El Cerezo De Akatsuki

Solo una niña...

- Es gracias a Haku y a mi familia que he conseguido ser tan poderosa. Si en un principio yo no hubiera tenido a Haku, ellos no me hubieran reconocido como alguien poderosa y no me hubieran criado... Si no fuera porque nuestros Bijuu nos modifican para poder portarlos, posiblemente yo no hubiera resistido tanto...

- ¿Qué estás diciendo? -dijo Naruto extrañado.

- Nuestro cerebro es el que controla la fuerza de nuestros músculos. Tanto en el tuyo como en el mío, esta habilidad ha sido casi eliminada de nuestro cerebro y nuestros músculos se desarrollaron. También, es gracias a ellos que nuestro chakra es poderoso... Si no fuera por ellos, yo sería una inútil. Ni siquiera te hubiera conocido...

- Sakura-chan...

- Eso no es cierto, Sakura -dijo Haku-. Yo no soy un Bijuu normal, te elegí y es gracias a tu propio poder que lo hice. Es cierto que yo he potenciado mucho tu evolución, pero... Sin tu propia fuerza, tu cuerpo no hubiera resistido mi poder. Hace años, cuando te descontrolaste y casi destruyes todo a tu alrededor, no fui yo quien te brindó ese poder... Fuiste tú. Las estrategias son tuyas. Los lazos que has ido formando, independientemente de quien haya ayudado a que conozcas a esas personas, son tuyos... No eres una inútil, eres tú misma y todo lo que has conseguido, todo ese poder es gracias a ti.

- Pero yo... Este poder... El Sharingan y el Byakugan, es gracias a ti que lo tengo...Las habilidades que utilizo son tuyas y de mi familia.

- Hagamos esto. Haré que tu cuerpo se vuelva más débil. Lo respetaré por completo haciendo que tengas el nivel de una Gennin de nivel alto. Tu fuerza y velocidad disminuirán potencialmente. No podrás utilizar ciertas técnicas porque también bajaré el nivel de tu chakra consumiéndolo. Si estás de acuerdo con esto, te pondré un sello.

- ¿Estás segura de esto Sakura-chan? -le preguntó preocupado Naruto quien había permanecido callado durante toda la conversación-. No sabes que podría hacerle esto a tu cuerpo. Además no entiendo por qué no quieres ser poderosa. Eres fuerte gracias al entrenamiento que has tenido, no gracias a tu Bijuu. En mi caso, es gracias ti que me entrenaste, en tu caso, tu familia fue quien te entrenó, ¿cierto 'ttebayo? ¿No estás agradecida con ellos quienes te entrenaron por tanto tiempo?

- Sí lo estoy pero... Por algún motivo, me siento tan débil... -dijo sollozando.

- No eres débil, eres muy fuerte Sakura-chan. Tú me diste esperanza para seguir luchando y hacerme más fuerte. Gracias a ti, he descubierto muchos sentimientos. Fuiste la primera persona en la que confié. Te quiero mucho, Sakura-chan. Y no soportó verte tan triste.

- Pero Naruto-kun, hay un gran secreto que te estoy ocultando... Un gran secreto que a lo mejor puede hacer que nuestra relación de amigos se acabe, un secreto sobre el lugar al que pertenezco, sobre mi familia... Un secreto tan grande que-

- Sakura-chan -llamó su atención con seriedad-. Tú eres tú. Esta personalidad que tienes es la tuya. Lo sé porque he visto a muchos adultos mentir y tuve que aprender a diferenciar a los mentirosos... Y gracias a eso, descubrí desde un inicio que tú eras honesta y una buena persona porque te acercaste a mí aún sabiendo que era...

- Un Jinchuriki. Pero Naruto-kun, también hay un motivo acerca de eso... Si yo no hubiera...

- ¿Si no hubieras qué, Sakura-chan? ¿Crees qué nuestro encuentro se debe a... una misión o una tarea? Si ese hubiera sido el caso, no me importa. Te quiero cuidar porque te quiero, porque mi sentimientos me obligan 'ttebayo. Nada va a cambiar entre nosotros -Sakura no contestó-. Pero Sakura-chan, ¿qué es lo que te preocupa? ¿Tu poder, Haku, tus secretos, o nuestra relación?

Sakura no supo que responder, de nuevo. Naruto le había hecho una pregunta difícil de responder. Por primera vez, Sakura había recibido un gran golpe desde que salió de aquella aldea que la maltrataba. La joven chica estaba confundida, no sabía que pensar ni que responder.

- Yo... -dijo con la voz quebrada.

- Está bien Sakura-chan, puedes llorar todo lo que quieras... No tienes porque contenerte. Aquí solo estamos Haku y yo.

Naruto atrajo a Sakura y la recostó sobre su pecho. Ella se dejó abrazar.

- Yo también -se quejó Kurama por ser olvidado.

- Sí, él también 'ttebayo.

Sakura rió con lágrimas en los ojos, agradecida de poder hablar con Naruto de esa manera.

- Gracias... Naruto-kun, a veces cambias totalmente de personalidad... Tanto que me sorprende... Es tan agradable... Eres tan cálido... Se siente tan bien... Es como si estuviera sobre un animal mullido...

- Sakura-chan... Yo... te amo más de lo que crees... Tranquila, descansa, no dejaré que nadie te haga daño de nuevo -dijo decidido.

Pero su declaración llegó tarde. Sakura ya se había dormido y estaba relajada sobre el pecho de Naruto. El rubio estaba nervioso y ligeramente sonrojado.

- Oye chico, contrólate. La familia de Sakura te matará si descubren que has intentado algo con su querida Sakura -le advirtió Haku-. Además, relájate. Tu corazón está latiendo muy rápido.

- Pero Sakura-chan se ve tan linda... Dime, Haku... Ella... ¿Por qué se esfuerza en ser tan fuerte si ella es tan... frágil?

- ¿Frágil? Es como tú. Ella es fuerte por fuera, frágil por dentro. Tú eres tonto por fuera y por dentro, pero con una personalidad seria en el fondo. Es lo único que os diferencia -se burló Kurama

- Quizás tengas- ¡Oy! ¡¿Me llamaste tonto?! ¡Tú, estúpido zorro Bijuu! ¡Ya es suficiente! ¡Dejen de hablar! ¡Estropean mi momento con Sakura!

Los Bijuu no dijeron nada más. Dejaron a los dos niños descansando mientras ellos se iban a jugar cartas. Naruto únicamente acompañado por sus pensamientos y Sakura.

- A veces me pregunto por qué tenemos que sufrir nosotros esto. Todos los abusos diarios por tener a un Bijuu en nuestro interior. Por ser diferentes. A veces me pregunto si las demás personas no se dan cuenta que solo somos niños. Si nosotros podemos cagar con este peso. Incluso en el pasado, antes de conocerte, simplemente me entraron ganas de desaparecer pero por algún motivo, no podía hacerlo. Algo me impulsaba a detenerme antes de tomar una decisión. Quizás fuese Kurama o quizás fueran las fuerzas del destino que querían que tú y yo nos encontrásemos, Sakura-chan... Solo eres una niña pero siempre pareces añorar algo pero aún así siempre eres más fuerte que yo... ¿Tú también extrañas a tu familia?

Mientras tanto, en el barrio Uchiha, un joven chico se encontraba pensando en sí mismo.

- Mi único propósito ha sido vengarme de él... ¿Por qué ahora mi único pensamiento es proteger a Sakura? Es una molestia... Siempre está tan feliz. Es como si nada malo en este estilo de vida ninja pueda ser capaz de alterar esa felicidad. Tsk, ¿por qué debería preocuparme por ella? Pero no quiero perder a otra persona importante para mí... ¿Qué debería hacer, hermano? Hmp. ¿Por qué después de todo aún sigo queriendo tu ayuda? ¿Por qué me dejaste solo? Solo era un niño...

Y mientras, Sakura también pensaba.

- Estoy cansada de esto... Me gustaría no tenr que mentirle a Naruto-kun. Me gustaría poder decirle la verdad... Pero... ¿qué pensará cuando se entere de mis secretos? ¿Seguiría siendo mi amigo? ¿Por qué todo se ha vuelto tan complicado? ¿Por qué no puedo simplemente desaparecer? No... Aún no puedo desaparecer... Sigo siendo solo una niña... Pero de verdad, de verdad... Desearía poder ser normal... Lo siento... Naruto-kun... Gaara-kun... Sasuke-kun... Lo siento...

- Sí, Sakura-chan... Sigue destruyendo tu mente... Así yo seré libre y el caos reinará sobre este mundo.