Kenny besó a Butters.
- No dejaré que toda esta mierda vuelva a pasarte, ¿entiendes? -dijo Kenny-. Y mientras pueda impedir que algo malo te vuelva a ocurrir, lo haré.
- Realmente no quiero que te sacrifiques por mi. -Dijo Butters, tomándole las manos.
- Lo sé, y siempre respetaré lo que tu quieres, pero esta vez haré una excepción. -Kenny suspiró-. Butters yo siempre, a pesar de todo, me consideré una persona feliz. Sin embargo, no puedo pretender que todos actúen de la misma manera a como yo lo hago, quiero que seas feliz Butters. Déjame hacerte feliz.
Butters agachó la cabeza, suspiró.
- Bien... -Dijo Butters.
- Gracias, gracias, gracias... -Sonrió Kenny y comenzó a abrazarlo.
- Pero cuando se termine todo esto le patearé el culo a Cartman, ¿entiendes?
- Oh, estás en todo tu derecho. -Rió Kenny.
- Y, de verdad, si quieres parar, si esto te hace mal, solo dímelo. Yo me prostitui...
Kenny volvió a besar a Butters, dejándolo casi sin aire.
- No me distraigas... -Rió Butters.
- ¿Por qué no? -Sonrió Kenny-. Nunca te besé usando un vestido, debo aprovecharlo.
Kenny tomó la peluca de Butters, que había quedado a un costado de ellos y se la puso.
- ¿Cómo me veo? -Sonrió Kenny.
- Lindo. -Rió Butters.
Kenny acercó su cintura a la de Butters.
- ¿Sabes? Tu y yo vestidos así, besándonos, es la experiencia más lésbica que he tenido. -Rió Kenny.
- No seas idiota. -Rió Butters.
Kenny volvió a besar a Butters, abrazándolo con más fuerza y acariciando su espalda. Butters se dejó llevar y se abrió de piernas, sentándose en el regazo de Kenny, apretando sus torsos lo más que podía. Kenny aún seguía acariciándole la espalda, Butters tomó las manos de Kenny y las guió para que le tocara el trasero.
- Wow, esa no me la esperaba... -Sonrió Kenny.
- Me gusta cuando me tocas ahí. -Dijo Butters sonrojado-. Y puedes pasar tus manos por debajo de mi vestido, si quieres...
- ¿¿QUEEEÉ?? -Rió Kenny.
- Oh, solo si quier...
Kenny levantó el vestido de Butters y agarró sus nalgas. Comenzó a besar el cuello de Butters, haciéndolo suspirar.
- Oh, Kenny... -Dijo Butters.
- ¿Sabes que estamos en un baño público? -Bromeó Kenny, sin dejar de besarle el cuello.
- Ay, al carajo...
Clyde entró al baño, bastante alterado.
- ¡¡CHICOS!! -Gritó Clyde.
Butters se congeló. Kenny sacó sus manos del trasero de Butters. Clyde se quedó en silencio por unos segundos, y luego comenzó a reír.
- ¡OH, POR DIOS! -Rió Clyde- ¡MUY BIEN BUTTERS ASÍ, COMO TE ENSEÑÉ!
- Clyde... -Dijo Butters, entre dientes.
- Bueno, disculpen por interrumpir esta erótica escena -se burló Clyde-, pero estábamos preocupados. Hace dos horas que están encerrados en el baño.
- ¿¿Dos horas?? -Dijo Kenny-. Mierda, ni siquiera lo noté.
- Pero se salvaron, pillos. -Dijo Clyde, guiñándole el ojo-. Damien estuvo diciéndole "¡Vete a la mierda!" a todos los que se acercaban aquí. Luego deberían agradecerle.
- Bien. -Rió Kenny.
- ¿Saldrán ahora o se quedarán aquí haciendo cositas? -Dijo Clyde, levantando las cejas repetidas veces.
- Ahora salimos. -Dijo Butters.
- Mierda, ahora me siendo un aguafiestas. -Rió Clyde-. Nos vemos, chicos...
Clyde se fue del baño. Kenny miró a Butters. Le sonrió.
- Veo que siempre nos interrumpen. -Dijo Kenny.
- Sí, es una maldición. -Rió Butters.
- ¿Mañana quieres venir a mi casa? -Dijo Kenny-. Karen llevará a sus nuevos amigos por la tarde, y según lo que me dijo, dormirá en la casa de alguno de ellos.
- Bien... -Sonrió Butters.
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Stan estaba sentado en el sillón del cabaret, solo, bebiendo una cerveza. Tweek y Pip estaban en las habitaciones. Craig estaba en el bar, junto con Token, bebiendo cerveza. Kyle estaba atendiendo el bar, hasta que Clyde llegó.
- Kenny y Butters están bien. -Sonrió Clyde.
- Que bien. -Sonrió Craig.
- Manos mal. -Suspiró Token.
- ¿Necesitan algo? -Dijo Kyle.
- No, estaban bastante ocupados. -Dijo Clyde guiñando el ojo.
- Oh, ya veo... -Rió Kyle.
- Pero ahora volverán. -Dijo Clyde- ¿No quieres que yo me encargue del bar?
- No es necesario, Clyde.
- Pero el pobre Stan está allí, solo y triste bebiendo una cerveza en el sillón... -Rió Clyde.
Kyle sonrió.
- Bien, puedes atenderlo unos minutos por mi. -Dijo Kyle.
- ¡Gracias, bonito! -Rió Clyde-. Ahora ve con él.
Kyle salió del cabaret y Clyde entró. Token miró a Clyde.
- ¿No quieres que te ayude? -Dijo Token.
- No, no es necesario. -Sonrió Clyde.
- Bien... -Suspiró Token.
Craig sacó un cigarrillo, lo prendió.
- ¿Saben qué? -Dijo Craig-. He notado que todas las cosas mierdas que suceden aquí, se solucionan ignorándolas y pasando a otra cosa.
- Tienes razón. -Dijo Token-. Que mierda...
- No es tan mierda. -Dijo Craig-. Es un modo original de superación, y la felicidad se basa en modos originales de vivir, sin el seguimiento de una felicidad capitalizada u otro factor externo que sobre pase al individuo promedio, el cual, desea ser feliz pero no le otorga mayor importancia a su vida.
- Sabes que la mayoría de las veces que hablas no te entiendo, ¿verdad? -Dijo Token.
- Pero a mi me interesa mucho -dijo Clyde apoyándose sobre la barra-, pareces muy inteligente Craig, ahora veo por qué Tweek te echó el ojo.
- Gracias, pero creo que el intelecto humano tiene muy poco valor en la naturaleza. -Rió Craig-. Es más, ese concepto y el anterior, ni siquiera son míos, son de Nietzsche.
- ¿Podrías explicármelo? -Sonrió Clyde.
- Claro. -Sonrió Craig-. Verás, cuando Nietzsche habla sobre el intelecto lo hace desde la ironía, típico de él...
Clyde se quedó escuchando como Craig hablaba, mientras Token bebía su cerveza y los miraba en silencio.
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Stan había terminado su botella de cerveza, la dejó a un lado del sillón, suspiró. Kyle se acercó a él con una sonrisa.
- No deberías dejar la botella ahí. -Rió Kyle.
- Oh, Kyle, lo siento... -Dijo Stan.
- Es broma.
Kyle se sentó al lado de Stan. Notó que no se encontraba bien.
- ¿Estás bien? -Preguntó Kyle.
- No, me tiene mal lo de Kenny. -Dijo Stan-. Y como yo fui parte de esto.
- Supongo que si Kenny hubiese comenzado a trabajar aquí por otra razón lo habrías detenido, pero sabías que esto lo hacía por Butters...
- Sí, pero es una mala idea de todas maneras.
- Se lo dijiste. -Rió Kyle.
- Sí, pero no me escuchó. -Stan suspiró-. A veces siento que nadie me escucha...
- Yo lo hago. -Dijo Kyle, tomándole la mano.
Stan sonrió. Kyle sacó su teléfono y le mostró una foto a Stan.
- Mira, Ike me mandó una foto de su entrenamiento de hockey. -Dijo Kyle.
- Se ve muy feliz. -Sonrió Stan.
- Sí, yo pensé lo mismo. -Kyle suspiró-. Tendré que esperar al próximo jueves para volverlo a ver.
Stan se quedó pensando.
- ¿Qué tal si vienes a casa? -Dijo Stan-. Le dices a Cartman que he pagado por ti e invito a Ike, así tienen una tarde de hermanos.
- ¿Harías eso por mi? -Sonrió Kyle.
- Por supuesto. -Sonrió Stan.
Kyle lo abrazó.
- Muchas gracias, Stan. -Dijo Kyle-. Debo hablarlo con Eric primero, supongo que va a regañarme por haber estado contigo hoy. Pero luego le diré que te escupí la cara o algo así, para que se calme.
- Oh, puedes escupirmela si quieres.
Kyle abrió los ojos.
- Mierda, en mi cabeza parecía gracioso. -Dijo Stan, algo sonrojado.
- ¿Qué clase de fetiches tienes? -Rió Kyle.
- No, no tengo fetiches, te lo juro. -Dijo Stan, bastante nervioso.
- ¿No? -Dijo Kyle, rodeándolo con el brazo.
- Oh... -Stan comenzó a temblar-. Kyle, esto es un poco raro...
- ¿Te molesto? -Dijo Kyle.
- ¡No! Solo qué... No sé.
- No quiero ponerte incómodo.
- No me pones incómodo, solo que no sé si tu te sientes cómodo con mi situación y...
- Ya me hablaste del tema -dijo Kyle-, y si tu y Wendy están bien con esto, no me molesta. Salvo que tu no quieras...
- ¿Qué cosa? -Dijo Stan, mirándolo a los ojos.
Kyle se sonrojó un poco.
- Bueno, que ya sabes... Ayer te besé y tal vez fui demasiado lejos...
- No, para nada... -Dijo Stan, rascándose la cabeza-. A decir verdad, me gustó...
- ¿Hablaste con Wendy de ese beso?
- No... -Dijo Stan, agachando la cabeza.
- ¿Y piensas hacerlo?
- Preferiría dejar de ocultarle cosas...
- Te daría un discurso sobre eso, pero teniendo en cuenta de como le miento a Eric en la cara...
- No compares a Cartman con Wendy. -Dijo Stan.
- Sí, tienes razón. Pobre Wendy...
Ambos se quedaron en silencio. Kyle volvió a mirar su celular, ya que le había llegado otro mensaje de Ike. Kyle se cruzó de piernas y le contestó a su hermano. Stan comenzó a mirar las piernas de Kyle. Tenía puestas medias largas, pero él se las imaginó sin ellas. También imaginó acariciándolas, lentamente, subiendo hasta sus nalgas. Hasta que se percató de que gracias a todo ese pensamiento se había excitado. "¿¿¿ES UNA BROMA???", pensó Stan y se cruzó de piernas. Kyle guardó su celular y miró a Stan.
- ¿Me estás imitando? -Rió Kyle.
- ¿Qué? -Dijo Stan, completamente rojo- ¿Por qué lo dices?
- Nunca te he visto de piernas cruzadas.
- Oh, pero suelo hacerlo. Es mucho más cómodo, ya sabes...
- ¿De verdad lo crees? -Dijo Kyle-. Yo odio cruzarme de piernas. A veces, cuando estoy en "mi casa", suelo sentarme abierto de piernas, lo más que puedo, odio usar vestidos por esa razón.
- Pero puedes hacerlo usando vestido. -Dijo Stan.
- ¿Para que viejos pervertidos me miren ahí abajo? -Rió Kyle-. Paso...
- Puedes... Taparte con las manos. -Rió Stan.
Kyle rió y miró a Stan, de manera seductora.
- ¿Así? -Dijo Kyle, abriéndose de piernas y tapando su ropa interior con las manos.
Stan se quedó completamente rojo.
- Sí, así... -Dijo Stan.
- Creo que sería bastante incómodo. -Dijo Kyle, volviéndolas a cruzar.
- Sí, tienes razón... -Rió Stan, muy nervioso-. Por cierto, tienes lindas piernas.
- Oh, muchas gracias Stan. -Sonrió Kyle- ¿Te gustan más que mi culo?
- ¿¿QUÉ?? -Gritó Stan.
- Ay, no te hagas. -Dijo Kyle-. Ahora que tenemos suficiente confianza te puedo decir que me di cuenta de como me lo miras...
- Ehhh... -Stan no sabía que decir.
Kyle puso sus piernas sobre el regazo de Stan.
- Ahora puedes observarlas mejor. -Dijo Kyle.
- Hoy estás muy raro... -Rió Stan.
- Tal vez quería hacer esto hace rato, pero no podía debido a las circunstancias que te rodeaban. Pero, si no me has mentido en todo esto, puedo hacerlo...
- No, no te he mentido. -Dijo Stan-. Te juro que Wendy no tiene problema con... Bueno, esto.
- ¿Me lo aseguras? -Dijo Kyle, acercándose aún más a Stan.
- Sí... -Sonrió Stan.
Kyle se sentó en el regazo de Stan, comenzó a acariciarle el cabello.
- Gracias por ser sincero conmigo... -Sonrió Kyle.
- Ay, no digas eso... -Dijo Stan.
- Creo que no hace falta aclararlo, otra vez, pero por favor no quiero ser un inconveniente...
- No lo eres. -Sonrió Stan.
- No te mentiré, tengo algo de miedo porque soy un soñador y a veces me ilusiono muy fácil... -Suspiró Kyle-. Si alguna vez piensas que voy demasiado lejos solo dímelo, no arruinaré tu matrimonio con Wen...
- Kyle -dijo Stan, acariciando sus piernas-, tu nunca tendrás la culpa de nada... Solo de seducirme como lo estás haciendo ahora.
- ¿Soy muy evidente? -Rió Kyle.
- Bastante.
- Pero, ¿está funcionando? -Dijo Kyle, acercándose a la cara de Stan.
- Tal vez... -Rió Stan.
Kenny vio a Kyle y Stan en el sillón. Se rió por lo bajo y se acercó a ellos.
- ¡¡Hola chicos, volví!! -Dijo Kenny.
- ¡¡KENNY!! -Gritó Stan.
- Hola Kenny... -Sonrió Kyle.
- Disculpen por interrumpir, solo quería saber si tenían una tijera para prestarme. -Sonrió Kenny.
- ¿Una tijera? -Dijo Stan.
- Sí, para cortar un poco la tensión sexual que hay en el ambiente. -Rió Kenny.
Stan se puso completamente rojo y frunció el ceño. Kyle rió.
- Eres un idiota, Kenny. -Dijo Kyle- ¿Qué pasó finalmente? ¿Trabajarás aquí o nos los dejarás a nosotros?
- Continuaré siendo un testarudo, trabajaré aquí.
- Agh... Kenny... -Dijo Kyle
- ¿Sabes que eres un idiota? -Dijo Stan.
- Sí, pero un idiota enamorado. -Dijo Kenny, guiñando el ojo-. Nos vemos mas tarde, chicos...
Kenny se fue, Kyle sonrió y miró a Stan.
- Nunca pensé ver a Kenny así. -Dijo Kyle.
- Yo tampoco... -Suspiró Stan.
- Pero me gusta. -Sonrió Kyle-. Me encantaría estar un día así...
Stan agachó la cabeza.
- Tu te mereces el amor de una buena persona -dijo Stan-, pero te has topado con personas que no saben valorarte.
- Que dulce eres. -Sonrió Kyle.
Kyle se acercó a Stan y le dio un beso en la mejilla, muy cerca de la comisura de sus labios.
- Iré a atender el bar -dijo Kyle-, vine aquí para asegurarme de que estés bien.
- Bueno, ahora me siento bastante bien. -Sonrió Stan.
- Genial...
Kyle salió del regazo de Stan y se paró. Vio la botella que Stan había dejado.
- Y me llevaré esto. -Dijo Kyle señalando la botella.
- La había olvidado por completo. -Rió Stan.
Kyle se agachó para recoger la botella del piso de una manera bastante particular. Stan notó que el vestido de Kyle se había levantado más de lo usual, dejando ver ligeramente la ropa interior que cubría sus nalgas. Luego Kyle se incorporó, le guiñó el ojo y se fue. "No sé si soy un maldito pervertido o hizo eso adrede...", pensó Stan.
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Stan salió del auto de Token, el cual lo había dejado en la puerta de su edificio. Antes de encender el auto, Kenny salió y abrazó a Stan.
- ¿Qué? -Dijo Stan, extrañado por el abrazo.
- Gracias por ayudarme hoy, de verdad... -Dijo Kenny.
- Oh, no hay de qué... -Suspiró Stan.
- Y ya sabes que me molestó tu charla con Wendy, pero me pareció bastante maduro que lo hayas hablado con Kyle.
- ¿De verdad? -Sonrió Stan.
- Sí. -Dijo Kenny-. Pero ya lo sabes, si sigues así no los ilusiones. Por favor.
- No, tranquil...
- Hablo en serio. -Dijo Kenny-. La cara con la que miras a Kyle...
- Ahora tengo todo bajo control Kenny, de verdad. -Dijo Stan.
- Mmmm, no sé hasta que punto puedo creerte. -Kenny suspiró-. Pero mientras tu estés feliz, y ellos también...
- Gracias por preocuparte Kenny, nos vemos. -Dijo Stan.
- Ay, bien. -Rió Kenny-. Ve a masturbarte.
- ¡¡KENNY!! -Gritó Stan.
- Era broma -rió Kenny-, o algo así..
Kenny le guiñó el ojo a Stan.
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Stan estaba acostado en su cama. No podía dormir. Recordaba a Kyle sentado en sus piernas, acariciándole el cabello. Su mente cada vez lo llevaba más y más al plano de la imaginación. Era como sus sueños, donde estaba con Kyle, pero con los ojos abiertos. No pudo evitar visualizar a Kyle sacándose toda su ropa frente a él, mientras ambos se tocaban. Su erección era ya casi dolorosa, así que se tapó la cara con la almohada.
- ¡¡ODIO CUANDO TIENE RAZÓN, KENNY!! -Gritó Stan y comenzó a masturbarse.