11. Primera salida

1.3K 73 9
                                    

CAPÍTULO 11: PRIMERA SALIDA

POV CORIOLANUS

Al día siguiente, Pluribus Bell, quien está ordenando unas cajas parece sorprenderse al vernos juntos, o más bien ver a Lucy fuera y libre en su bar. Luego de saludarnos a ambos, se detiene frente a ella y toma su mano.

−Es un honor volver a verte, Lucy Gray.

Lucy centra su atención en él y sonríe.

−Te recuerdo. Fuiste a verme al zoológico.

−Sí, era yo. No tuve oportunidad de presentarme ese día.

−Eres Pluribus Bell. Lamento no haberte podido agradecer por la guitarra antes.

−No fue nada, me pone feliz que alguien como tú le dé un buen uso después de tantos años. Siéntense, les serviré algo.

Lucy baja la mirada sorpresivamente al suelo y yo miro en la misma dirección.

Boa Bell con un nuevo collar rosa con moño e identificación huele en el aire mirando a Lucy y se frota contra su pierna.

−¡Hey! Hola, pequeña.

−Creo que le agradas –comenta él sonriente.

−Igual que a todos –agrego.

Luego moviendo la cola se sienta frente a mí y maúlla, y cuando me agacho para alzarla, empieza a ronronear. Nos sentamos en unas sillas de la barra del bar. Lucy Gray acaricia el cabeza de Bao Bell, ahora sentada en mi regazo, ronronea apoyándose en la mano de su nueva amiga.

Me río.

−Definitivamente, le gustas.

−No más que tú –comenta Lucy sonriéndome–. Al parecer, te adora.

Mi mano se detiene en el sedoso pelaje del lomo de la gata.

−Es una vieja amiga –reconozco–. ¿Tienes mascotas en el Doce?

−¿Aparte de la serpiente que deje ir? Si, una cabra. Antes habíamos adoptado un perro que fue abandonado por un vecino, pero el pobre se murió hace un par de años.

−¿Tienen una cabra? –pregunta Pluribus sorprendido.

−Es una fuente de ingreso, más que una mascota. Pero los niños del Covey están bastante encariñados con ella.

La única manera en la que una cabra puede convertirse en una fuerte de ingreso es por la leche que produce y sus derivados. Lo que me hace pensar en qué tipo de vida lleva ella en ese distrito y donde vive.

−¿Hacen algo aparte de eso y de cantar para la gente? –pregunta él con interés.

−En ocasiones trabajamos en El Quemador. Es... ¿cómo decirlo? El mercado negro del distrito y es más accesible que los locales del sector de los comerciantes. Hay muchos puestos allí que ofrecen diferentes productos y servicios. A veces, si tenemos suerte, quienes somos menores de edad, trabajamos por tiempo limitado para alguien. La mayoría de nosotros no tiene edad suficiente para trabajar en las minas, o un empleo formal. Es más complicado desde que murió nuestro "protector", el hombre que nos crío.

Lucy desde el comienzo dijo que se ganan la vida como pueden, y de alguna forma no logro evitar sentirme mal por las necesidades y dificultades que pasaron siendo tantos y quedando huérfanos a causa de la guerra o sus consecuencias. En algún punto, la gente del Capitolio no es tan diferente a la de los Distritos.

−Tomen, sírvanse. Va por mi cuenta.

−Es muy amable de tu parte, gracias –Lucy con su habitual costumbre de agradecer los gestos de las personas que la ayudaron, hace que las personas se sientan cómodas ante su presencia.

Escrito en las estrellas (CoryoxLucy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora