El Hermano de mi Ex

23 Se Junta el Ganado

23 Se junta el ganado

¿Cómo esperan que crea en el amor si Miley y Liam se divorciaron?

Ellos eran una pareja de culto, llevaban como mil años juntos, lo tenían todo para ser el cliché perfecto y luego me entero que el amor matrimonial no les duró ni un año. Lo repito, ¿Cómo me piden que crea en el amor si hasta las parejas estables terminan así de la nada?

Paso la página de la revista que encontré en la cartera de Victoria y sigo poniéndome al día con la prensa amarillista de Hollywood. — ¿Sabías que Bradley Cooper está soltero? —Jules asiente y continúa escribiendo en su móvil. — Quizás deberías organizarle una cita a tu jefa con él, no me molestaría tenerlo como padrastro.

—Tú mamá jamás saldría con un hombre menor que ella. —Paso las páginas y le enseño la fotografía de otro codiciado soltero. — Mejor amiga de Angelina, jamás saldría con su ex. — La rubia sonríe con superioridad. — Y no le gustan los rubios.

¿Por qué tiene que ser tan exigente?

Necesita un hombre, punto final, lo que importa es que tenga un aparato reproductor masculino, que sea paciente y sumiso ante la compleja personalidad de Victoria.

—Entonces deberíamos crearle un perfil en alguna página de citas, tú solo dime que le gusta y yo me ofrezco como voluntaria para elegir al candidato.

— ¿Desde cuando tienes tanto interés en la vida amorosa de tú mamá? —Enarca una ceja. — Mejor no me digas, lo que sea que estés tramando no tendrá mi ayuda, no volveré a caer en tu juego y luego terminar teniendo problemas con tus papás.

Desde que la culpa me llevó a enclaustrarme en la habitación de mi mamá y pegarme a ella como rémora siguiéndola para todo lado — porque para jugar con fuego soy toda una adulta, pero cuando me quemo vuelvo a ser una párvula que necesita de su progenitora para que le solucione los desastres que provoca —, en las cuarenta y ocho horas que llevo en mi confinamiento voluntario me he dado cuenta de tres cosas: la primera es que noté una extraña tensión sexual entre Ryder y Jules, la segunda es que husmeando entre las cosas de Victoria descubrí que en su grupo de amigas es la única que sigue soltera, y la tercera y no menos importante, es que sin querer escuche una conversación entre mi hermano y nuestra fiera hablando sobre sus planes para quedarse un tiempo en Merton, lo cual es muy bueno para todos, mejor dicho es bueno para mí, así podré irme de casa de Nikki y vivir lejos de Kasch.

— ¿Desde cuándo Ryder se queda en la misma habitación que tú sin que este tu jefa presente? — Enarco una ceja. — Si mal no recuerdo llevas años quejándote de la personalidad de mierda que posee mi hermano. — Subo los pies a la mesa y me llevo la pajita a los labios para darle un gran sorbo a mi Coca-Cola. — ¿No será que de repente ese odio mutó a algo más?

—Las drogas no son buenas, Gabrielle. — Me empuja las piernas. — Vete a dar una vuelta por el hotel y déjame trabajar.

—Ya lo recorrí de arriba abajo y me echaron del restaurante.

—Entonces ve a tu casa y dile a ese chico que deje de llamar. — La miro con asombro. — Sí, me tienes harta, no me dejas trabajar y de verdad necesito terminar de leer este contrato, así que no es por echarte, pero largo de aquí.

—No esperes un regalo bonito de navidad. — Recojo la mochila y salgo de la habitación dando un portazo. Al ya no se encuentra conmigo tuve que dejar que Ryder lo llevara a la casa porque Abigail exigía la presencia de "su" gato, solo es suyo para acariciarlo, para todo lo demás es exclusivamente mío. —Perdón, perdón. — Me agacho a ayudar al humano con el que acabo de chocar. — Lo lamento, no te vi. — Al levantar la mirada encuentro un par de ojos grises que me observan fijamente. — Hola, tu.