como si fueran geiseres.
Sakura esquivo los pilares de arena que amenazaban con darle y se dirigió contra la criatura preparada para darle un puñetazo cargado con Chakra. Un sonoro golpe de hielo logro hacer que esta se resintiera, pero al mismo tiempo permitió a Odibatorasu poder golpear a la chica con su cola. La Haruno salió despedida contra una duna que disipo el impacto.
Naruto cargo su arma con Raiton y le arrojo contra la bestia la cual se chillo indicándole que tenía cierta debilidad contra ese elemento. Entonces el rubio hizo que una cadena apareciera entre su mano y el mango de su espada para halarla hacia él.
Con el arma en mano entonces realizo un corte en el aire que género un aluvión de carámbanos de hielo cargados con Raiton, que fueron disparados contra la gran tortuga roja.
Odibatorasu recibió muy molesto aquel ataque y empezó a aspirar arena con su boca. Con esto en un proceso inexplicable, la criatura dispararía otro enorme peñasco contra el rubio.
Naruto tuvo que pisar fuerte para aguantar el proyectil. El uso de Chakra en sus pies, le permitió reforzar la arena bajo sus pies para no caer. Con el proyectil de arena compactada el chico tuvo una peculiar ideal.
Con sus cadenas de chakra ataría el peñasco y entonces que dio una cuantas a su alrededor para que el objeto ganara impulso. Con ello, el rubio estrello el proyectil en la cara del Odibatorasu como si se tratara de un mangual.
Sakura volvió a la acción y se dispuso a liberar una nube de veneno a la espera de que provocara la misma reacción que en su última pelea. Sin embargo, el Odibatorasu no se planto a recibir el ataque y empezó a excavar en la arena para ocultarse.
No era un escondite muy efectivo, ya que se veía claramente una parte de su caparazón que sobresalía en la arena. Pero esto era apropósito, pues entonces la acción le permitía "navegar" libremente en la arena y así poder arremeter contra la Naruto con la finalidad de atravesarlo con la púa de su caparazón.
El chico mantuvo su posición y con un mandoble de su espada paró en seco dicha carga, que rompió la pieza de caparazón.
El Odibatorasu entonces salió de la tierra y dio un tremendo rugido que levanto una fuerte tormenta de arena en los alrededores. Posteriormente empezó a acumular cantidades masivas de arena para volver a atacar.
-Naruto, tienes que detenerlo. No creo que este en posición de esquivar sin ser arrastrada por la tormenta-advirtió Sakura.
-Estoy en ello- respondió el chicho para empezar a correr hacia la criatura.
La tormenta se hacía peor a cada momento y dificultaba el paso del rubio. Por lo que no llego a tiempo para cuando el Odibatorasu disparo un potente torbellino de arena desde el cañón de su espalda.
Naruto realizo con corte en el aire con su espada y liberaría una ola de hielo que buscaría detener el ataque en camino. Su potencia por desgracia no fue suficiente y el chico recibió de lleno el ataque que desgarro levemente sus ropas y le enterró por completo en el mar de arena.
Para cuando el Odibatorasu detuvo su ataque, dedujo que ya había acabado con el chico. Su ataque era demasiado poderoso como para que un humano lo resistiera.
La criatura entonces se dispuso a lidiar con su otro objetivo cuando entonces un par de rubios sugirieron de repente de la arena.
El Odibatorasu no era el único que podía moverse bajo tierra y Naruto hizo uso del jutsu Doton: Técnica del Topo Oculto para ponerse bajo la mandíbula de su oponente.
-Shoryuken- exclamo Naruto realizando un fuerte gancho alto contra la mandíbula de la criatura, la cual cayó sin decir una palabra más, después de todo había recibido un golpe que era letal sin la necesidad de súper fuerza.
La tormenta de arena entonces colapso junto al Odibatorasu Naruto orbes rojos anillados.
-¿Estás bien?- dijo Sakura viendo el estado magullado de su compañero.
-Sí.
-Al menos no nos iremos con las manos vacías. Porque no creo que podamos conseguir monedas a estas alturas.
-No lo veo de esa forma- dijo el chico señalando todo lo que el Odibatorasu no había podido digerir.
Después de todo, la criatura se había estado dando un banquete con los lagartos de piedra e inclusive tenía un cofre que debió quedar atrapado cuando navegaba por la arena.