El Cerezo De Akatsuki

OVA

¡Feliz año nuevo!

Sakura estaba esperando en la puerta de Konoha. Tras una larga charla con Tsunade, les ha concedido permiso al Equipo 7 a salir a conocer a la familia de Sakura... O eso creía Godaime... e habían mentido de mala manera, ella realmente creía que iban a Suna, y Gaara también se había comunicado con ellos. Sakura sabía que no estaba bien, pero no era el momento de decir nada todavía acerca de su familia.

- ¡Sakura-chan, buenos días! -le saludó Naruto-. ¡Fuaaaa! Estoy algo nervioso de conocer a la familia de Sakura-chan... ¿Crees que les agradaré 'ttebayo?

- ¡Sí! -le alivió animada.

- Por supuesto que les va a agradar. Es su objetivo después de todo. Tenerlo entrando por la puerta el solito será una ventaja para ellos -dijo Haku.

- Sakura -saludó Sasuke-. Naruto -dijo con desgana.

- A partir de ahora debemos ir rápido. Yoo iré a mi velocidad de siempre, vosotros tendréis que adaptaros, si no podéis seguir, avisadme.

Sakura se ató el cabello bajo la atenta mirada de los dos chicos. Sus miradas se dirigían a la nuca de la chica y a su blanca piel. Pero sus atenciones fueron hacia la mirada que tenía la chica. Era una mirada que nunca habían visto, una mirada que les embelesaba. Naruto pensé que era una mirada atrayente mientras que Sasuke, se percató de la diferencia de edad mental que había entre ambos.

- ¿Nos vamos? -dijo manifestando su chakra-. Si utilizamos el chakra iremos más rápido y mientras mejoraremos el control.

- Pero yo no tengo un Bijuu -dijo Sasuke. Sakura tomó su mano y cerró los ojos. El chico sintió una oleada creciente de chakra proveniente de la mano de Sakura.

- Con esto no gastarás de tu chakra. En marcha.

Sakura se desvaneció seguida por Naruto. Y después Sasuke, y aunque sintió un poco de envidia de ellos, activó su Sharingan y pudo ver los movimientos torpes de Naruto al correr por no estar acostumbrado a esa velocidad. Sonrió de lado y siguió su camino orgulloso.

Sakura iba marcando el ritmo delante. Iba nerviosa por cómo su familia podría reaccionar cuando su familia viese a sus compañeros. No pasó demasiado tiempo hasta que llegaron. Un ninja normal hubiese tardado 4 horas o incluso más. Gracias a las habilidades potenciadas de los Bijuu e incluso sus propias entrenamientos, tardaron 1 hora.

- Hemos llegado -dijo Sakura deteniéndose delante de una puerta sellada-. A partir de aquí no debéis separaros de mí. Sobre todo tú, Sasuke-kun, sé lo que significa para ti estar aquí.

Mientras tanto, al otro lado de la puerta, Akatsuki se preparaba para la llegada de su miembro más importante y querida.

- ¡Pain-kun! ¿Sientes su chakra? ¡Sakura-chan está fuera! -su mirada se oscureció-. Acompañada de dos trozos de escoria...

Los ojos de todos los Akatsuki se tornaron oscuros y por un momento se paralizaron. Comenzaron a moverse de nuevo y esta vez en silencio. El ambiente que antes era bastante familiar, se había tornado de un color asesino. Se colocaron en sus respectivos sitios de la mesa redonda y esperaron a que su querida Sakura llegase con aquellos chicos que la mantenían lejos de su hogar.

- Preparaos -dijo Pain con una voz tenebrosa-. Hoy tendremos que limpiar sangre.

Sakura realizó unos sellos y abrió el sello que mantenía la puerta cerrada. Entraron y recorrieron los oscuros y fríos pasillos de la guarida. Tras caminar un rato, llegaron a una gran puerta de la que provenía una gran sed de sangre.

- S-Sakura-chan... -dijo Naruto con voz temblorosa-. No nos harán nada, ¿verdad?

- Eso espero -pensó-. Tranquilos, no os harán nada.