36.

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Capítulo 36.

Hace unos días atrás, mientras mantenía una sería conversación con mi almohada, llegué a la conclusión de que no podía seguir así.
Tener tanto tiempo libre solo ocasionó un daño en mi corazón, ya que lo único que podía pensar era en niall y las palabras que mencionó cuando ambos estábamos en la cocina de su casa.

Es por eso que tomé la decisión de retomar nuevamente mis clases en la universidad. Sé que mi plan inicial era hacerlo cuando tuviera todo el dinero reunido, pero dadas las circunstancias, no esperaré más para hacerlo.
Siento que es lo mejor. Necesito recuperar la vida que tenía antes, esa vida que apenas me dejaba pensar a causa de mi trabajo en el restaurante. Jamás creí que llegaría un momento en que tuviera pensamientos tristes al recordar mi antiguo lugar de trabajo, pero los tengo.

Sí, los extraño mucho.

Me gustaría poder volver, no importa que mi salario sea una miseria. Allí podía reír y socializar con un montón de gente.
Es por este mismo motivo que me encuentro en la oficina del señor Fleming. Le pedí una cita para hablar sobre este tema, y aunque tengo más probabilidades de que me diga que no es posible, aún albergo la esperanza de que me diga que sí puedo tener otro trabajo además de ser la novia falsa de la mayor estrella que tiene su sello discográfico.

-¿Como han estado las cosas con niall?¿Te has podido adaptar a su forma de ser?.—me pregunta con una sonrisa.

-Sí, por supuesto, nos llevamos bien.—le digo con honestidad.

-Creí que jamás podrían llevarse bien, niall estaba tan cerrado a todo esto, pero ahora puede estar tranquilo porque los rumores que habían en su contra ya no son tantos como antes.—me cuenta.

-¿De verdad?, eso es genial.—Me hago la sorprendida. Yo sabía esto, pero él no lo sabe.

-Sí.—dice.—es verdad, todo gracias a ti.

-¿A mi?, no diga eso, usted y él también han contribuido para que esos rumores cada vez sean menos.

Él sonríe.

-Cuéntame ¿que te trae por acá?.

Suspiro profundamente antes de hablar.

-Señor Fleming, bueno, resulta que...—digo sintiendome muy nerviosa.—Primero que todo, no es una queja, quiero que lo sepa.

-Solo dime que ocurre connie.—me pide y se ríe.

-Bien, iré al grano.—digo.—quisiera poder retomar nuevamente mi trabajo en el restaurante.

Ambos nos quedamos mirando, yo con súplica en mis ojos y él con confusión.

-¿Porqué?.—pregunta con el ceño fruncido.

-Para ser sincera, ya no soporto no hacer nada.—digo.—y quisiera poder volver a trabajar allí, si le parece bien.

-Vaya, esto me pilla realmente por sorpresa, hace unos días me has llamado para decirme que vas a retomar tus clases, lo que encuentro genial, siempre aliento a los jóvenes a tener un título universitario.—me dice.—pero volver a trabajar en el restaurante...—él niega.

-Será solo medio tiempo.—digo rápidamente.—sé que existe un contrato de por medio, pero le pido por favor que pueda pensarlo un poco más.

-Connie, comprendo todo lo que estas diciéndome, pero dime, si vuelves a estudiar y quieres tener otro trabajo ¿Cuando tendrás tiempo para niall?¿Para nuestros eventos?, la idea de ser la novia de él, es que estés disponible las veinticuatro horas del día, o al menos la gran mayoría de éste.—me dice y en el fondo, sé que tiene razón.—Además ¿Que pasó con el viaje a Italia? Niall me dijo que tú querías ir y estabas emocionada por eso, pero si vuelves a tus clases ¿podrán viajar?.

UNA GRAN MENTIRA - BY NATH 🥀Where stories live. Discover now