The Guardian Queen. 1er Libro

Capítulo 25

***Narradora***

Esa oscuridad que lo rodeaba pareciera ser infinita, no sólo el agua fría lo acompañaba bajo la gruesa capa del hielo sino también las bestias de las pesadillas que lo vigilaban y mantenían con vida.

El hielo con metros de distancia sobre él ya estaba más endurecido debido al tiempo que se había mantenido ahí abajo y que probablemente seguiría haciendo los próximos días.

En el reino de Arendelle, la reina continuaba contestando pendientes de otros reinos con comercios para su reino.

La platinada no había tenido comunicación con el primer ministro desde la despedida de Hans, ella pensaba que el primer ministro se había quedado tan sorprendida como ella cuando el príncipe pidió su mano.

Pero seguro era un alivio para él, pues ya estarían esperando a un rey digno de la corona y del corazón de la reina, digno de proteger y mantener al reino. Pensamiento el cual jamás Elsa tomaría en cuenta.

EL único era sobre su guardián que estaba desaparecido de su vida desde hacía una semana, anoche le dejó en claro a ese Conejo que no se detendría en hacer lo que tuviera que hacer para encontrarlo.

¿Qué si no llegaba Jack? ¿O si lo asesinaba ese Conejo? Tendría que matar a alguien pero ¿Quién? ¿Por qué? ¿Por no haberle cumplido su capricho?

Sus valores y principios iban en contra a esos pensamientos pues ella no es quien para arrebatar la vida de un ser vivo pero......él, Pitch Black, le había dicho palabras sobre la maldad que pudiera amenazarla a ella o a quienes ame.

Ese Conejo enorme era una amenaza junto a los guardianes, el príncipe Hans era una amenaza también y no dudaría en exterminarlas.

Esta noche estaría esperando hasta la última hora de oscuridad para ver resultados de Jack, si no es así, estaría lista para el siguiente paso.

***

El ruido era demasiado tenue y era obstruido.

El cuerpo suspendido del guardián se mostraba tan tranquilo y dormido que pareciera haber muerto, incluso su blanca piel pareciera no tener más vida de un inmortal.

La oscuridad entonces fue interrumpida por unos rayos de luz lunar que se introdujeron en el agua junto a un ser más que lo tomó del torso con ambas manos y nadar con fuerza de un salto hacia la superficie.

El enorme guardián arrastró a su antiguo compañero y amigo hacia la orilla de la tierra para evitar algún quiebre más del hielo. Y de su otra mano soltó el cayado a unos centímetros de ellos.

-Ey....-Murmuró con nerviosismo – Oye muchacho, despierta –Dijo después con voz golpeada y sin dejarse ver debilitado por su antigua amistad.

No abría los ojos.

Pegó su gran oreja al pecho del guardián en espera de algún latido el cual no emanaba. Se despegó de él para colocar ambas garras en su pecho y comenzar a comprimirlo repetidas veces para despertar su sistema respiratorio.

Las pesadillas que habían vuelto a Jack, estaban rodeando a ambos con la oscuridad, haciendo sentir más nervios al gran guardián.

-¡Se supone que debían mantenerlo vivo! –Gritó con rencor a las pesadillas.

Siguió ejerciendo fuerza a su pecho pero sus ojos continuaban cerrados. Estaba desesperándose y sin saber qué hacer si no despertaba.

No le preocupaba ahora la reina sino Jack quien no despertaba ahora.