Good Reputation [O'Neal #2] ✔️

Capítulo 14| La Fiesta.

Capítulo dedicado a samantajanet

T r a c y

—¡Tengo a la jodida novia más hermosa del mundo! —gritó Chris arrastrando un par de sus palabras. Creo que con lo que acabe de decir ya habrán notado que él está borracho y yo como buena sobria, los estoy ayudando a caminar hacia la salida para llevarlo a su casa—. ¡Dame un besito, amor! —estiró los labios pero me alejé.

Puede que me guste mucho, pero nunca besaré a un borracho y no es por la persona, es por el olor, nunca me agradó y menos me gusto. Lo único que tomó es vino y champaña pero solo en ocasiones especiales como cumpleaños y esas cosas.

—Adios, chicos. Llevare a este loco a su casa. Nos vemos el lunes. —ellos se despidieron.

Creo que de toda la fiesta, uno de los peores fue Chris. Cuando llegamos empezó a recibir tragos de tequila y ahora es un borracho cariñoso, griton y celoso que no deja que sus amigos se acerquen a ayudarlo porque me iban a tener que tocar.

Iré al cielo por ayudar a los borrachos a las cuatro de la mañana, incluso mi hermano se fue hace un rato.

°°°

Un par de horas antes.

La directora dio un pequeño discurso antes de que prácticamente nos echara a todos de la escuela. Así que ahora estamos aquí, en el auto de Chris de camino a la fiesta en casa de Alan.

Luego de cada baile cada año hace su propia fiesta aparte, o sea que en nuestra fiesta solo van a estar los de último año, tal vez algunos amigos de los años inferiores pero no son muchos, nadie se quiere meter en problemas con chicos de otros años.

Me estaba grabando el camino de la escuela a la casa de Alan para no perderme cuando regresemos a casa, aunque si llegó a hacerlo solo debo encender el GPS y marcar la dirección de mi casa para que nos lleve.

No he hablado mucho con Chris después de nuestro beso, creo que él no quiso arruinar el momento con uno de sus comentarios inoportunos y yo pues simplemente no tenía nada que decir, fue un buen momento entre los dos, así que es mejor pensar antes de hablar algo o al menos esperar a que ambos salgamos de esta pequeña nube de tensión en la que estamos.

Llegamos a una casa en la que ya estaba llena de estudiantes que estaban afuera y desde hace media cuadra se podía escuchar el sonido de la música. Chris estacionó el auto un poco más adelante, en donde encontró el puesto.

—Ven, dame las llaves. —extendí mi mano.

—¿Y si bebes?

—No me gusta beber, así que te puedo asegurar que pasare la noche con agua y soda o lo que sea que encuentre en la casa que no tenga alcohol.

Puso las llaves en mi mano—Bien, confío en ti. Vamos.

Bajé del auto sin esperarlo, haciendo que me mirara un poco mal cuando estuvo a mi lado—Relajate, estamos en una fiesta.

Entramos en la casa para buscar a sus amigos, quienes estaban ya en una mesa jugando a encestar una pelota en un vaso con cerveza. Cuando estuvimos a su lado ya le estaban ofreciendo el primer trago a Chris.