En un inocente capricho, Belle ha desobedecido las órdenes de su empleador y amo, Rumplestiltskin. Y con ello, las manecillas del amor y la pasión han comenzado a moverse en un peligroso hechizo, del cuál sólo tienen tres noches para romperlo. Sin e...
DISCLAIMER: ninguno de los personajes ni la serie me pertenece, así como las lyrics. Rumplestiltskin x Belle. NO contiene escenas fuertes (aunque Rumplestiltskin no puede asegurarles lo mismo en próximos capítulos, dearies).
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"Three night spell: Hechizo de tres noches"
Arte por themightyrumbeller
Enter the scenery of love
lovers are in pain,
they blame and pick on each other.
You play melodies of love
forgotten phrases,
tender and sweet.
"Vanity" -Yuki Kajiura
Capítulo 4
Belle se detuvo en seco un momento al escuchar la respuesta de su amo y la asimilaba. ¿Había escuchado correctamente? su coraje y decisión que llevaba consigo minutos atrás le abandonaron tras escuchar las palabras de Rumplestiltskin. Instintivamente, subió corriendo el resto de los peldaños y cerró la puerta de su habitación de golpe, como si las palabras le persiguieran al ser pronunciadas. Imposible. Su mayor temor convertido en realidad. Dejó caer su peso sobre la puerta, deslizándose con la espalda pegada a la madera hasta tocar el suelo. Todas las emociones guardadaas durante los sucesos del día se abrieron paso desatando finalmente la confusión. ¿Hablaba en serio? ¿Y si sólo quería aprovecharse de ella? ¿O sólo quería alejarla de su habitación para resguardarla de un verdadero peligro? Recordó la mirada de su amo. Sus palabras debían ser ciertas.
"Porque tendrías que dormir tres noches conmigo, dearie"
Se llevó las manos a la boca intentando sofocar un sollozo. Su amo tenía razón, no podía hacerlo. No se encontraba preparada. Era un precio demasiado alto que ni siquiera ella estaba dispuesta a pagar. Repasó los sucesos tratando de encontrarles sentido y se dio cuenta que no paraba de cometer errores ese día. Había sido engañada y liberado un hechizo demasiado perturbador para su amo. Un hechizo de amor. Y todo por culpa de una tonta vela. Observó la vela que le dio Rumplestiltskin, un hechizo protector. Tenía que encenderla para estar protegida de él. Recordó el incidente, su respiración, su mirada y el calor del cuerpo de su amo sobre ella. Un hormigueo extraño recorrió su cuerpo, pero no logró descifrar que era. ¿Pánico? Rememoró el temor de la expectativa de lo que sucedería al sentirse atrapada bajo el cuerpo de aquél hombre. Se recordó observada y deseada cada milímetro de su piel. Se llevó los dedos hacia sus labios, intentando recrear el roce de los de Rumplestiltskin. Apenas había rozado sus labios, pero había logrado sentirlo.
Su primer beso.
El hormigueo se transformó en un calor extraño. Había sido su primer beso. El que tanto esperó todos estos años, el que había rogado sentir y experimentar y deseaba hacer suyo cada que lo leía en un libro. Recordó como el tiempo se detuvo, inexperta y expectante ante nuevas sensaciones. Y ahora tenía que huir de quién había despertado sus labios. Una ligera lágrima surcó su mejilla.
