Capítulo 171

1.2K 113 3
                                    

—No eras un pequeño príncipe mimado, sino un niño tan normal como yo podría haber esperado dadas las circunstancias. De modo que mi plan estaba yendo bien. Y luego, bueno... recordarás los sucesos de tu primer año En Hogwarts tan bien como yo. Te enfrentaste magníficamente al desafío que te encontraste y más temprano (mucho más temprano)de lo que yo había anticipado, te encontraste cara a cara con Voldemort. Sobreviviste otra vez. Y aún hiciste más. Retrasaste su retorno al poder. Venciste una lucha de hombres. Yo estuve...más orgulloso de ti de lo que puedo decir. Y aun así todavía había un error en mi maravilloso plan. –dijo Dumbledore Un error obvio que yo sabía, incluso entonces,podría ser la perdición de todo. Y, aún sabiendo lo importante que era que mi plan tuviese éxito, me dije a mí mismo que no permitiría que este error lo echara todo a perder. Yo solo pude prever esto, por eso yo solo debía ser fuerte. Y aquí fue mi primera prueba, cuando estabas en la enfermería, débil por tú encuentro con Voldemort. 

—No entiendo lo que está diciendo –dijo Harry. 

—¿No recuerdas cuando me preguntaste, cuando estabas en la enfermería, por qué Voldemort había intentado matarte cuando eras un bebé?—Harry asintió. —¿Debería habértelo dicho entonces?—Harry se quedó mirando los ojos azules y no dijo nada, pero su corazón volvía a ir rápido otra vez. —¿No entiendes el error todavía? No... quizás no. Bueno, cómo sabes, decidí no responderte, me dije, era muy joven para saberlo. Yo nunca había tenido la intención de contártelo cuando tuvieras once años. Ese conocimiento sería demasiado a tan temprana edad. Debería haber reconocido las señales de peligro entonces.Debería haberme preguntado por qué no me sentí más molesto de que ya me hubieras preguntado la cuestión que yo sabía que, un día, debería tener una terrible respuesta. Debería haber reconocido que estaba demasiado feliz al pensar que no tenía que hacerlo aquel día en particular... Eras pequeño, demasiado pequeño. Entramos por lo tanto en tu segundo año en Hogwarts. Y una vez más, te encontraste con pruebas que incluso los magos ya crecidos, nunca han enfrentado: una vez más te desenvolviste mejor que en mis más fabulosos sueños. No me preguntaste otra vez, sin embargo, por qué Voldemort te había dejado aquella marca. Hablamos de tu cicatriz, oh sí... estuvimos muy, muy cerca de ese tema. ¿Por qué no te lo conté todo entonces? Bueno, me parecía que doce años eran, después de todo, mejor que los once para recibir tal información. Te permití dejar mi presencia, manchado de sangre, exhausto pero lleno de júbilo, y si sentí un punzada de inquietud de que debería, quizás, habértelo dicho entonces, fue rápidamente acallada. Eras todavía tan joven,verás, y no podía estropearlo todo aquella noche de triunfo...

Venus escuchaba con atención, era importante cada uno de los detalles que Dumbledore dijera en ese momento, Era tan importante que escuchara con determinacion lo que su viejo amigo tenia para decir.

 —¿Lo ves Harry? ¿Ves el error en mi brillante plan ahora? Había caído en la trampa que yo mismo había previsto, la que me había dicho que podría evitar, que debía evitar. Yo no... Me importaba mucho tu felicidad –dijo Dumbledore simplemente— Me preocupé más por tu felicidad que por que supieras la verdad, más por la paz de tu mente que por mi plan,más por tu vida que por las vidas que se podrían perder si el plan fallaba. En otras palabras, actué exactamente como Voldemort lo espera de los locos que queremos actuar. ¿Hay una defensa? Desafíe a alguien que te ha estado vigilando como yo (y te he vigilado más cerca de lo que podrías imaginar)no queriendo salvarte de más dolor del que ya habías sufrido.¿Qué importaba si un número elevado de personas anónimas y desconocidas y criaturas eran sacrificadas en un vago futuro, si aquí y ahora tú estabas vivo, y bueno... y ¿feliz? Nunca soñé que tendría a esa persona en mis manos. Entramos en tu tercer año. Vi de lejos como resistías y repelías a los dementores, como encontraste a Sirius, supiste lo que era y lo rescataste. ¿Iba yo a contarte entonces, justo cuando habías salvado a tu padrino de las garras del Ministerio? Pero ahora, alos 13 años, mis excusas se estaban acabando. Podrías ser joven,pero habías probado que eras excepcional. Mi conciencia estaba inquieta, Harry. Sabía que el momento llegaría pronto... Así que para tu cuarto año me permití traer a mi guerrera, Venus era alguien a quien no tenia planes de traer, por el bien de ella, y aun así la traje. Sabia que si de alguna forma la traía ella acataría las ordenes mejor que nadie, la mejor de la clase, siempre escabulléndose de los problemas, decidí que ella iba a ser a quien necesitarías.

La Promesa De Una WeasleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora