Decir que las noticias no estaban llenas con la cara de su omega era decir poco, Sasuke miró una vez más con gran ansiedad correr en sus venas por cómo se llevaba a cabo la segunda captura de un viejo militar bajo las jurisdicción de Sakura Haruno y Naruto, saber en el tipo de plan peligroso que Naruto estaba, le tenía al filo de todo.
Se dijo a sí mismo que se largaría del campamento tan rápido como pudiera, necesitaba proteger a Naruto...
Se quedó quieto cuando vio como Naruto había golpeado en la cara a un joven militar que se había querido oponer al apresamiento, toda la gente gritó, el camarógrafo y la periodista se hicieron para atrás con miedo, Naruto se fijó en las cámaras, amenazando directamente que las apagaran, soltó la tensión de su cuerpo recordando que Naruto no necesitaba protección.
Intentó tranquilizarse, sabía que, si las cosas se ponían mal, Naruto iba a pedirle ayuda y por el momento quizá y solo quizá sería un estorbo para la operación.
Los medios se habían vuelto locos al ver a militares héroes de guerra ser arrestados así sin más, todos querían saber el porqué, pero las razones no eran dadas, ni Naruto ni Sakura podían evitar que los siguieran como mosquitos por todos lados, pero Sasuke sabía que si Naruto se dejaba ver era exactamente porque así él lo quería.
Muy en el fondo Sasuke sabía que era su forma de mandar una clara amenaza al líder de todo, era su claro distintivo de ''Aquí estoy y voy por ti'' él tenía muy claro qué tipo de persona era Naruto, no era alguien pudiera soltar fácilmente las cosas, era una persona llena de furia por la vida y maltratado por su casta, sabía que todo ese pequeño cuerpo guardaba tan oscuros deseos con el mundo.
Pero dentro de todo eso, estaba su tierna piel, un ser que solo anhelaba descansar pacíficamente y ser feliz, porque si Naruto no fuera una persona buena —aún cuando sus actos no parecían ser buenos— no estaría haciendo todo lo que está haciendo solo para asegurar a todos los omegas de Japón.
Su pecho se infló de orgullo viendo la fortaleza de su omega, no podía estar más agradecido de que el destino le forjara una persona de hierro y fuego, él se ocuparía de sus asuntos esperando la llamada de su omega, o de su hermano, sabía que todo estaba bien ya que el lazo estaba estable y cálido.
Cuando el lazo se inquietara sabría que algo malo sucedía, y ese día no le importaría nada porque iría corriendo hacia ellos dos.
Hacia su familia.
—Sigo pensando capitán, que no tuviste que haber dejado ver tu cara —mencionó la alfa fumando sentada de mala manera en una silla viendo hacia la pizarra llena de información.
Naruto quitó bruscamente la foto de la persona que había sido apresada ese día, tenía los nudillos amoratados por el golpe que le dio al alfa que se interpuso en su camino, y su manos comenzaba a hincharse, trató de ignorar la punzada de su mano y vio de reojo a la sargento.
—Ellos me buscaron primero —dijo lento, frío, Sakura le vio directamente analizándolo, nada quedaba de aquella cálida persona, ahora solo parecía hielo, letal y filoso, —Es solo para que se den cuenta que sus actos tiene consecuencias.
—Bien —cedió no queriendo empezar alguna discusión, —Vete a casa y descansa, tu cachorro espera.
Naruto asintió, se despidió de Kisame e Ino, saliendo directamente de ahí, tenía que pasar por Haruki a una guardería al paso para poder ir hacia Itachi en el hospital, aunque habían pasado días, él todavía seguía en proceso de recuperación, así sacrificando la comodidad de Haruki por dormir en un hospital, simplemente no podía dejar a Itachi solo.
Se puso la capucha en su cabeza siendo sigiloso, y se fue con cuidado, su nombre resonaba con fuerza por todo lados, y no le quedaba duda que hasta los malos oídos también habían escuchado de él, dejó salir sus orejas con cuidado para verificar el ambiente y saber si lo seguían. Todo su camino fue de esa manera, el miedo que sentía en su alma no se la deseaba a ningún omega, sentirse acechado, ese era su fuego para seguir con ello, que ningún omega pudiera sentir lo que él estaba sintiendo.
Sabía el riesgo, nunca realizaba nada sin antes pensarlo, y las probabilidades de que sucedieran cosas malas eran altas, muy altas y él lo sabía, no por algo es un analista de primera, sujetó con fuerza el arma cuando escuchó unos pasos pero risas juguetonas le hicieron desistir de sacarla por completo.
Cuando vio el pequeño lugar donde Haruki se quedaba, se acercó tocando suavemente la puerta, luego de unos minutos apareció la dueña cargando a Haruki quien al verlo sonrió feliz.
—Oji chan —murmuró el bebé y Naruto sonrió relajando el cuerpo, su nuevo apodo era ese, y la dulce voz de Haruki compensaba todo sus cansancios y dolores,—¿Cómo estuvo tu día?
—Un día muy ajetreado, ahora ven para que pueda llevarte con tu papá —Haruki asintió feliz y se abalanzó hacia Naruto, el rubio lo tomó en sus brazos rápidamente evitando que cayera golpeando su mano lastimada, trató de evitar el bramido de dolor para no asustarlo, la dueña le vio sabiendo pero Naruto solo sonrió despidiéndose y marchándose de ahí.
Pagó un taxi para poder ir al hospital, cuando al fin llegaron bajó a Haruki y este se fue corriendo feliz hacia la habitación de Itachi, ahora nada quedaba del cuello magullado, había sanado por completo, ahora lo que quedaban eran pesadillas que Naruto calmaba con suaves caricias en las madrugadas.
Las enfermeras le saludaron con respeto, él devolvió el saludo, luego entró a la habitación y jadeo un poco al ver como Itachi levantaba a Haruki.
—Como extrañaba tu peso entre mis brazos —dijo nostálgico besando toda la cara del bebé.
Naruto sonrió suavemente acercándose, las risas melodiosas de Haruki se escucharon por todos lados e Itachi lo soltó al fin, viéndolo para asegurarse que estaba bien.
—¿No te duele mucho? Es un día bueno ¿eh? —dijo Naruto acercándose al fin para poder recibir los mismos mimos que Haruki, Itachi lo agarró por la cintura acercándose para darle un beso fuerte, lleno de calor, Naruto jadeó sintiendo su cuerpo hormiguear, su lazo con Itachi jalando queriendo estar más cerca de él y molerse en su olor, Naruto besó la barbilla dejando pequeños mordiscos haciendo que Itachi gruñera en placer.
—Tengo algo que decirte —dijo de repente Itachi pero en ese momento entró el doctor que al ver la escena se sonrojó, era un pequeño doctor omega que había tratado recientemente a Itachi.
—Bueno este no es el ambiente para un cachorro, ven aquí Haruki-kun —dijo amablemente.
Haruki fue hacia él tomando su mano, Naruto se avergonzó un poco, se acomodó de mejor manera en la cama e Itachi se sonrojo fuertemente.
—Ahora se útil por una vez y cuida a Haruki-kun —escuchó como el doctorcito hablaba fuerte, tuvo curiosidad y fue hacia la puerta notando como le hablaba así de fuerte a su compañero.
Claro, había olvidado ese detalle, Shikamaru estaba ahí ayudándole a cuidar a Itachi cuando él tenía que salir para ver los casos, tener al alfa ahí en el hospital le dejaba más tranquilo porque sabía que nada malo podía pasarle a Itachi.
Lo único que no contaba era que su tonto compañero sintiera mas que una amistad por el joven doctor omega y su deporte favorito fuera el ''molestarlo''.
—Pero Temari-kun ¿¡Por qué me rechazas de esa manera?!
El doctor al notar la mirada de Naruto simplemente se giró y avanzó hasta él, Naruto pudo ver la sonrisa de diablo que Shikamaru puso.
—Oye Naruto —saludó, —¿Sabes que temari-kun es un hermoso canis dingo? —Shikamaru echó las manos para atrás sosteniéndose el cuello con su gran, gran sonrisa.
Temari se puso más rojo que nunca y vio hacia shikamaru
—¡No reveles mi especie!
—Ay doctor, hasta dije el nombre científico para que se impresionara conmigo —le guiño el ojo y Temari negó entrando directamente al cuarto, Naruto negó viendo hacia Shikamaru pero sin que el doctor notara, subió su pulgar en aprobación hacia el alfa.
Entró de nuevo a la habitación con el humor más apaciguado pero al notar como Itachi le miraba con cierto pánico lo alertó.
—Ya sabes Uchiha-san, si de verdad quieres que mañana sea dado de alta tiene que esforzarse en terminar tu día muy bien.
—¿Así que... qué?
Naruto lo miró sorprendido, entonces Itachi bajó los ojos como un perrito regañado.
—Sorpresa —mencionó, Temari le vio sin comprender por un momento para luego suspirar.
—Lo siento no sabía que era una sorpresa, y mucho menos pensé que no lo había dicho, bien, sé que puede ser más dulce el momento pero ahorita necesito mencionar lo que pasará a continuación —fue firme.
—¿Ves porque me gusta tanto? Es despiadado —dijo Shikamaru asomándose.
El doctor lo ignoró olímpicamente y vio hacia Naruto.
—Primero, estaré tan aliviado de que Uchiha-san se vaya de aquí.
—¿Perdón? —no puedo evitar sentirse ofendido.
—No es por él, capitán, es por su amigo, así nunca más tendré que verlo merodeando por aquí.
Naruto se abstuvo de decir algo, ¿cómo le diría que Shikamaru nunca se rendiría? Solo asintió viendo la sonrisa del diablo volver a aparecer.
Pobre de Temari.
—Siguiendo, la salud de Uchiha-san está completamente recuperada, los huesos sanaron perfectamente pero aunque sanaron bien, no es recomendable que haga movimientos bruscos o que levante mucho peso, quisiera que estuviera en observación por tres días más, y si algo llegara a suceder, de inmediato será traído al hospital de nuevo, quiero evitar que la costilla se rompa de nuevo y perfore un pulmón
Naruto tragó grueso.
—¿Hay una posibilidad?
—Me temo que sí, su cuerpo no es tan fuerte como el de un alfa promedio, y eso le debilita el sistema y es un poco más delicado, pero todo es perfecto, no hay problemas, si pasa estos tres días, pueden seguir con su vida rutinaria, no habrán más impedimentos.
Naruto asintió e Itachi igual, Temari asintió para comenzar a retirarse.
—Pasen buenas noches, fue un placer haberlos conocido, a ti no —señaló a Shikamaru, —Si tiene la más mínima molestia siempre puede venir, será recibido con mucho gusto, pasen una linda noche.
Luego de que todos se retiraran y un largo silencio, Naruto habló primero.
—Así que... ¿querías darme la sorpresa?
—Sí, solo que no tuve tiempo, besarte fue irresistible y tu aroma... Simplemente me distraje.
Naruto sonrió feliz, subiéndose de nuevo a la cama para estar a su lado, se recostó viendo su hermoso rostro e Itachi comenzó a acariciarlo suavemente, disfrutando de ellos dos, Naruto ahora comprendía por qué Itachi había podido levantar a Haruki sin ningún problema, su alfa al fin había sanado.
Itachi rozó su cadera pero se detuvo al sentir el arma en el cuerpo del rubio, le miró incrédulo y frunció el ceño, Naruto se removió incómodo, no había tenido tiempo de explicarle a Itachi las medidas que estaba tomando de protección, ¿cómo decirle a su alfa el tipo de persona que era? No quería que la perspectiva de Itachi cambiara, Naruto lo silenció con un beso antes de que rompiera el silencio, solo ahí pudo ahogar esa conversación que no deseaba tener.
Los días habían pasado e Itachi había sido nuevamente él, se miraba tranquilo y feliz moviéndose de nuevo en su casa, cocinando, preparando los cuartos, tomando duchas con Haruki y a veces con Naruto, no había ningún riesgo y Naruto podía estar más tranquilo con respecto a la salud de su alfa, pero la dualidad que tenía le estaba matando, sus días se basaban en ser feliz en la casa y ser frialdad en las noches, mientras sonreía con cariño al ver las ocurrencias de Haruki, sus manos se alistaban para seguir cazando animales.
Mientras sus pensamientos de amor inundaban su cabeza al ver a Itachi, los pensamientos de despellejar a esos animales seguía en su mente.
Su bestia estaba sedienta de sangre, mientras que su humanidad estaba sedienta de amor.
Nunca iba a poder estar a fin con el mismo.
Se acercó sin ganas hacia Sakura, la alfa tenía grandes ojeras, parecía que la operación le estaba pasando factura.
—Espero esto te sirva —dijo unos papeles sobre la mesa, —Si no piensas detener a ese hijo de puta, se escapara en el próximo vuelo a América.
—¿Qué? —bramó Sakura.
—Tienes aproximadamente 4 horas para solucionar esto, o vete despidiéndote de él, espero tengas en orden los papeles de captura.
La alfa se levantó apurada y prácticamente corrió buscando sus cosas para irse, Naruto suspiró, había hecho su parte del plan, había conseguido la información importante de un contacto que era cercano al sujeto que estaban esperando para apresarlo, específicamente un pequeño omega había tenido el valor para ser su contacto e infiltrado.
Ahora el valor de aquel chiquillo iba a ser premiado.
Vio su celular, era tarde, tomó la decisión de irse para su casa y estar tranquilo, además Itachi necesitaba de su atención pero no contaba que a unos metros lo estarían esperando con un daga para clavarlo en su cuello.
Si no hubiera sido por sus orejas que estaban oculta tras su capucha, estaría muerto, esquivó el brazo a tiempo solo lastimándose una mejilla superficialmente, el tipo bramó, sabía que era un beta, nadie nunca contraría a un sicario si no era beta, eran los únicos que no podían dejar rastros de feromonas.
Naruto salió corriendo alejándose de ahí, tuvo que esquivar un bala al escuchar el estruendo, se resguardó tras un carro que recibió el impacto, metió su mano en busca de su pistola y la alistó cuando salió nuevamente y comenzó a correr, siendo seguido muy de cerca por unas cuantas balas perdidas, sabía por qué camino seguir para evitar calles concurridas, no quería que esas balas perdidas quitaran vidas inocentes.
Cuando se vio bien lejos de toda civilización se detuvo, ya se había cansado de jugar a ser la presa, ahora él quería ser el cazador.
Lo espero bajo la oscuridad que le brindaba esa esquina, respiró pesadamente viéndolo llegar agitado buscándolo con la mirada, su bestia jugó internamente contra esa presa que pronto estaría en sus fauces, ronroneo sintiéndose letal, cuando el tipo le dio la espalda fue su oportunidad, tiró una fuerte patada que hizo que el tipo cayera, y sin más, disparó a sangre fría sin importarle nada.
Tres disparos fueron suficientes, Naruto se alejó de ahí, viendo la escena, su ropa se había llenado de sangre, a él nunca le había temblado la mano para ese tipo de cosas, no es como que le gustara recurrir a esa parte de él pero a veces era necesario.
Tampoco olvidaría que las primeras vidas que tomó fueron las de sus padres.
Negó revisando rápidamente los bolsillos para ver si tenía información, y no le sorprendió ver que lo había mandado ese maldito bastardo.
—Créeme Sasori, voy por ti.
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Hola, solo vengo a decirles a todos que ya estoy mejor, no ha sido fácil pero decidí volver a enfocarme en la universidad y mi familia, así que trato de no pensar mucho en eso, con sinceridad espero les guste como va la historia porque no se si a perdido rumbo, la verdad gracias por seguir aquí, tanto en las malas como en las buenas.
las/os quiero.
PD: Temari boy version es la cosa mas sexy que vi...